Hola a todos.
Aquí está la siguiente entrega, centrada mucho más en los shinobi. Aquí estamos, por fin, ¡con la aparición del dúo de nukenin más famoso de Akatsuki! Ya era hora, dirán algunos.
En fin, espero que disfrutéis de este capítulo. Feliz lectura a todos. No dudéis en dejarme vuestras opiniones.
Disclaimer: Naruto pertenece a Masashi Kishimoto. Touhou Project pertenece a ZUN.
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Capítulo 40: Akatsuki entra en Acción
Dos personas vestidas con capas negras caminaban tranquilamente por una empinada carretera que conducía a un pico rocoso. El camino que tomaban estaba señalizado, lo cual era una suerte para ellos, ya que el paisaje no era de mucha ayuda. Iwa no kuni, la tierra de piedra, se llamaba así con acierto, ya que todo el territorio era una sucesión de valles de roca ocre, intercalados con altas mesetas de granito y pedregales oscuros que destripaban los escasos caminos.
Los dos hombres prosiguieron invariablemente su camino, ocultos por grandes sombreros de paja.
El más bajo de los dos se levantó el tocado, mostrando una mano con las uñas barnizadas que emergía de su capa. Con un gesto rápido, se levantó el sombrero, mostrando sus ojos inyectados en sangre que brillaban en la penumbra.
Con un gesto codificado, señaló en una dirección aproximada, a lo que su compañero respondió con una sonrisa de dientes triangulares.
Aquellos dos miembros de Akatsuki, los infames desertores Hoshigaki Kisame y Uchiha Itachi, continuaban incansables su camino, como si no les afectara el calor.
Era sólo una fachada. Mientras Itachi se mostraba escalofriantemente impasible, tras haber masacrado con éxito a su propio clan y torturado a su hermano, Kisame era mucho menos capaz de contener sus sentimientos. El nukenin era capaz de entrar en un estado de frenesí en un cuarto de segundo y el entorno no ayudaba a calmarlo.
Esta tierra era rocosa y fastidiosamente sombría. Todo era desolador, en medio de esas rocas grises y desnudas, desprovistas de hierba. Kisame no se sentía como en casa. Aunque era un desertor a la fuga, con la muerte pisándole los talones, Kisame recordaba raros momentos de felicidad en Kiri. La dictadura era cruel, pero era uno de los pocos lugares donde había podido establecerse y forjar algunos vínculos sociales. Las vastas extensiones de agua y los ríos que caían en cascada por las rocas le traían vagos y lejanos recuerdos.
Sin embargo, no eran más que retazos de su primera infancia. Había ingresado en la Academia muy pronto, y Kirigakure no sato era tristemente célebre por las masacres que allí tenían lugar, así como por la política de traición perpetua, que hacía que no fuera raro tener la sangre de un compatriota en las manos. Kisame no se arrepentía de aquellos días en los que había tenido que matar a la persona que amaba, sólo para salvarla de ser torturada. Esta aldea le había arrebatado toda esperanza y sólo la delirante propuesta del manipulador enmascarado le había mantenido cuerdo.
Kisame sabía que un hogar era un lugar donde uno se sentía bien, relativamente seguro y aceptado por los demás. El destino tenía un curioso sentido del humor, ya que sólo había descubierto estas cosas cuando se unió a la organización terrorista.
El desertor de piel azul observaba a su compañero desde el rabillo de sus pequeños ojos grises. Aunque Itachi no mostraba ninguna emoción, Kisame sabía que el moreno odiaba estos espacios abiertos. El Uchiha prefería estar en los frondosos bosques de su tierra natal, mucho más cómodos para tender emboscadas y jugar con los enemigos.
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La historia del impredecible shinobi Yakumo Naruto
AdventureComo cada año, Naruto huía de los aldeanos que sólo lo veían como Kyûbi y querían vengarse. Sin embargo, lo que no esperaba era conocer a la legendaria familia Yakumo. Criado rodeado de magia y de los Yôkais, Naruto está decidido a cumplir su sueño...