Capitulo 39

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Iván
Yo sigo en mi oficina bebiendo no he sabido nada de Dahlia lo que significa que ella no ha salido de la casa de su mama eso me da tranquilidad ya que se que ella esta en la casa guardadita al menos no salio. Sigo pensando en lo molesta que estaba al irse hace rato. Me pregunto si probablemente tenía razón sobre Deborah fingiendo torcerse el tobillo. Deborah actuó con bastante normalidad justo después de que mi Dali se fue, ella no parecía tener dolor ni nada. incluso quiso salir a no se donde chingados todos juntos a lo que yo me negué y se encabrono.

Ya estoy bastante tomado, tomando de enojo o simplemente porque tengo mucha presión en mis hombros, con el negocio por un lado y por el otro mi familia y Dali. Puta madre me molesta estar lejos de ella, siento tanta distancia entre nosotros, incluso si la tengo cerca, nos estamos distanciando mucho en estos últimos días, es una locura. Extraño a mi muñequita, extraño despertar entre su pechos y con sus masajes en mi espalda. Extraño sus besos, sus abrazos, su cuerpo, pero sobre todo extraño su presencia.
Me levanto del escritorio y apenas puedo caminar, salgo de mi oficina, me tambaleo de un lado a otro mientras subo las escaleras y hago mi mejor esfuerzo para llegar a mi habitación. Mientras subo un escalón siento que alguien me agarra, miro hacia arriba y es Deborah.

—Iván, Dios mío, ¿qué pasa? ¿Has estado bebiendo? –Déborah dice con voz divertida

—Sí, bebí algunos tragos, ya me voy a la cama ahora.

—Pero déjame ayudarte Archi, apenas puedes caminar. Vamos, déjame ayudarte. Puedes caerte y lastimarte.

Esta es la oportunidad perfecta para aprovechar que él está en este estado. No está en sus cinco sentidos y puedo usar esto a mi favor para hacerle creer a esa gata lo que yo quiera. La suerte está de mi lado seguro que si.

—Oye Ivan porque bebiste así mira nada mas como te tiene Dahlia. Estas completamente sumergido en alcohol por su culpa ella no es buena para ti Ivan, ni para ti ni para Evi el niño ahora le tiene miedo por lo loca que actuó hoy.

—Ya Deborah con una chingada deja de hablar de ella!

—Si Archi, déjame ayudarte a ir a la habitación.

—No, no, quitate puedo hacerlo yo solo.

—Claro que no.

Ivan intenta caminar pero se tambalea hacia un lado y yo aprovecho la oportunidad y lo agarro por la cintura y lo abrazo y lo llevo arriba del segundo piso. Pero no voy a su habitación lo llevo a la mía. Él no parece darse cuenta ya que está muy borracho y fuera de sí. Lo llevo a la cama y él se deja caer y en cuestión de segundos se queda dormido. Le acaricio la barba y desabrocho la camisa muy lentamente, le acaricio suavemente el pecho, Dios, sigue tan guapo como siempre. Fui una idiota al irme hace años cuando nacio Evian pero ahora estoy aquí para recuperar lo que es mío. Le desabrocho el cinturón y los pantalones, se los quito lentamente con cuidado de no despertarlo. Lo cubro y luego voy a mi lado de la cama y me acuesto a su lado para tomar fotos. Tomo algunas fotos conmigo acostada en su pecho y otras con el abrazandome. Esas fotos van directamente al celular de esa gata. Lo acaricio y el muy idiota empieza a llamar a esa pinche perra.

—Dahlia...Dahlia te amo.

Intento aprovechar y ponerme encima de él, lo agarro de la cara y estoy a punto de besarlo cuando abre los ojos.

—Deborah, ¿qué carajo estás haciendo? Quitate tu no eres Dahlia, nunca serás Dahlia, no me gustas morra, quítate a la chingada!

Ivan me empuja y se da la vuelta dándome la espalda y se vuelve a quedar dormido en segundos esta muy borracho el idiota. Maldito pendejo me rechazo el muy estupido. No importa, voy a enviar las fotos para que su estúpida Dalí piense lo peor de él. Agarro su teléfono y consigo su número que esta guardado en este como "mi muñequita" ridiculo que es, le envío todas las fotos tomadas a esa pinche perra. Sonrío al ver las fotos enviadas, esto va a funcionar de una vez por todas para deshacernos de ella y alejarla de nuestras vidas.




Dahlia
Mi hermana y yo llegamos al baile y yo ya podía escuchar las bandas a todo volumen, habían pasado meses desde que había asistido a un baile. Era algo que solía hacer muy a menudo con mi hermana. No puedo sacarme de la cabeza la idea de que así fue exactamente como conocí a Iván, en un baile. ¿Quién hubiera pensado que me secuestraría unos días después de ese primer encuentro, lo odiaría al principio, luego el me haría enamorarme completamente de él en un corto período de tiempo. Pero ya basta vine aquí para pasar un buen rato y dejar de pensar en él y en todos los problemas que tengo con él en casa.

—Ven aquí Dali, vamos a tomar unas cervezas, ¿quieres una? – Pregunta Lilian

—Sí, echala para aca.

—Eso hermanita asi se habla carajo, vamos a sacar estas penas que tenemos mi Dali.–Dice Lilian

—Ahuevo!–Digo mientras tomo un sorbo de mi cerveza.

Escuchamos a la banda a lo lejos, mi hermana me toma de la mano y me lleva al centro de la pista de baile y ambas empezamos a bailar. Las dos estamos sonriendo y la estamos pasando genial. Nos sentamos, tomamos cerveza y nos levantamos de nuevo a bailar al ritmo de banda. Después de unas cuantas canciones hacemos una pausa y nos sentamos en una mesa, no sé cuántas cervezas he bebido, pero estoy un poco mareada, pero me siento bien, me siento entonada.
En este momento simplemente estoy viviendo el momento. Mi hermana y yo comenzamos a hablar de cosas al azar cuando siento que alguien dice mi nombre y me toca suavemente el hombro.

—Dahlia ¿Eres tu? Te he estado observando por un rato pero no estaba seguro si eras tú. –Dice Adrian

—A Adrian..... Si soy yo, ha pasado mucho tiempo desde la última vez que te vi. ¿Cómo estás amigo?

—Bien, bien ¿y tú?

—Bien tambien.

Adrian y yo nos damos un abrazo ya que no nos hemos visto en varios años, desde que nos graduamos de la secundaria él se fue a la ciudad y yo me quedé en el pueblo. Él es mi mejor amigo desde que éramos muy pequeños. También era mi vecino así que nos conocemos bastante bien.

—Dali ahorita vengo voy a bailar con Jaime.

—Anda si ve.

Lilian va y baila con Jaime, el hermano menor de Adrian.

—¿Quieres otra cerveza Dali?

—Mmm esta bien echala para aca.

Adrian se sienta a mi lado y comenzamos a ponernos al día sobre nuestra vida, tomamos cerveza y platicamos de cosas al azar. Él es tan divertido que ambos nos reímos de sus chistes tontos.

Siento que mi teléfono vibra y veo un mensaje de un número desconocido. Intento ignorarlo, pero sigo recibiendo más mensajes de este número. Lo abro y no puedo creer lo que ven mis ojos. Son Ivan y Deborah acostados en la cama juntos, ambos se ven desnudos y la ira y la frustración que siento no se parecen a ninguna otra. Quiero llorar y gritar a todo pulmón porque el me juró que no pasaba nada entre ellos, pero mintió de nuevo. Es un imbécil, ¿cómo pudo? Tan pronto como me voy, hace esto, es más que obvio que nunca se preocupó por mí, ni me ama o respeta. No voy a llorar, no he llorado en todo este tiempo que ha hecho pendejada y media, no empezaré ahora, soy fuerte, tengo que ser fuerte. Agarro mi cerveza y un trago y los bebo de golpe para curar de alguna manera esta herida en mi corazón que Ivan me ha causado.

Nini
A la madre ya le llego competencia al patrón pero estoy a punto de decirle ahora mismo que su muñequita esta muy sonriente con ese vato pendejo. Dahlia está bebiendo sin parar, nunca la había visto beber tanto hasta parece despechada la morra. Empecé a tomar varias fotografías de Dahlia y ese vato. El patrón me dijo que la vigilara y eso es exactamente lo que estoy haciendo.





Otro Cap mas bebes este pedo se esta poniendo aun mas dramatico🩵🩵

Un Dia A La VezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora