9

993 91 6
                                    

NO SABÍAN A LO QUE ESTABAN A PUNTO DE ENFRENTARSE, pero eso no impidió que Robby y Marianne corrieran como alma que lleva el diablo por los pasillos del West Valley quitando a la gente de por medio y empujándolos si era necesario

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

NO SABÍAN A LO QUE ESTABAN A PUNTO DE ENFRENTARSE, pero eso no impidió que Robby y Marianne corrieran como alma que lleva el diablo por los pasillos del West Valley quitando a la gente de por medio y empujándolos si era necesario.

Marie sentía un nudo en el estómago...

¿De qué bando se posicionaría? Cobra Kai era el dojo que se lo había dado todo, pero no podía ponerse de parte de tiranos como Kresse, Tory o Hawk. Simplemente no podía.

«Joder. Joder. Joder

Finalmente, los chicos llegaron a una intersección y Marie vio ya allí a Sam observando a Tory y a la rubia con una mirada asesina que le heló la sangre a la latina.

—Vi lo que hiciste en la fiesta—escupió Tory deteniéndose y haciendo que Sam la imitara—. Besaste a Miguel.

Todo el mundo comenzó a reír y Sam agachó la cabeza. Marie hizo lo mismo y Robby la miró, comprendiendo que ella le había ocultado esa información.

—¿Tú lo sabías?

—Acababa de contármelo...—Marie quiso defenderse, pero entonces Tory le dio el primer golpe a Sam y se olvidó completamente de la mirada dolida del ojiazul.

Y todo se fue a la mierda.

Tory y Sam estaban rodeadas por estudiantes que animaban la pelea, algunos grabando con sus teléfonos mientras ellas intercambiaban golpes con rapidez y rabia. Desde luego se veía que Tory daba más golpes y Sam no quería luchar, ya que la primera iba ganando a la segunda. Marie sintió una mezcla de preocupación y desesperación. No podía creer que nadie intentara detenerlas, y su instinto fue intervenir. Quiso meterse entre las dos, gritar para que pararan, pero el sentido común la detuvo.

—¡Parad!—chilló ella entre la marea de gritos que animaban la pelea—. ¡Parad las dos!

—¡Cállate ya zorra!—le gritó Tory sin mirarla y dándole un puñetazo a Sam en el pómulo.

—No...—Demetri había aparecido mágicamente a su lado y le agarró el brazo—. No, Marie. Tú eres más lista...

—¡Ven aquí joder!

Marie se quitó a Demetri de encima y consumida por la ira le lanzó la mochila a su amigo para que se la sostuviera. Dando un paso al frente, Marie se lanzó hacia Tory, sorprendiendo a todos, incluida Sam.

—¿Vas a ayudarme?—inquirió la Larusso esperanzada. Era buena en karate, pero no le habían enseñado a golpear primero y en eso Marie ya tenía experiencia.

—Eso parece—jadeó la castaña con los puños en alto a tiempo de quitarse a Tory de encima.

Con la adrenalina a tope, Marie se unió a la pelea, moviéndose con una energía que no sabía que tenía. Cada golpe que daba estaba cargado de la frustración y la ira que había acumulado durante tanto tiempo, no solo hacia Tory, sino hacia todo.

𝗥𝗘𝗔𝗗𝗬 𝗙𝗢𝗥 𝗜𝗧──𝐄𝐥𝐢 𝐌𝐨𝐬𝐤𝐨𝐰𝐢𝐭𝐳 ✧.*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora