CAMINOS CRUZADOS

CAPITULO 50. EL EVENTO DEL REENCUENTRO

Del capítulo 37
"Arielle, si pudiera matarte en los pensamientos de Enmanuell, lo haría sin pensar" —Felicia lo pensó sabiendo que si tuviera la gran oportunidad de hacerlo no lo dudaría jamás, Pero no haría falta llegar a tanto, porque sería la propia Arielle quien se matara dentro del corazón de Enmanuell.
Felicia miró a Enmanuell perdido en sus pensamientos y recordó lo que pasó en la casa de modas CRISTAL sin decirla nada a Enmanuell.

Flash Back.
Felicia y Enmanuell habían llegado a Berlín Alemania, para el evento de la entrega del premio nobel de la medicina. Una semana antes viajaron, llegaron al departamento de Enmanuell. Felicia está feliz de que Enmanuell la invitara al evento, aprovechaba cada excusa para estar pegada a él.
—Cariño, tenemos que ir de compras no tengo algo adecuado para la ocasión. —habló con voz melosa y pasando su dedo por el pecho de él.
Enmanuell quitó su mano y se apartó abruptamente de ella, se puso de pie y fue a servirse un vaso de whisky.
—Ve tu Felicia, ya sabes que no me gustan esas cosas. -—e negó.
-Quiero desfilar para ti desde la ropa interior que usaré. —insistió.
Enmanuell bebió al contenido del vaso y la miró fríamente respondiendo.
—¿Que parte de no me gusta no entendiste? —Felicia tragó el nudo en su garganta, se puso de pie, tomó su bolsa y salió del departamento, fue al centro de la ciudad y caminó por las frias calles veraniegas del centro de Berlín, miró cada tienda de ropa, zapatos, carteras y joyas.
Miró a lo alto un llamativo nombre en letras grandes que parecían diamante gigantesco que decía la palabra CRISTAL, miró y vio que era una de las boutiques con diferentes líneas de ropas y accesorios muy exclusivos.
Entró y fue atendida muy amablemente.
—CRISTAL le da la bienvenida. —dijo la vendedora entregando un pequeño obsequio como regalo de motivación para los clientes.
—Muchas gracias. —respondió recibiendo el pequeño muestrario de perfume que estaba creando Arielle.
Felicia miró deleitado cada diseño de carteras, bolsas de mano, vestido para toda ocasión y se probó algunos para luego escoger un para lucir la noche del evento, siguió mirando y escogió los zapatos.
—¿Todo esto es de la misma diseñadora o es una sociedad llamada CRISTAL? —preguntó al ver la línea de joyas.
—Es la misma diseñadora, es muy talentosa, y toda lo que ve aquí es original y exclusivo de ella.
—¡Woow! Una gran empresaria es la señora Cristal.
—No...ese nombre es de la hija, y está creando una línea de ropa para hombres inspirada en lo rústico del campo, y ese llevará el nombre de su hijo, Dante....Dante Alighieri.
—¿Alighieri? —preguntó Felicia el apellido que le llamó la atención.
—Si, el nombre de su pequeño hijo. —respondió la vendedora confirmando.
—¿Y cuál es el nombre de tan talentosa mujer?
—Arielle... Arielle Brigth. —dijo la muchacha y las bolsas que Felicia tenía en su mano cayeron al piso.
—Y su esposo es Gabriell Alighieri. ¿Cierto?. —esperó confirmación Pero no la recibió.
—Creo que hablé demaciado. ¿Va a comprar todo eso?
—Si..tome la tarjeta de mi esposo Enmanuell Giordano. —dijo Felicia y quince minutos después estaba saliendo de la tienda, subió a un uber y esperó, porque tenía la impresión de que en cualquier momento llegaría la dueña de todo ese imperio de modas.
—Señora ..¿cuánto más vamos a esperar? —preguntó el chófer del Uber.
—Lo puedo tener el día entero y usted limitese a fijar su tarifa, no moleste. —habló algo molesta, después de casi dos horas ahí vigilante.
De pronto vio para un Rolls Roys el la entrada y vio salir a Gabriell seguido por Dante y Orquídea que corrieron al interior de la tienda seguido por la Nana, vio cuando Gabriell dió la vuelta y abrió la puerta de dónde salió Arielle.
Felicia la miró fijamente a Arielle y la siguió con la mirada.
—¿Te casaste con él? Claro...que pregunta la mía, si tienen dos hijos. —se dijo así mismo sin quitar la mirada de ellos.
—¡Papá!
—¡Mami! —gritaron al unisono los pequeños corriendo a los brazos de sus padres.
Felicia creyó lo que vio, por qué ante quien los veía, ellos eran una familia con hijos incluidos.
—Estás casada con Gabriell, ya no representas un peligro para mi, y cuando Enmanuell lo sepa, por fin tu estarás muerta para él..y yo no tuve que hacer nada. —habló por lo bajo mientras tomaba las fotografías.
Arielle y Gabriell junto a los niños entraron a la tienda.
Felicia miró al chófer del Uber y una cruel idea pasó por su cabeza.
—¿Te quieres ganar unos dólares de más? —preguntó al hombre y este no entendió la pregunta.
-¡Perdón! No comprendo.
Te voy a pasar unas fotografías, también un número de teléfono, y cuando te escriba enviarlas. Tú, las enviarás al número que te daré.
Ten,  llévale esta compra a tu mujer y ten cinco mil euros. ¿Aceptas?
El hombre dudó por un momento y terminó aceptando. Felicia transfirió el dinero a la cuenta del hombre y salió de ahí.
FIN Flash Back.