Del Odio Al Amor

78. Previas

Narra Kiki

Después de varios días de planificación, organización y más del baile, empezaron con las pedidas. Yo supuse que, como Vio es mi novia, iríamos juntas, pero no contaba con que ella quería que se lo pidiera. Bueno, eso tuvo solución: me lo pidió ella con una carta hermosa y una torta de chocolate, una de nuestras favoritas. Ahora comenzábamos a pensar cómo íbamos a ir, ya que era con temática de paraíso infernal.

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Kiki: ¡Qué bueno! —riendo— ¿vemos cómo iremos? ¿Vamos conjuntadas? O no quieres. —puchero

Vio: Vamos conjuntadas. —abrazándome

Kiki: ¡Ole!

Vio: ¿Y qué color?

Kiki: Amor, ahí te dejo todo en tus manos, tú escoges y yo pago.

Vio: ¿Vestido? —bajándose de mí

Kiki: Mmmmm

Vio: Traje, sí, traje, uno que resalte más tus ojos.

Kiki: Me gusta, serás mi estilista. —besando su frente

Vio: Este fin de semana iremos a Madrid a ver ropa. —feliz

Kiki: ¿Y si vamos a Italia o París? No sé, algo que esté lejos de nuestros padres. —rascándome el cuello

Vio: ¿Quieres ir a París conmigo?

Kiki: ¿Me estás invitando? —mirándola

Vio: Sí, pero la que hizo la invitación fuiste tú. —riendo

Kiki: No, no, yo propuse ir, tú invitaste.

Vio: Bueno. —dándome la espalda— Sangre sucia. —susurrando

Kiki: ¿Qué me has dicho? —riendo

Vio: Nada. —aún de espaldas

Kiki: Bueno, igual echaba de menos que me llames así, te amo y el viernes vamos a ver tu vestido y mi traje, ¿vale?

Vio: Vale, ¿a Madrid?

Kiki: No, a París, o Italia, o donde sea menos Madrid.

Vio: Está bien. —volteando a verme

Kiki: Te amo.

Vio: Y yo más, sangre sucia. —abrazándome

Kiki: Paz.

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Viernes 23 de noviembre...

Estaba esperando a que Violeta bajara para ir a ver la ropa para el baile, pero estaba tardando. Solo le dije que se pusiera cómoda y bajara, y Dios, ¿qué tanto?

Luego de una hora, baja con Denna y Álex.

Violeta: Amor...

Kiki: Dime.

Violeta: Denna y Álex se nos unen al viaje.

Kiki: Me lo suponía. —sonriendo

Denna: ¿Vamos en nuestro jet?

Kiki: No.

Violeta: ¿En el tuyo?

Kiki: No, ya que viene Álex, en el de él, por seguridad. —mirándolas

Álex: Vale, dejo que llame a mi piloto.

*

Primero fuimos a Italia a ver los vestidos de las chicas. Denna terminó comprando un vestido rojo brillante, pero a Violeta no le gustó ninguno. Fuimos a más de 10 tiendas, y nada.