Amber miro con temor la puerta frente a ella, era la primera vez que se atrevía a visitar a Luca desde que estaba en coma.
Al tocar la palanca de la puerta pudo notar que estaba temblando, que su boca se sentía seca y que en cualquier momento saldría corriendo.
La última vez que vio al chico habían discutido, el había dicho que la odiaba y ahora el no podía despertar.
Todo por su culpa, todo por mentirle, todo por nada. Porque Amity seguía con Lucia, porque su hermanita estaba embarazada y el chico que quería podía nunca despertar.
Pero ahora estaba ahí, de pie frente a la habitación donde estaba Luca, rezando porque el chico despertara, suplicando un milagro que los hiciera conocerse en otra situación.
Tal vez en un parque. Que Luca estuviera patinando y cayera de su patineta que saldría disparada hacia una descuidada Amber que pasaba el día con sus hermanos.
Amelia miraría al chico Noceda con fastidio y después Amber tomaría esa patineta entre sus manos dispuesta a ver al culpable.
—Lo siento mucho— diría Luca con el rostro rojo.
—Fijate lo que haces idiot— diría Amber pero no terminaría de hablar porque el era lindo.
Ambos tratarian de disimular esos nervios hasta que Edric y Emira se comenzarán a reír.
Era tan fácil vivir en esa fantasía, un lugar en su mente dónde nada malo hubiera ocurrido, dónde el odio que tenía dentro no existiera.
Pero era el mundo real, ella solo tenía 16 años, su hermanita solo tenía 14 y era su deber intentar protegerla.
No tenía tiempo para Luca. Nunca lo tuvo y aún así no pudo evitar quererlo con todo su corazón.
Porque Luca era el tipo de chico que tiene una risa ruidosa, el tipo de chico que pide su helado con relleno porque ama el chocolate, el tipo que se detiene en el centro comercial cuando ve un niño perdido y lo ayuda.
Porque Luca siempre sería el tipo de chico que puede tomar tu mano mientras sientes que el mundo se te cae en los hombros.
Y ella era Amber Blight. Una chica más del montón.
—¿Entraras o no?— cuestino Belos mirando con diversión a la chica.
Amber asíntio para abrir la puerta y mirarlo por primera vez ahí, tranquilo mientras el ruido del monitor inundaba la habitación.
Su rostro tenía aún algunos golpes pequeños y un par de cicatrices nuevas, pero el seguía vivo.
Luchaba en esa cama de hospital cada segundo del día y lo había hecho durante tanto tiempo que Amber solo pudo llorar.
Belos quien miraba todo desde la distancia sonrió, era verdad que las niñas Blight tenían una horrible debilidad por los Noceda pero en aquel instante mirando a Amber junto a Luca deseo que por una vez todo saliera bien para ambas familias.
(...)
Luz tomo la mano de Amity con fuerza, estaban alejandose lo suficiente de el departamento de Lucía o al menos se marchaban a aquel escondite de los hermanos Blight que nadie más que Luca y ellos sabían.
—Nos va a encontrar— exclamo Amity dejando de caminar —No lo entiendes Luz, ella te va a lastimar... No quiero que te lastime a ti también.
—Hey mírame— pidió la castaña tomando la mano de la peliverde —Amity no dejaré que nada de eso ocurra, nadie más saldrá herido.
—¡No lo entiendes!— grito la Blight soltando la mano de Luz —Ella no se va a detener, no importa que hagas no me dejara en paz, tú no viste lo que le hizo a Luca, no sabes lo que me ha hecho... Ella nos va a encontrar y se que te va a dañar.
Luz suspiró sacando su frustración, entendía que Amity estaba mal, entendía que todo lo que vivió era un infierno, pero ahora mismo necesitaba desesperadamente que por un momento creyera en que podrían salir de eso.
—Te quiero Amity y tú me quieres a mí— exclamo la alfa tomando las mejillas de la Omega obligandola a verla —Y no me importa nada más que saber que estás bien, saber que intente cuidarte porque no quiero pensar en futuro sin ti, no quiero que vuelvas a pasar por lo de anoche, porque me destrozó escucharte llorar y si no te vas ahora, si no te alejas de Lucía se que jamás podremos parar esto Amity.
La mirada de Luz era tan sincera que por un momento Amity creyó que aquello solo era una mentira más de su mente hasta que la escucho respirar, sintió aquel aroma a chocolate y entendió que era su "Luz".
—Eres hermosa Amity y no mereces la mierda que está pasando, no mereces llorar porque no quieres hacer algo y yo te quiero— confeso la castaña apunto de llorar —Asi que por favor, por primera vez confia en que nos voy a proteger, en que cuando termine esto podremos tener citas sin que tengas miedo, confia en mi porque lo único que quiero es cuidar de ti y que tú quieras que yo lo haga.
La Blight beso a Luz quien se sorprendió por ello pero no sé alejo.
Beso a Luz porque la quería tanto que aveces sentía que su corazón explotaría de amor y porque estaba segura de que su amor era correspondido.
—Prométeme que si no funciona vas a correr— pidió Amity llorando mientras se aferraba a Luz —Prométeme que no dejaras que te lastime por mi.
—No puedo prometer eso— susurro Luz acariciando el cabello color menta —Pero puedo prometer que haré todo porque esto funcione.
(...)
Cuando era pequeño Luca quería ser un maldito héroe, quería ser el tipo de hombre que da seguridad a otros, pero cuando fue consiente de su cuerpo no pudo evitar asustarse.
Estaba en la cama de un hospital, Amber dormida a su lado y Belos mirando un periódico.
Se quitó la mascarilla provocando que el detective se pusiera de pie y llamará con desesperación a un doctor.
Luca sabía que tenía algo que hacer. Tenía que decirlo ahora que podía hablar, ahora que estaba despierto de nuevo.
—No hables— exclamo Belos tomando los hombros del chico —Espera al médico
Luca negó para tomar la corbata del detective Belos quien se sorprendió por la fuerza que tenía el chico para haber despertado del coma hace unos instantes.
—Es Lucia— exclamo Luca con la voz ronca —Lucia abusa de Amity Blight, abuso de Amelia Blight y fue quien me golpeó, así que ahora vaya a hacer su maldito trabajo.
—Maldito mocoso— respondió Belos con una sonrisa —Tal vez su tienes algo de héroe en ti.
Luca sonrió para mirar a Amber quien despertó cuando el equipo médico entro corriendo a la habitación a la par que Belos salía rápidamente del lugar.
En esta ocasión Belos se aseguraría de terminar con todo de una buena vez por todas.
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Favorite Crime - Lumity (Omegaverse)
RomanceLa odiaba. Odiaba la música fuerte que parecía gritarle que era una idiota. Odiaba el sabor de la marihuana en sus labios. Odiaba la amargura en su paladar cada que la cerveza bajaba por su garganta. Odiaba marearse entre el humo, el alcohol y las l...