G. E. W. W.: D. E. M. |2|

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La intención asesina en sus ojos se hizo más espesa.

Después de bastante tiempo, Zhao Lin abrió lentamente la boca: 

-Detén a Yun Qingya y yo mataré a Yun Luofeng. —se puso de pie y dijo inexpresivamente—: ¡Comparada con Yun Qingya, ella es más peligrosa!

Como médica que incluso podía curar a Yun Qingya, ¿qué tan fuerte era su habilidad médica?

También...

Comparado con un cultivador de espíritus, un médico era más peligroso. Al menos, un cultivador espiritual necesitaba tiempo para crecer y mejorar. Durante ese proceso, tendrían muchas oportunidades de matarlos.

¡Pero los médicos eran diferentes!

Si tuviera la suerte de conocer a una persona fuerte que estuviera gravemente enferma y lo tratara, ¡entonces esa persona fuerte le debería un favor! ¡Este favor podría subvertir toda la Secta Espiritual! ¡Entonces Yun Luofeng debía morir!

-Bien —respondió el falso eunuco con voz profunda. Ya sin menospreciar a Yun Qingya, de repente sacó una cadena de su anillo espacial.— ¡WHOOSH! —agitó la cadena hacia Yun Qingya.

-¡Cualquiera que se interponga en el camino de la Secta Espiritual morirá!

WHOOSH!

La cadena emitió un sonido sordo y rápidamente atrapó la muñeca de Yun Qingya, y luego llamó a Zhao Lin.

-¡Vamos, ve a matar a Yun Luofeng!

Los ojos de Zhao Lin se oscurecieron y rápidamente corrió hacia Yun Luofeng. Agitó la espada larga que tenía en la mano, proyectando una luz fría. Con un aura asesina, se abalanzó hacia la chica que estaba parada en la brisa.

La chica estaba perezosamente apoyada contra un árbol, con una sonrisa maliciosa flotando en sus labios. Ni siquiera levantó la vista, como si no sintiera la existencia de la espada.

De pie a un lado, Qing Yan observó la escena, sus ojos revelaban un espeso sarcasmo. ¿Estas personas quieren lastimar a la señorita? Incluso cien cultivadores espirituales de alto nivel de alto rango sumados no podrían resistir a la señorita. La señorita no tomó ninguna medida en este momento solo para ayudar al Segundo Maestro a recuperar su confianza. Después de todo, durante todos estos años, el Segundo Maestro se escondió en la oscuridad y no salió para proteger a la señorita, ¡por lo que el Segundo Maestro siempre se sintió culpable e inferior! Por eso la señorita no les ha hecho nada a estas personas.

¡PAH! 

Un claro crujido resonó en el silencioso patio delantero.

El falso eunuco volvió a sus sentidos solo para ver que Yun Qingya había roto la cadena que lo había atado. Su túnica azul ondeó rápidamente y protegió a Yun Luofeng con su propio cuerpo.

-¡Estás cortejando a la muerte!

Este hombre, que siempre había sido apacible e indiferente, finalmente estalló en un grito de rabia. De repente tenía una espada de bronce en la mano y la apuñaló en el pecho de Zhao Lin. La sangre salpicó y tiñó de rojo la bata azul del hombre. Levantó la vista con una mirada fría y observó al anciano caer lentamente frente a él.

-Conmigo aquí, ¿quién se atreve a lastimar a la pequeña Feng'er?

Una vez no tuvo poder para protegerla, ¡pero ahora nunca permitiría que nadie la intimidara! Al mirar la escena frente a él, el falso eunuco quedó atónito y su viejo rostro mostraba una expresión de miedo. ¡Zhao Lin estaba muerto! ¡Zhao Lin, cuya fuerza era casi la misma que la suya, murió a manos de Yun Qingya tan fácilmente!

Si se abría camino hacia adelante, probablemente tendría el mismo final que Zhao Lin. Al pensar en esto, el corazón del falso eunuco tembló y una palabra le vino a la mente: ¡Escapa!

Cuando la palabra apareció en su mente, ya no dudó, se dio la vuelta y trató de huir del patio. Sin embargo, antes de que pudiera salir por la puerta, se detuvo.

La chica se apoyó perezosamente contra la puerta, sus ojos oscuros brillaban con una luz malvada y lo miraba con una sonrisa.