Capítulo sesenta.

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Despierto cerca del mediodía, ya que anoche Shawn y Cameron se fueron muy tarde de mi casa, y lo primero que hago es llamar para asegurarme de que ambos están bien.
En efecto, ambos se sienten mejor que ayer y Shawn ya está ensayando para el concierto de la noche. Un concierto al que no recordaba que he sido invitada.

- ¿Puedo ir también? - pregunta Abby, metiendose a la boca un poco de ensalada. - ¿Estas segura?
- Shawn dijo que no sería bonito dejarte aquí sola. - respondo. - Además,as Cameron estará allí. - Abby suelta de inmediato su tenedor y me dirige una mirada extraña. - Pensé que eso te alegraría.
- Si, me alegra, es solo que... No lo se.
- Oh, vamos, Cameron es fenomenal. Admito que es un idiota por momentos, pero es muy buen chico y te quiere.
- Es un idiota que me trato mal. - replica ella y me parece que trata de convencerse a si misma de eso, a pesar de que ambas sabemos que el está cambiando.
- Un idiota al que amas. - Abby rueda los ojos. - Mira, nena, no te digo que vuelvas a ser su novia ya mismo. Pienso que deberías ser su amiga, hablar con él, poner de tu parte, ¿entiendes? Si deben estar juntos, tarde o temprano lo estarán, pero si no es así como tiene que ser, al menos tendrás a un buen amigo.
- ¿Es la lógica que sigues con Shawn?

Mi boca se queda abierta un buen rato mientras Abby se disculpa por haber dicho eso. Pero la verdad es que yo no tengo ni idea de que lógica sigo con Shawn. Es mas, a ves creo que estoy actuando más por locura que por cordura.

- Él y yo... Nosotros... No sé bien qué somos ni que seremos, solo sé que lo que él e hace sentir nadie lo ha podido lograr.
- ¿Ni siquiera Ashton? - niego con convicción.
- Ashton era increíble, ¿sabes? Pero con Shawn tenía la confianza de que me apoyaría siempre y con Ashton solo sentía que no era suficiente.
- ¿Te puedo hacer una pregunta? - dudo un rato, pero termino accediendo por curiosidad. - ¿Te imaginas formando una familia con él?

Mi mirada se dirige a mi abdomen al instante y los recuerdos de mi abultada barriga que protegía a un bebe, vuelven a mi mente.
Una sonrisa se dibuja en mi rostro ante la mirada atenta de Abby y mi respuesta se formula.

- Ya íbamos a tener una, Abby, y creo que si nunca me hubiese ido, tal vez ahora la tendríamos. Así que, ¿por qué me negaría a intentarlo de nuevo?
- Eso es todo, Gabbie. - dice ella. - Entonces, debes intentar volver con él.
- No quiero apresurar nada, ya viste que la ultima vez termino en una pelea. - le recuerdo, refiriéndome a Ashton claramente. - Además, si Shawn sigue sintiendo lo mismo por mi, esperara a que las cosas se calmen un poco.
- Oh, ¿no lo has visto? Estoy segura que esperara mil años de ser necesario.

Me doy cuenta que estoy sonriendo como boba, así que sacudo la cabeza para volver a la realidad. Entonces, mi mente trae a Cameron.

- ¿Que hay de ti? - Abby se tensa al instante. - ¿Has pensado en eso un poco más?
- Mi cabeza esta tan revuelta que no creo poder procesar todo. - responde. - Cuando lo sepa, te lo diré.

Cerca de las 4pm nos comenzamos a alistar para el concierto. La tarde es calurosa, así que pretendo escoger algo muy simple como jeans y una blusa. El problema es que no decido que color de blusa escoger y me tomo mucho tiempo pensándolo parada frente a mi armario.
¿Que se vería mejor? ¿Cómo irán vestidas las otras chicas? Y peor aun, ¿como ira vestida la mejor amiga de Shawn?
Demonios, su mejor amiga. Mátenme, no he hablado con ella ni una sola vez.

- Gabbie, es un concierto, no un desfile de modas. - me dice Cameron desde la sala. - ¿Ya estas lista?
- ¿Rosa o melón?
- ¿Que?
- ¡Dime qué color te gusta más! - le grito, completamente desesperada porque esto toma demasiado tiempo, cuando debería ser algo simple.
- ¿Rosa?
- ¡Pero el rosa es muy común!
- Gabbie, ¿qué te pasa? - pregunta, esta vez del otro lado de la puerta.

Me arrastro en bata hasta la puerta y le abro, dejando que él entre y se agache a mi altura.

- ¿Estas bien? - me encojo de hombros. - Gabbie, si no me dices no puedo ayudarte.
- Anahí. - musita de mala gana.
- ¿Luna? - frunzo el ceño, estoy muy segura que se llama Anahí. - Es su primer nombre, el segundo es Anahí.
- ¿Desde hace cuanto la conoces?
- Desde Magcon. Ella y Shawn eran muy unidos, luego ella se fue de intercambio a otro país para terminar sus estudios y no la vimos más.
- ¿Como es que no sabia de ella? - esta vez es él quien se encoge de hombros.
- Nadie la mencionaba.
- Debe haber alguna razón, no pueden solo hacerla a un lado. - Cameron desvía la mirada y sé al instante que me oculta algo. - Cameron...
- No se si deba decirte.
- Por favor. - le pido, tomando su mano para que me devuelva la mirada.
- Su amor platónico era Shawn y todos lo sabían menos él. - mi mandíbula cae al suelo al instante. Demonios. - Pero, por favor, no digas nada al respecto. No he hablado con ella, por lo que no podría asegurarte que siga sintiendo lo mismo.
- Ella debe odiarme. - me lamente, abrazando mis rodillas.
- Gabbie, no digas eso, no sabemos si sigue sintiendo algo por él.
- Pero han estado juntos todo este tiempo, Cam. - él intenta decir algo pero nada sale de sus labios. - Va a estar allí hoy, ¿no?
- Claro, hoy es su cumpleaños.

¿Cada cuanto salen los vuelos a Japón? Creo que voy a irme a vivir por allá.
No puede ser que justo hoy sea su cumpleaños, no justo cuando Shawn y yo arreglamos las cosas y todo va bien. No voy a poder actuar como quisiera con Shawn si hay una posibilidad de que ella esté enamorada de él.
Eso sería desagradable y a mi tampoco me gustaría que me hiciesen eso.

- Me estoy comenzando a sentir mal, Cameron, debe ser un resfrío o algo así.
- Gabbie, no me voy a creer eso. - dice, rodando los ojos. - Ponte algo bonito, ve al concierto con nosotros y sonríe a todo el mundo como si nunca hubieses escuchado lo que dije.
- Pero lo escuche, ese es el problema.

Cameron suspira y luego se levanta del suelo, se dirige hacia mi armario y comienza a revisarlo. No se si sentirme incomoda o si ir a ver que hace, pero mi cuerpo parece tener una mejor opción: quedarme donde estoy.
Al rato, él sale con unos jeans claros, una blusa melón y Toms a juego. Deja todo sobre la cama, mira su reloj y luego se acerca.

- Tienes 10 minutos o enserio llegaremos tarde.

Ni siquiera me deja responderle, solo sale de la habitación y cierra la puerta tras él.
Sé que será incomodo estar allí con Anahí presente, pero trato de recordarme a mi misma lo decepcionada que estará Shawn si decido no aparecer. Así que con la sonrisa de Shawn en mente, comienzo a vestirme.
Tomo mi bolso y salgo de mi habitación a los minutos, solo para encontrar a Cameron recargado en la pared del pasillo.

- Vaya, se ve muy bien, señorita.
- Entonces, ¿qué dijiste que tengo que hacer? ¿Sonreír y hacer como si nunca hubieses dicho nada?
- Exacto. - responde, extendiéndome el brazo para cruzar el mío y caminar fuera de mi apartamento. - Todo terminara rápido y luego traeré a Abby y a ti de vuelta a casa.
- Bien, espero que pase tal y como dices.

Cuando Cameron cierra la puerta del auto y comienza a manejar, la ansiedad me invade. Me repito que todo estará bien e intento tranquilizarme antes que comience un ataque de pánico.
Si tan solo hubiese una forma de evitar ver a Anahí, seria mejor. Pero no la hay y tengo que cargar con el peso de que, haga lo que haga, puedo dañarla.
Sé que ella no es mi amiga, pero no puedo ser de piedra e imaginar que no existe. Mucho menos puedo actuar con Shawn como si fuésemos completos extraños.
Estoy en una encrucijada.

Nenas hermosas, lamentablemente el examen no estuvo tan fácil como esperaba. Tengo que estudiar el doble o retirarme de la asignatura. No se que hacer y unos amigos no hacen más que contribuir a mi miedo.
Sea como sea, parece que tendré que estudiar el doble, así que tal vez me ausente un poco.
No me odien, yo las amo!
Un beso enorme!

Since You've Been Gone | I.G. Shawn Mendes 2da temporadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora