Un Club Entre Dos

54. Hopewell VS El Futuro

Como todo Año Nuevo, llegaron expectativas, esperanzas, membresías a gimnasios de gente muy motivada en los primeros días de enero que a lo mucho asisten a dos sesiones, y claro, el regreso a clases.

Los jóvenes de Hopewell compartían historias y experiencias sobre lo ocurrido en la temporada decembrina; viajes de vacaciones, regalos deseados, revelaciones de secretos familiares con más drama que telenovela turca escrita por mexicanos, y rumores que cobraban más fuerza entre menos se sabía lo que ocurría.

—¿Oyeron que el equipo de animadoras se disolvió? —era un comentario recurrente por los estudiantes (y no solo ellos) en los pasillos de la escuela.

Tampoco ayudaba a disipar las especulaciones que Heather Novak, capitana de la cuadrilla, se ausentó, y no solo me refiero a la institución educativa, sino de todas sus redes sociales. No era una chica conocida por su humildad, así que era bastante activa en estas últimas, presumiendo cómo se bronceaba en las playas de Barbados o iba de compras a Milán.

Pero desde hace semanas, inclusive sus cuentas se encontraban en silencio.

Y la reacción de la escuela, fuera de la sorpresa inicial, fue de júbilo total.

—¿No creen que se siente una vibra diferente en el cole? —Sarah preguntó, conforme ella, junto a Allyson y Jake se abrían paso en los corredores de Hopewell High.

—"Vibra" no es el término más científicamente preciso —la rubia replicó—, así que te pediré que seas un poco más específica.

—Por lo pronto veo más sonrisas —Jake intervino—, y esas no son comunes en este lugar, excepto cuando una chica llama de urgencia a su novio para decirle "¡No estoy embarazada!"

—Puede que fuera el sentido de renovación, la esperanza, la ilusión de comenzar una vez más—Allyson sugirió.

—Puede que fuera que la pesada de Heather Novak no volvería a la escuela —Sarah comentó.

—¿Por qué dices eso?

—Ver al club de ciencias y a las animadoras restantes cantar "La Bruja Ha Muerto" de El Mago de Oz es una buena pista.

—No solo estudiantes —Jake comentó.

—¡Ding-dong! ¡La bruja murió! ¿Quién sufrió? ¡La bruja murió!

—¡Profesor Kovacs! —Allyson exclamó con (casi) indignación.

—¡Hey! ¡No me juzguen! ¡No saben lo que esa chica podría decir sobre uno! —se justificó el docente.

—¿Heather le hacía bullying, profesor?

—Bueno —el maestro aclaró su garganta—, por favor, entren a clase que ya estamos a punto de empezar.

Dejando traumas para los cuales debería estar mucho más inmunizado como adulto que es de lado, el profesor Kovacs dio la bienvenida a sus estudiantes al nuevo semestre, y no tardó en abordar el tema de la siguiente lección.

—¿No deberíamos hablar primero de lo que vivimos durante las fiestas? —una Sarah, llena de ilusión, cuestionó.

—Ya es enero, señorita Greenberg —contestó el profesor—. La temporada de los buenos sentimientos ya pasó, ahora es la temporada de decir "puta madre, ¿por qué me endeudé tanto en diciembre?". Así que, si no les molesta, saltaremos al tema de la Ciencia Ficción —añadió escribiendo en la pizarra del aula, y sé lo que están pensando: "ciencia ficción" es una contradicción de términos.

A tales palabras prosiguió un silencio absoluto: nadie tenía cosa alguna que decir, porque a nadie le pasó por la cabeza el razonamiento del maestro.