89. Hora Cero IlI

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Narra Vio

Veo que Chiara mira a nuestros padres y luego me mira a mí. Vimos cómo nuestros padres se golpearon y, luego de un rato, se separaron. Josep empezó a insultar a mi padre y este le respondió. Veo que Chiara tiene la misma mirada de odio de su padre, con sus manos tensas.

Vio: Papá, ya basta. - alterada

Juan Carlos: Basta. - resoplando

Josep: Tú y tu familia son unos subnormales, falsos, mentirosos, ladrones, hipócritas. Eres un mal parido, hiciste que tu hija le lavara el cerebro a la mía. - enojado

Vio: ¿Qué dice? - mirando a Kiki, quien no decía nada

Juan Carlos: No le hagas caso, Violeta. Este subnormal es un capullo egocéntrico que solo piensa en él mismo. Cree que, por tener una cara bonita, todos andarán detrás de él. Eso es lo que se dice...

Josep: ¡Imbécil! - mirando con odio a mi papá. Veo que Kiki solo miraba a su padre y al mío, y no decía nada. Ambos siguieron insultándose, atacándose uno al otro. Josep tenía sangre en la boca, y papá también.

Guillermo: Josep, ya basta. Vayamos al grano. ¿Dónde está la dirección? Oye tú, Hódar, niña, ¿dónde está la dirección?

Vio: Me llamo Violeta, señor. - mirándolo fijamente

Guillermo: Da igual, ¿dónde queda la dirección?

Kiki: Está en el otro pabellón. - mirando a su abuelo

Guillermo: Josep, vamos.

Veo que Josep se acomoda la camisa y se limpia el labio. Vuelve a ver a Chiara y luego a mí.

Narra Vio

Josep miraba a Chiara con ojos llenos de reproche, incapaz de contener la ira que había estado acumulando desde que escuchó los rumores sobre su hija. Sentí el ambiente tenso, mi lugar seguro estaba en una especie de terremoto, ya no lo sentía. Estaba a mi lado, pero con sus ojitos verdes cargados de impotencia y una ira descomunal.

Josep: Chiara, ¿es cierto lo de la noticia? - con voz firme

Veo que Chiara no dice nada, solo lo mira. No logro descifrar lo que transmite, pero no es mi Kiki, no es mi bicho, ese no lo es. Quiero creerlo.

Josep: Te estoy hablando, jovencita. - gritando

Guillermo: ¡Chiara, habla hija! - con voz firme y enojado

Veo que Kiki resopló, se acomodó la sudadera y, sin mirarme y sin vacilar, lanzó un dardo directo a mi corazón, haciendo que su padre y su abuelo sonrieran.

Chiara: Papá, esas noticias son falsas. - suspirando - No sé quién las difundió, pero no tienen nada de verdad. Nunca me enamoraría de una Hódar.

Josep: Las fotos están claras. - enojado

Chiara: Papá, tienes que creerme. No hay nada entre ella y yo. - mirándome con desdén

Josep: ¿Qué hacían juntas en el baile?

Chiara: Papá, fue un reto personal, a ver cuánto tardaría en enamorarse de mí. - riendo - Y menos de un mes y la llevé al baile, y creo que mi reto se salió de las manos.

Guillermo: Ja, mi nieta. Nunca desconfié de ti. - abrazándola

Al escuchar las palabras de Chiara, sentí un dolor en el pecho. Vi los ojos de mi primer amor, llenos de ira y dolor. Luego, vi a su padre que tenía la misma mirada, pero la tensión no desapareció por completo. De repente, mis emociones me superaron y le grité con lágrimas en los ojos y con todo el dolor del mundo.

Juan Carlos: Lo sabía, tú eres una mala persona. - mirando a Chiara con rabia

Kiki: Señor, yo no le he faltado el respeto a usted. - con voz firme

Vio: ¡Te odio! - furiosa y empujando a Chiara

Kiki: Ja, fuiste fácil. - mirando a la nada

Vio: Te odio, te odio. - llorando

Narra Vio

Con lágrimas en los ojos, me di la vuelta y salí corriendo del patio, dejando atrás un silencio incómodo. Chiara miró a Juan Carlos con determinación en sus ojos, y luego a su padre.

Juan Carlos: Lo sabía, sabía que tú y tu hija planearon esto. Sabía que eras un animal, pero jugar así con mi hija... Eres un hijo de puta.

Kiki: Modere su vocabulario con mi padre. - seria

Juan Carlos: De tal palo, tal astilla. - furioso

Josep: Hablaremos luego.

Directora: ¿Qué es ese escándalo? ¡A la dirección, ambos!

Narra Vio

Chiara y Guillermo se quedaron en el patio, ambos en silencio, mientras Josep entraba a la dirección con Juan Carlos. Ambos estaban furiosos: Juan Carlos, dolido por lo de su hija, y Josep, que según él conocía a su hija, no le creía las palabras aunque sonaran convincentes.

En la dirección, Josep y Juan Carlos esperaron tensamente a que la directora, la Sra. Martínez, los recibiera. Juan Carlos estaba visiblemente afectado por la situación, mientras que Josep mantenía su actitud de escepticismo.

Directora: ¿Qué es eso de golpearse por los pasillos del colegio? ¿A qué viene eso?

Juan Carlos: Directora, en este colegio se filtró una noticia, fotos de menores donde mi hija y la hija de este hombre salen besándose.

Directora: ¿La alumna Oliver y la alumna Hódar? Sí, estaba enterada de que paran discutiendo y peleando, pero de eso no.

Josep: Retiraré a mi hija de la institución.

Directora: Pero señor, solo quedan meses para acabar y es la mejor de la generación.

Josep: La decisión está tomada, y espero que usted tome cartas en el asunto y arregle esto, porque si mis abogados lo hacen, esto empeorará. - con determinación

Juan Carlos: Quiero que esa noticia deje de circular. Mi hija es un daño colateral de este y su hija.

Directora: Nos calmamos.

Josep: Mi hija se retira de la institución. Los papeles los mandaré a ver. Hasta luego. - retirándose de la dirección.

Mientras Josep salía por su hija, Juan Carlos salió de la dirección camino a los dormitorios. Encontró a Denna y a Violeta llorando y se llevó a ambas a Granada. El vuelo de vuelta tuvo un silencio tenso; Denna consolaba a Violeta, y Juan Carlos no dejaba de maldecir el día que se le ocurrió mandarla al internado. Gracias a Dios, la hija de su antiguo amigo ya no volvería, y eso lo calmaba, pero el daño ya estaba hecho. La frialdad que Chiara tuvo al decir esas palabras fue un detonante.

Mientras tanto, Josep volvió a Menorca con Chiara, en silencio, ya que ninguno decía nada. El ambiente estaba tenso, ni con tijera se podía cortar.

Del Odio Al Amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora