Nací para amarte

30.

Cecilia Abbey

-¡Por fin llegaste! – chilla Juliana abriéndome la puerta y me rio para abrazarla –
- ¿Soy la más esperada? – pregunto burlona y entro a casa para girarme a ver a Jul cerrar la puerta –
- Tú no, el chisme querida – responde Teresa saliendo de la cocina mientras entro a la sala y la miro mal –
- Idiota – digo y me lanza un beso – ¿Y Manuel? – pregunto mirando a todos lados y Jul se queja –
- Está con unos socios en el club jugando golf – responde en tono aburrido y nos reímos –
- Cosas que pasan – digo y me acerco a saludar a mi hermana, pero me detengo a verla pensativa – ¿Todo bien? – pregunto y alza la cara para sonreír de lado y asiente –
- Ven, siéntate – dice suavemente y le hago caso para sentarme a su lado –
- Toma – dice Jul y me entrega una copa de Whisky, abro los ojos y veo el reloj de la sala –
- Son las 5 de la tarde ¿estamos seguras? Es domingo, mañana tengo clase – comento no muy segura y todas ríen –
- Y nosotras tenemos reuniones – dice Lía y toma de su copa de Whisky y asiento lentamente –
- Ahora sí, cuéntanos todo – dice Teresa emocionada y suspiro suavemente para sonreír embelesada al recordar cada detalle de la noche de ayer –
- Todo fue – me quedo pensativa y me muerdo el labio inferior – perfecto – finalizo y todas me miran con cara de muchachas de quince años cuando nos contábamos de nuestros amores y me rio cuando Jul suspira –

Les comencé a contar desde que la fui a buscar, cuando llegamos al departamento, me causaba risa sus caras, también cuando le pedí a Pedro que dejará pasar a Maia sin preguntar, cuando subimos, incluso la cena, les iba contando casi todo, hay cosas que prefiero reservarme para mí y fue allí donde comenzaron las quejas.

-No es justo, yo quiero saber todo – chilla Teresa cruzándose de brazos y niego para seguir tomando mi trago –
- Yo exijo saber todo – dice Juliana para levantarse e ir por otra ronda de Whisky –
- No, lo que pasó en la habitación me la reservo – respondo y Lía también se queja haciéndome reír –
- Quiero conocerla más – dice Teresa y me le quedo mirando fijamente unos segundos –
- Que el tiempo lo diga – digo y ella asiente sonriendo –
- Me cae bien – dice Lía y volteo para verla, y ella se echa para atrás en el sofá –
- ¿Por qué? – pregunto curiosa y sonríe para cerrar los ojos –
- Porque hace algunos años que perdiste ese brillo en los ojos con Luciano – finaliza y Teresa le da la razón y volteo a verla, la pelinegra sonríe emocionada y me rio a carcajada –

Seguimos hablando luego de que Juliana vuelve con nuestras bebidas y así fue yendo nuestra tarde, a eso de las 8 de la noche me despido de esas ebrias que adoro y agarro mi cartera para salir de casa acompañada de Juliana, quien sé que está ebria porque no para de reír por cualquier tontería.

-Cecilia – dice cuando llegamos a mi coche y me giro a verla – cuídate ¿si? Y no se hagan daño como – dice y se queda en silencio pensativa –
- ¿Cómo Lía y tú? – pregunto y alza la cara para asentir triste – vale, así será – me acerco a ella y la abrazo fuerte – no le sigas haciendo daño a mi hermana – susurro por primera vez al tocar ese tema y se aleja para verme unos segundos y sonreímos simultáneas –
- Yo la quiero enserio, pero tarde lo descubrí – susurro y asiento triste –
- Nos vemos cariño, se cuidan – me despido y cuando estoy apunto de subirme al coche, se estaciona Manuel y sonrío para mirar a Juliana quien está seria –
- Mi Ceci – chilla Manuel al bajarse de la camioneta y me acerco a él –
- ¿Cuándo nos reuniremos la vieja escuela? – pregunto burlona y mi amigo se ríe asintiendo –
- Por mí no hay problema, ustedes me dicen – responde y lo abrazo para reírme –

Hablo unos minutos con Manuel y luego nos acercamos a mi coche, saluda a Juliana y me despido de ambos para finalmente subirme a mi coche, dejo mi cartera a un lado y me pongo el cinturón de seguridad, prendo el coche y la radio, me detengo cuando en la radio suena Ayer preguntaron por ti de Los Ángeles negros, resoplo y comienzo a manejar hasta casa, en el camino iba tarareando la canción recordando mis tiempos de juventud.