Del Odio Al Amor

128. Apoyo Maternal II

Después de la comida con mi madre, volvimos a casa. Al llegar, encontramos a mi padre en la sala. Solo lo saludé y subí a mi habitación; ya era hora de que pudiera hablar con Violeta.

*

Kiki: Buenas tardes, padre. —Dije para pasar corriendo a mi habitación.

William: Chiara, hija. —Llamó.

Emma: No te hará caso. —Fue lo último que oí.

*

Al llegar al cuarto de Jasmine, me dio su móvil y me encerré en mi habitación. Solo necesito a Vio, así que la llamo. Tardó en responder, pero finalmente me contestó.

Videollamada a Vio

Vio: Hola, mi amor. —Dijo con una sonrisa forzada.

Kiki: Hola, baby. —Suspiré—. Necesitamos hablar.

Vio: Sí, lo sé. Te echo de menos, extraño nuestras conversaciones.

Kiki: Yo también. No es lo mismo sin poder hablar contigo siempre. Te necesito.

Vio: ¿Cómo estás, de verdad?

Kiki: No muy bien. No he estado comiendo, apenas salgo de esta habitación. Estas dos semanas han sido difíciles sin verte.

Vio: Lo sé, bicho. Quisiera que las cosas fueran diferentes. Necesito verte. Yo tampoco estoy bien, no como y mi madre ya me ha regañado.

Kiki: Igual, mi madre dijo: "A mi nuera no le gustará verte así, mal". Bueno, algo así dijo. También dijo que hablará con mi padre. Sabes, eso es bueno. Le enseñará las grabaciones. Amor, eso es bueno, ¿no?

Vio: Es verdad, no me gusta verte mal. Me gusta que estés bien. Come algo, amor. Yo estoy comiendo galletitas. ¿Cuándo tendrás móvil?

Kiki: Mi padre sigue sin entenderlo. No me comprará un móvil nuevo para que podamos hablar. Estoy intentando ignorarlo.

Vio: ¿Y tu madre? ¿Pudo hablar con él?

Kiki: Creo que está en eso en el salón, ya que no subió. Espero que consiga algo. No aguanto estar así. Esto me está afectando mucho.

Vio: Vamos a encontrar una solución, Kiki. No quiero que sufras ni que sufras por esto. Mi madre también hablará con mi padre. Esperemos.

Kiki: Gracias. Necesito que estemos juntas de nuevo.

Vio: Y yo.

Estuvimos hablando durante una hora más, hasta que Jasmine pidió su móvil para salir.

*

Narra Vio

Susana: Haré mi mejor esfuerzo, Violeta. Ambas merecen estar juntas. Ahora, come algo y descansa. Mañana veremos cómo abordar la situación con más calma.

Vio: Gracias, mamá. Necesito que las cosas vuelvan a la normalidad.

Susana: ¿La quieres tanto? ¿Como para alejarte de tu padre?

Vio: Mamá, amo a Chiara. Me enamoré. Con ella siento cosas que con nadie había sentido antes. Es difícil de describir, pero ella es amor en persona.

Susana: ¿Qué sientes? Dime. —Con lágrimas en los ojos.

Vio: Con ella siento... euforia, mariposas en el estómago, suspiros cada vez que la veo o me dice cosas bonitas, complicidad. Tengo una emoción desbordante cuando sé que la veré o espero una llamada de ella, un anhelo constante de seguir juntas, felicidad intensa. Nuestra conexión es profunda y siempre nos dicen que nuestras miradas son cómplices. Mis latidos se aceleran cada vez que hablo o estoy con ella y mi alegría es incontenible.

*

Mi madre me miró con lágrimas de emoción en los ojos y me abrazó con ternura.

*

Susana: Violeta, el amor es un regalo precioso, y mereces ser feliz. Abordaremos esto juntas y encontraremos la manera de enfrentar cualquier desafío. Lo más importante es que te apoyo y te quiero, y siento que ya quiero a Chiara por lo feliz que eres. Sin importar las circunstancias, yo hablaré con tu padre. Si no acepta, ya veremos cómo hacemos para que se vean, ¿vale? Ahora descansa. Iré a ver cómo resolveremos todo. —Me abrazó para luego salir, dejándome con lágrimas en los ojos y un plato de galletas y un vaso de leche.

*

Después de unas horas, recibí la llamada de Kiki. Ella me cuenta que su madre va a hablar con su padre y yo le cuento que mi madre también va a hablar con mi padre.

Videollamada a Kiki

Vio: ¿Y tu madre? ¿Pudo hablar con él?

Kiki: Creo que está en eso en el salón, ya que no subió. Espero que consiga algo. No aguanto estar así. Esto me está afectando mucho.

Vio: Vamos a encontrar una solución, Kiki. No quiero que sufras ni sufrir por esto. Mi madre también hablará con mi padre. Esperemos.

Kiki: Gracias. Necesito que estemos juntas de nuevo.

Vio: Y yo.

Kiki: Sí, estoy segura de que nuestras madres encontrarán una solución. No podemos dejar que esto nos separe.

Vio: Exacto, la familia es lo más importante y quiero que mi padre esté de acuerdo con lo nuestro.

Kiki: Lo sé, y significa mucho para mí que tu familia me acepte.

Vio: Mi madre ya te aceptó. —Dije entre risas nerviosas.

Kiki: ¿Cómo? ¿Qué? ¿Cuándo?

Vio: Ahora que tuve una conversación con ella, hasta dijo que te quería.

Kiki: ¿Tu madre?

Vio: Tu suegra, amor.

Kiki: No lo puedo creer. ¿De verdad dijo eso? —Feliz.

Vio: Sí, lo hizo. Parece que logramos dar un paso importante.

Kiki: Esto es increíble. No puedo esperar para hablar con ella y agradecerle.

Vio: Estoy emocionada de que mi madre diga eso. Ella ayudará, ya verás.

Kiki: Gracias por hacer esto posible, Vivi. Te amo.

Vio: Y yo a ti, Kiki. Vamos a construir nuestro camino juntas.

Kiki: Y cuéntame, ¿cómo va el instituto, los chicos? ¿Cómo estás tú?

Estuvimos hablando una hora más, al menos, hasta que Jasmine le pidió el móvil porque iba a salir. No tuve noticias de Chiara luego de esa llamada.