Del Odio Al Amor

73. Les contamos y más

Narra Kiki

Salí de mi dormitorio y me dirigí al de Vio. Mientras bajaba las escaleras, seguía pensando en todo lo que habíamos pasado y lo feliz que me hacía. Sin más, llegué y toqué la puerta.

Cuando la vi, se me caía la baba. Estaba bellísima con su vestido blanco, su leve maquillaje y esa sonrisa que me enamora. Estuvimos un rato en su habitación y luego salimos al campo, donde nos vimos por primera vez. Estaba nerviosa e intenté que Vio no lo notara. Después fuimos a nuestra segunda parada, la azotea, donde comimos tarta y hablamos de todo un poco. Respiré hondo mientras pulsaba el botón del ascensor.

Vendé los ojos de Vio al entrar. Cuando la puerta se cerró, coloqué un cuadro que decía: "Violeta Hódar, ¿me permites ser tu novia?". Siempre he considerado que el ¿Quieres ser mi novia? está muy gastado; siempre es "quieres", como si la otra persona no lo deseara también. ¿Por qué no puede ser ¿Me permites ser tu novia? dando un significado más profundo?

Puse el cuadro y le quité la venda. Empezó a sonar "Misty" y otras canciones mientras leíamos, porque tardamos un buen rato leyendo y viendo las frases. Después de ese rato, respiré hondo, giré a Vio para que viera la puerta y le entregué unas rosas.

Kiki: Violeta Hódar, ¿quieres ser mi novia? —pregunté mirándola. Los nervios me hicieron usar esa frase, aunque primero dije la otra.

Vio: Sí, Chiara Oliver, sí quiero, sí, sí, sí. —respondió feliz.

Kiki: Te amo. —dije, capturando sus labios en una danza lenta y segura, demostrando nuestro amor y confirmando cuánto nos queremos. Luego, ella profundizó el beso un poco más, y después se alejó dejando besos cortos por toda mi cara. Entre beso y risa, me dijo que me amaba.

Vio: Te amo. —beso. Eres la mejor. —beso. Te amo. —dijo, mordiéndome al final.

Kiki: Me haces daño. —dije, agarrando su mejilla. Te tengo otra sorpresa, amor. —sonreí.

Vio: ¿Qué es, qué es? —dijo como una niña pequeña.

Kiki: Cierra los ojos. —sonreí.

Vio: Bueno. —dijo cerrando los ojos.

Kiki: Ya puedes abrirlos. —dije sonriendo.

Vio: Quedé fascinada. —dijo mirando la cadena.

Kiki: La "C", de Chiara, sí señora. —reí.

Vio: Me encanta, así como la canción de Taylor.

Kiki: Si llevas mi inicial, no es porque me pertenezcas, sino porque te conozco. —la besé otra vez.

Vio: Te compraré la "V".

Kiki: No es necesario. —dije sin más.

Vio: Sí es necesario. —me miró.

Kiki: Compré las dos. —mostrándome el collar con la "V". ¿Te gusta?

Vio: Me encanta.

Después de eso, seguimos leyendo las otras notas y escuchando las canciones que puse. Le enseñé que había una cámara instalada y reímos. Al salir del ascensor, nos hicimos una foto para recordar siempre este día, que de ahora en adelante sería mi favorito: el 1, y el de ella igual.

Vio: Mi día favorito es el 1.

Kiki: ¿Ah, sí? —dije sonriendo. ¿Por qué?

Vio: Porque por fin puedo decir que eres mi novia. —rió.

Kiki: Y el mío igual. —dije, abrazándola y dejándo un beso en su frente.

Bajamos del ascensor. Vio me abrazó; esas cosas me aterran. Fuimos a su dormitorio donde ya Denna había dejado la cesta de picnic con golosinas y sándwiches para comer mientras veíamos una película, que al final fue Harry Potter. Esa noche Denna no vino a dormir, se quedó con las chicas. Mientras veíamos la película, hablábamos para que no me durmiera. No sé si son las películas o es porque me siento segura en sus brazos para dormir.