La Princesa del Infierno

14 Comienzo

Todo tiene un comienzo y este comenzó cuando a Sera le llegaron varias quejas de que Adam, la creación favorita de Dios, estaba causando algunos problemas en el segundo cielo. Y ella debía encargarse de eso.

Recuerda haberlo visto tirado en alguna escalera afuera de un local de malteadas, no existía licor en el segundo cielo, pero si en el quinto cielo, que Adam estuviera tirado como ebrio era por una combinación de frutas bastante ácidas que causaron el ligero sabor amargo en su organismo.

—Adam...

—Lárgate, déjame en paz...

Sera los hizo desaparecer para reaparecer en su oficina privada, con cansancio se tomó el puente de la nariz ligeramente frustrada. Con Dios recluido en el séptimo cielo quedó bajo su ala el cuidado y vigilancia de Adam.

—¿Por qué causas tantos problemas?

—Déjame solo.

Dijo el hombre caminando hacia un sofá y dejándose caer de cara este con una pierna en el aire. Sera gimió irritada por la actitud de Adam. Sabía que el hombre necesitaba una nueva misión, algo que hacer y no solo vagar por el cielo como un muerto causando altercados.

Ser el primer hombre y que en un momento lo había perdido todo, perdió a su primera mujer, su compañera y a su socio. Aceptaba que había arruinado las cosas con Lilith, imponiéndose como se le había dicho. Sintiendo celos y envidia de que la misma pasará más tiempo con el revoltoso de Lucifer que no venía a nada más que a crear pequeños patos y pensar en nuevas invenciones, ensayando música con Lilith ambos daban al Edén un clima agradable del que no podía evitar sentirse excluido.

Cuando el mismo Lucifer le regaló un instrumento llamado guitarra y le dio algunas clases mientras él componía con Lilith fue solo cuando se sintió bien. Pero pronto se dio cuenta que su actitud arrogante cuando el ángel no estaba alejaba a Lilith, y que con cada regreso la mujer se veía cautivada por Lucifer y no lo iba a permitir.

Adam iba a dejar claro eso.

Y la primera y última vez que Adam ejercío fuerza sobre Lilith para obligarla hacer su voluntad fue la primera vez que vio al general amable e ingenuo ángel parecer realmente molesto. Tras ese incidente Dios iba a castigar a Lilith un castigo horrendo fue su maldición, Lucifer igual estaba en una cuerda floja pero aún se encontraba en la alta estima de Dios, pero la gota que derramó él vaso fue cuando Lucifer irrumpió en el juzgado defendiendo a Lilith de cualquier castigo.

Se puso frente a ella y se rebeló contra Dios, sólo entonces ambos fueron desterrados y Adam por un momento se sintió culpable, había perdido a su esposa y único amigo. Tiempo después Dios creó a Eva y por alguna razón Adam decidió cambiar, ser mejor, aplicar lo que había visto de su viejo amigo; así su relación con Eva iba de una increíble manera.

Abrazándola cada que tenía oportunidad y regalándole flores cada mañana pese a estar en un hermoso jardín donde las flores nunca sobraban. Y fueron felices, él fue feliz hasta que ellos regresaron. Engañaron a Eva con cometer la única prohibición que se les había impuesto, ingenua aceptó la bondad y preocupación falsa de Lucifer y Lilith y su mundo entero desapareció.

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