069.- No te atreverás

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- Has estado a punto de hacer pleno, cariño – dijo Amelia dejando un beso en la mejilla de su novia tras sentarse sobre sus piernas.

- Ya... Se han quedado justo los de las esquinas y en la segunda tirada nada – lamentó. – No sé en qué momento pensé que venir con falda a los bolos era buena idea.

- Hombre, a mí personalmente me parece una idea muy acertada – declaró alzando una ceja.

- Pero por otras cosas que no son jugar a los bolos.

- No – rio Amelia.

- Y aun así, te voy ganando – presumió Luisita.

- Hace tiempo que no juego – se defendió la morena.

- Ya, claro – se burló.

- No sabía yo que eras tan competitiva...

- Pues ahora ya lo sabes – señaló la rubia.

- Sí, ya veo – declaró conforme Amelia.

- A ver, las tortolitas – interrumpió Lourdes. – Perdón por molestar, pero te toca, Amelia.

- Voy. Levanta, que vas a ver – dijo dando unos toques sobre la pierna de Luisita.

Luisita se levantó de sus piernas para que la morena pudiera ponerse en pie y dirigirse hasta el lugar en el que estaban colocadas las bolas, mirando entre los distintos tamaños que había y tratando de elegir la más adecuada para intentar recortar algún punto.

- No cojas la más grande, que tampoco quiero que te lesiones – le advirtió la rubia.

- No iba a coger la grande, lista – se burló poniendo una mueca.

- Uy, las novias se han picado. Esto promete – expresó Lourdes dando un trago a su botellín de cerveza.

- Amelia – respondió Luisita acusando a su chica.

- ¡Tú! – contraatacó la morena.

- Voy a por palomitas que esto se pone interesante. ¿Alguien más quiere? – demandó la mayor de los Ordóñez bromeando.

- Haya paz, que no quiero divorcios en mi cumpleaños – manifestó Marina.

- No te aseguro nada – rio Amelia.

- Venga Amelia, dale, que yo te apoyo – pronunció Mateo.

- Claro, entre perdedores os tenéis que apoyar.

- Lourdes, lo preciosa que estás con la boquita cerrada – comentó Amelia antes de dar varios pasos y lanzar finalmente la bola.

- Ni que tú fueras tan bien... – señaló su hermano. – Que sólo le sacas doce puntos a Amelia y dieciséis a mí.

- Pero no voy última – le sacó la lengua.

- De momento – murmuró Luisita al observar la nueva puntuación de su novia tras los bolos derribados en su tirada.

- Luisi, se supone que yo te estaba apoyando. Tú me tienes que apoyar a mí, no venderme a las primeras de cambio – protestó ante el comentario de su amiga.

- Yo en estos momentos no tengo amigos – respondió la aludida.

- Pues a lo mejor esta noche duermes en el sofá. Eso si te dejo entrar al apartamento – advirtió la morena preparándose para su segunda tirada en busca de hacer caer los bolos que había dejado en pie.

- No te atreverás – la desafió.

- No me retes – expresó Amelia sujetando las manos de su novia detrás de su cuerpo mientras la besaba después de haber lanzado la bola.

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⏰ Última actualización: Sep 22 ⏰

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