𝐄𝐍𝐃 𝐆𝐀𝐌𝐄 || 𝐑𝐨𝐛𝐢𝐧 𝐋𝐞 𝐍𝐨𝐫𝐦𝐚𝐧𝐝

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Nos volvimos a Madrid al día siguiente porque ya se había acabado nuestra pequeña escapada.

Ellas se fueron todas juntas en un coche y yo obviamente volví con Robin en el coche.

Después de que Robin subiera esa foto a sus historias confirmando nuestra relación me habían comenzando a aparecer hasta a mi videos de tiktok de las mismas personas hablando sobre esa foto de confirmación de Robin. No veía esos videos enteros porque exageraban muchas cosas.

Pero no negaré que si busqué en el buscador de la app a Robin para ver si mi nombre aparecía también, y así era. Pero no vi nada, solo busqué para ver por curiosidad.

Ahora ya estábamos en Madrid por que hacía unos cinco días que habíamos vuelto.

¿Lo malo? Que ahora Robin ya no estaba todo el día conmigo, y eso se me hizo bastante raro los tres primeros días. Además, que ya me había acostumbrado a dormir con él en esa cama tan cómoda del apartamento.

Robin entrenaba todos los días por la mañana con la selección, sabía que se tenía que levantar muy temprano para ir y acabar a la hora de comer, por lo que solía comer por allí. Esta semana ni siquiera se estaba quedado en el piso que me dijo que tenía aquí en Madrid, se quedaba en las instalaciones de la selección.

Por lo que acababa de entrenar, se duchaba y venía a mi piso como me prometió. A falta de un día vino cada día de la semana. Aunque no hacíamos mucho por que cuando Robin venía estaba un poco cansado.

Y con eso me refería a que no salíamos mucho a la calle o hacíamos muchos planes que implicaran salir.

La semana con él se basó en: Él venia después de comer, íbamos a mi habitación, un buen rato de besos y mimos para acabar durmiendo juntos durante unas cuantas horas. Robin no lo sabía, pero en realidad yo nunca hacía la siesta, pero

Para malas noticias de Sara, Robin se solía quedar a cenar lo que tuviéramos por ahí, y alguna vez también se quedaba un rato más para ver la tele o hacer algo. Pero no mucho rato.

Y la razón por la que no se quedaba a dormir era por que al levantarse tan temprano no quería despertarme, aunque yo le decía que no importaba ya que yo estaba de vacaciones y tenía todo el tiempo para descansar. Pero al parecer me conocía demasiado y sabía que me costaba volverme a dormir una vez que me han despertado pronto por la mañana.

—Pronto ya te vas — Murmuré más para mi mientras estaba con Robin en mi habitación.

Hacía poco que se había despertado, pero ahora estábamos como hacía una semana. Robin descansando su cabeza en mi abdomen mientras descansaba y estaba a gusto mientras yo le tocaba el pelo.

—Yo tampoco quiero irme — Dijo él muy bajito con ese tono de voz que me encantaba. Era el que usaba cuando estaba así conmigo.

—¿Es que porque os tenéis que ir cinco días antes del primer partido? — Me quejé poniendo mala cara.

—¿Y cuando llegarás tu a Alemania?

—El mismo día... — Ojalá pudiera ir antes y pasar algo de tiempo con él, pero mis amigas habían comprado el vuelo así — Pero te iré a ver antes de que salgáis al campo te lo prometo, seré puntual — Por una vez que era puntual en algo. La ultima vez por poco no podía ir a pasarme a saludar — ¿Te vas a quedar a cenar?

—Claro que me quedaré, mañana no hay entrenamiento — Murmuró — Así que ya puedes ir haciéndome un hueco en esta cama tan enana.

—Si no te gusta mi cama siempre puedes no dormir en ella.