12

1.6K 156 21
                                    

EL CONTACTO FÍSICO NO ERA UNO DE SUS PLACERES FAVORITOS

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

EL CONTACTO FÍSICO NO ERA UNO DE SUS PLACERES FAVORITOS. Puede que porque nadie la había querido tocar tanto como Eli parecía querer hacerlo, en el sentido más inocente de la palabra. Con él iba más allá de los besos (teniendo en cuanta que solo lo habían hecho dos veces): A Hawk le encantaba estar rozándole los nudillos, apretándole la mano o dejarse caer ligeramente sobre ella.

Daba igual el gesto, pero siempre que podía, la estaba tocando.

Era su manera de demostrarle que estaba todavía con ella y que no iba a irse a ningún lado.

Y teniendo en cuenta los nervios que Marianne tenía en esos instantes, necesitaba todo el apoyo posible.

—¿Y ahora qué?—le preguntó Sam con nerviosismo a Johnny y Daniel, que tras una bonita charla pacífica, habían decidido unir fuerzas y colaborar al final.

Ambos senséis se miraron mutuamente y contuvieron expresiones diferentes: Mientras que el primero se mordía la lengua con contundencia, el segundo trataba de encontrar las palabras adecuadas.

Marie frunció el ceño.

—Solo una de nosotras va a representar a Miyagi-Do y Colmillo de Águila—exclamó ella con gesto tenso.

Al ver a ambos adultos agachar la cabeza, entendió que había dado en el clavo. Los ojos de la latina buscaron a la Larusso y sintió una punzada en el estómago.

No quería pelear por el puesto en la final, pero desde luego, no quería renunciar a él.

Marie soltó la mano de Hawk y se dio la vuelta para pasarse las manos por la cara agobiada. No le gustaba aquella tesitura en la que se encontraba con su mejor amiga.  Sabía que la final del torneo estaba a solo un paso y que esa pelea sería crucial, así que por eso intentó pensar con la cabeza y no con el corazón y las entrañas. Mientras miraba a Sam igual de frustrada que ella, no podía evitar reflexionar sobre quién debería enfrentarse a Tory en la final.

«¿Debería ser yo?» Pensó mordiéndose las uñas.

Sentía en su interior un deseo ardiente de ser la que subiera al tatami.

Quería esa victoria, necesitaba sentir el peso de un triunfo como ese en su espalda, algo que validara todo su esfuerzo, todo el sacrificio que había hecho hasta ese momento. Todo lo que había entrenado, todo lo que había sacrificado y arriesgado, todas las tardes del trabajo al dojo... Querían que valiera la pena.

Sentía que se merecía ese combate.

Sabía que vencer a Tory sería una hazaña importante, un símbolo de su progreso, y más que todo, un golpe a sus propios miedos y dudas. No podía negar que la rubia le incitaba cierto respeto y quería vencerla para acallar esas voces de su interior. La idea de ser ella quien luchara la final la llenaba de determinación, con una agresividad y lucha muy propia de Colmillo de Águila.

𝗥𝗘𝗔𝗗𝗬 𝗙𝗢𝗥 𝗜𝗧──𝐄𝐥𝐢 𝐌𝐨𝐬𝐤𝐨𝐰𝐢𝐭𝐳 ✧.*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora