✨Happy new year✨

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¡Hola gente hermosa!
Vengo a felicitarlos por el año nuevo. Sé que es algo tarde, pero entiéndame un poco, me desvelé como si no hubiera un mañana y bueno tiene apenas un rato que me desperté (hace 6 horas).
Sé que a nadie le importa esto, y tienen razón en ignorar este anuncio. En fin, solo quería decirles que espero y todos podamos cumplir nuestros propósitos este año.

PD: si ven alguna falta de ortografía es porque creo que tengo resaca y no lo corregí bien.

[…]

Tweek y Craig eran dos jóvenes que se habían enamorado desde que se conocieron en la escuela.

Tweek era un Gamma, un tipo de persona con un vínculo especial con su pareja destinada, que podía sentir sus emociones y pensamientos.

Craig era un Beta, un tipo de persona que podía ofrecer apoyo y protección a su pareja Gamma.

Ambos se habían marcado hace unos días, lo que significaba que habían sellado su unión con un beso y una mordida en el cuello. Desde entonces, Tweek se sentía más tranquilo y feliz, y Craig más confiado y cariñoso.

Para celebrar su unión y el año nuevo, decidieron irse de vacaciones a México, un país que les parecía exótico y divertido para recibir el año nuevo.

Se alojaron en un hotel cerca del centro de la ciudad, donde disfrutaron de la vista del amanecer, el sol y el aire fresco que había aunque hubiera gente abrigada. También visitaron algunos lugares turísticos, como el Zócalo, el Museo Nacional de Antropología y las pirámides de Teotihuacán.

Todo lo hicieron en menos de tres días, para tener tiempo de disfrutar de todo un poco,  comieron tacos, barbacoa y carnitas. Si Clyde hubiera estado con ellos, no lo hubieran podido sacar de un puesto de tacos.

Tweek estaba fascinado por la cultura y la historia de México, y Craig le tomaba fotos y le compraba artesanías.

—Este alebrije es muy lindo, gracias amor.

Craig desvío la mirada cuando Tweek le hablo así de cariñoso. Siempre lo tomaba por sopresa con esas cosas.

—Te lo mereces. Además es un recuerdo de estás vacaciones —optó por responder el Beta azabache mientras abrazaba a su pareja.

—Te amo. Gracias por haberme traído.

—No tienes porque agradecer nada, te amo más que a mí vida y eres lo más importante para mí —un beso sello las palabras de Craig, haciendo sonreír a Tweek. Ambos era tan cursis y tan gays.


La tarde del 31 de diciembre, decidieron pasear por el centro de la ciudad, donde había mucha gente y ambiente festivo. Vieron algunos espectáculos callejeros, como mariachis, malabaristas y payasos.

Tweek se reía de las ocurrencias de los artistas, y Craig le abrazaba por la cintura. Se compraron unos sombreros y unos bigotes falsos, y se tomaron unas selfies divertidas. Se sintieron felices y libres.

Después de pasear, regresaron al hotel, donde se dieron una ducha por separado, para refrescarse y relajarse.

Tweek se puso un traje verde limón y Craig uno azul marino, y se miraron con admiración y amor. Se acostaron en la cama, y se besaron suavemente.

Se dijeron lo mucho que se querían, y lo afortunados que eran de haberse encontrado. Se quedaron dormidos en los brazos del otro, soñando con el futuro.

Unas horas después, se despertaron con el sonido de la alarma que habían puesto. Se levantaron, se arreglaron y bajaron a la fiesta del hotel, dónde tendrían su cena romántica esa noche del 31 de diciembre.

Se unieron a la multitud de huéspedes y empleados, que bailaban y cantaban al ritmo de la música. Se sirvieron unas copas de vino y unos bocadillos, y brindaron por su amor. Se divirtieron y disfrutaron de la noche.

Se sentaron en una mesa lejos de escenario dónde se llevaría acabo el conteo regresivo, y pidieron enchiladas, pozole y mole.

Tweek estaba nervioso por probar la comida picante, pero Craig le aseguró que le gustaría. Y así fue, Tweek encontró la comida deliciosa y sabrosa, y Craig se alegró de verlo disfrutar.

Mientras comían, hablaron de sus planes para el futuro, de sus sueños y metas.

Tweek quería ser un escritor famoso, y Craig un abogado exitoso.

—Y quizá después de eso, pueda la encargar. Me gustaría ver a un pequeño tú corriendo de aquí para allá en nuestra casa.

Tweek se sonrojo repentinamente por el comentario lleno de amor e ilusion de Craig. Por poco y se atraganta con su propia saliva.

—Aún no me siento preparado para ser papá, pero sé que estando contigo podremos hacerlo y seremos los mejores padres del mundo. —dijo Tweek, sonriendo hacia su pareja, apretando el agarre en sus manos.

—Tenemos tiempo, no hay que preocuparse por eso ahora. Solo quiero que disfrutemos el momento, de nosotros antes de que llegue un mini tú. Una prueba de nuestro amor. —le explico Craig a Tweek besando los dorsos de sus manos.

Se prometieron apoyarse mutuamente y estar siempre juntos. Se hicieron caricias y halagos, y se rieron de sus anécdotas y bromas. Se sentían felices y agradecidos por tenerse el uno al otro.

Cuando faltaban unos minutos para las doce, el mesero les trajo unas copas de champán y unas uvas. Les explicó que en México debían hacer ese ritual para año nuevo, que era común hacerlo, comerse una uva por cada campanada del reloj, y pedir un deseo por cada una.

Tweek y Craig aceptaron el reto, y se prepararon para seguir la cuenta regresiva.

Cuando el reloj marcó las doce, se comieron las uvas rápidamente, y se besaron apasionadamente. Se abrazaron fuerte, y se dijeron "Te amo" al oído.

Se deseaban lo mejor para el año nuevo, y para su relación.

Sabían que se enfrentarían a muchos retos y dificultades, pero también a muchas alegrías y sorpresas.

Estaban seguros de que, mientras estuvieran juntos, todo sería posible. Eran Tweek y Craig, un Gamma y un Beta, una pareja destinada.

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Espero que les haya gustado si es así déjenme saberlo en los comentarios.
PD: sé que tarde demasiado, pero apenas y puedo pensar, tengo mucho sueño jaja.
Nos vemos en la próxima actualización.

Tweek y Craig (One shorts Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora