El Primer, Único e Inigualable Brujo

Shooting Star

El tiempo pasó volando.

El día de la carrera de relevos finalmente llegó. De hecho, ya estaba por iniciar, y Akko... eh...

Ella aún sabe volar en escoba.

Pero no hay porqué preocuparse. Lo tenemos todo bajo control, o eso creo.

Todos los equipos de tres estudiantes que se inscribieron a la carrera de relevos fueron convocados en la misma zona del campus donde nos dieron con anterioridad las clases de vuelo, ahí estábamos todos reunidos. Yo tenía a Akko y a Sucy a la par, los tres veíamos la cantidad de alumnas que había allí.

La verdad es que no pensé que tantas se hubieran inscrito.

La directora Miranda estaba frente a todos nosotros, o nosotras, no sé, ellas son la gran mayoría. Aún no estoy seguro de como hablar en plural en estas situaciones.

Como decía: Miranda estaba frente a todos los equipos allí reunidos, ella sacó su varita e hizo un hechizo que se lanzó a sí misma.

—Estamos a punto de comenzar la competencia número 1333 de la carrera de relevos de la academia para brujas Luna Nova —anunció. El hechizo había hecho que su voz sonara como si estuviese usando un micrófono— el equipo ganador se quedará con el honor, el orgullo y el premio de la maestra Lukic.

Un pequeño duende de piel grisácea se acercó a Miranda, cargando un objeto cilíndrico envuelto en papel de regalo, color verde oscuro con franjas negras y una calavera. Miranda alzó su mano y la dirigió hacia el duende.

—¡Todas deben dar lo mejor! —dijo por último.

Miré hacia Akko, parecía un poco abrumada.

—Si no ganamos ese premio, envenenaré a ambos mientras duermen —dijo Sucy con tono sombrío.

—Como digas... —le respondió, dando unos pasitos para alejarme de ella.

Un grupo de tres alumnas empezaron a entrevistar a algunas estudiantes, dijeron que eran algo así como ¿"La Red de Noticias de Luna Nova"? No sé, una movida de ese estilo. Cuestión: que ellas van a transmitir en vivo la carrera, si no es que ya están transmitiendo en vivo las entrevistas.

—¿Por qué nadie nos entrevista? —preguntó Akko con leve molestia en su tono.

—Porque nadie nos conoce. —Y antes de que pudiera seguir hablando, las chicas que estaban entrevistando se nos acercaron rápidamente.

Ah, sí. Es cierto. Aún sigo siendo tema de conversación entre el resto de alumnas de la academia, ya me había olvidado de eso, supongo que me estaba acostumbrando a Luna Nova.

—¡Eres tú, el brujo de Luna Nova! —dijo ella con entusiasmo.

—Michelangelo Ambrosius, pero díganme Mikey.

—¿Por qué decidiste participar en esta carrera? —preguntó la chica.

Para ganarle a Diana, porque me caía mal y porque todos creía que ella iba a ser la ganadora. Lo hice solo para demostrarle que ella no es la mejor en todo, esa es la respuesta sincera, pero no iba a decir eso.

—Pues, porque sí —respondí encogiéndome de hombros— pintó nomás... y ya.

Hubo un breve silencio.

—¡Fuertes confesiones!

¿Pero qué? Tuve que contener la risa.

Las chicas se fueron, ignorando completamente a Akko y a Sucy.

—¡Oigan, pero...! —intentó decir Akko, pero ya se habían ido— yo también estoy aquí... —terminó de decir en voz baja.

Sucy no le dio la mayor importancia.