Capítulo | 14

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SARA

F l a s h B a c k

Caminé con pasos seguros dentro de la escuela. Nunca eh sido insegura, pero creo que cuando estás enamorada todo se vuelve así ¿no?, Aunque claramente creo que debe ser lo contrario, el amor debe darte seguridad y confianza, pero por alguna razón, con Aarón no me siento así.

Mis padres habían muerto hace uno dos años y debía seguir con mi vida, por que como dice Doris ││Mi nana││, nadie lo hará por mí si no lo hago yo.

En estos dos años me había entrenado, había conocido personas importantes para mí y entre ellas, Vanessa.

La conocí una noche, veníamos de hacer una entrega con Jaime y la encontramos tirada en unos basureros, su cuerpo estaba cubierto de sangre y al juzgar por su apariencia, daba claro a entender que había sido abusada. La trajimos a casa por petición insistente de mi parte, a lo que Jaime aceptó luego de un largo rato.

Las semanas pasaron y Vanessa fue confiando en nosotros, principalmente más en mí. Siempre la pasamos juntas y no nos separamos, excepto ésta mañana que se me había presentado unos inconvenientes con unos de los laboratorios de cocaína.

Miré adelanté de mí y la ví parada en su casillero con la cabeza baja, tenía puesto un gorro negro tapando su cabello, que al igual que el mío, es largo, lo único diferente es el color.

En ésta escuela, el bullying es la razón principal por la cual hay que pensar dos veces antes de venir aquí.

Vanessa y yo siempre hemos sido víctimas; sí señores, la chica de 17 años que ha matado personas por sólo pasarse de listos, que ha tenido que aprender a defenderse para que no la maten, esa misma también ah pasado por el sufrimiento del bullying. ¿Pero cómo no pasarlo cuando te golpean con lo más importante? tus padres.

Hemos sido víctimas por el simple hecho de que ambas carecemos de padres de amabas partes.

- ¡Hey!-Le dije cuando llegué hasta ella, alzó la cabeza para mirarme y se abalanzó contra mí para abrazarme, esa es la Vanessa que aprendí a conocer en estos años.

-Pensé que tendría que pasar el día sola, ¿me repites porque tenemos que estudiar en ésta escuela de mierda?-Preguntó mientras cerraba su casillero.

-Sabes cómo es Doris. -Le dije.

Me quedé pegada al casillero al ver a Aarón hablando con sus amigos. Hace una semanas éramos novios, y de verdad que me gusta, pero por alguna razón nunca le ah gustado besarme delante de la gente, eso no importa, lo importante es que él me ama y yo lo amo a él.

Nuestras miradas se conectaron y mi corazón comenzó a palpitar aceleradamente. Rápidamente, quité mi vista de él sintiendo mis mejillas acaloradas.

-Es un estúpido. -Escuché a Vanessa decir a mi lado.

-Sí, como digas. -Lo ví caminar a nuestra dirección y me sentí más nerviosa que nunca. -Ahí viene. -Dije entre dientes.

-Bien, me voy. -La agarré del brazo antes de que pudiera dar otro paso.

-No. -Dije firme. -Tú te quedas.

-Es que no entien...

-Hola chicas. -Me volteé al escuchar la voz de Aarón.

-Hola, Aarón. -Dije con voz suave.

-Maldito estúpido. -Miré a Vanessa dándole a entender con la mirada que se calmara.

Miré detrás de Aarón donde estaban sus amigos como esperando algo, miré hacia la otra esquina encontrándome a Megan mirando con una sonrisa. Esto se está volviendo demasiado extraño, normalmente él hablaba a solas conmigo ya que nunca le gustaba hablar conmigo en la escuela, siempre hablamos afuera, en su casa o en la mía, pero no en la escuela.

-Eh venido a decirte algo Sara. -Lo miré con una sonrisa, al final daría a conocer lo nuestro dentro de la escuela.

- ¿Si, Aarón?

-Quería decirte que. -Sé acerco lentamente a mí, quedando solo a centímetros. -Que eh jugado contigo y creo que mereces la verdad. -Analicé sus palabras en mi mente, miré hacia los lados y toda la escuela escuchaba muy atento, miré de nuevo a Aarón quien ahora sonreía arrogante. - ¿Creíste que podría salir contigo? ¡Vamos, contéstame!-Me insistió.

Les hizo una seña a sus amigos y ambos me agarraron de los brazos, miré hacia Vanessa que también estaba agarrada por dos más, su rostro no mostraba ninguna expresión y eso me asustaba. Habíamos ido al psicólogo hace varios meses atrás por sus pesadillas y sus trances y creo que ahora mismo, le está dando uno.

Ya no me importaba lo que él digiera de mi, sólo quería que mi amiga estuviera bien, porque sé lo que se siente eso, sé lo que es vivir en un maldito trance.

- ¡Suéltenla, ella no tiene que ver en nada de esto!-Grité. Miré preocupada de nuevo a Vanessa y ésta tenía una lágrima en los ojos y seguía sin expresión en su rostro.

Nos estaban haciendo daño, no físico, sino emocionalmente, y créanme cuando les digo que duele más que el físico.

Me removí inquieta entre los brazos de los dos hijos de puta que me tenían agarrada.

- ¡Suéltenla maldición!-Entonces descubrir todo. MALDITO DIRECTOR.

Sentí como me cargaban, miré a Vanessa y ella venía detrás de mí junto a dos imbéciles más, cuando reaccioné hacia donde nos llevaban pude ver que es a la piscina de natación.

¿Dónde diablos están los profesores? Ah, sí, en una maldita reunión.

Sentí el agua mojar todo mi cabello junto a mi ropa, salí rápido del agua como Dios me ayudó y tomé a Vanessa en brazos, la llevé conmigo hasta la orilla, la saqué e hice lo mismo conmigo. Puse su cabeza en mis piernas viendo sus ojos abiertos, pero no pestañaba, su boca se movía formulando un ¨No¨ constantemente y ya me estaba asustado.

No me importaba que todos nos estuvieran mirando y mucho menos grabando mientras se reían de nuestra desgracia. Porque eso había sido, había sido la desgracia de Aarón.

Ese día había jurado que todos y cada uno de los que habían participado en esa maldita broma, la iban a pagar y muy caro. Desde ese día, sentí que no volví a hacer la misma.

F i n F l a s h B a c k

Ese día lo había jurado y había cumplido mi promesa durante todo el mes, les hice pagar a cada uno de los que habían participado en todo el daño que nos habían hecho. Ese día le habían hecho daño a un miembro de mi ahora familia.

Amada mafiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora