Alimentadora [#1]

Capitulo 165

NARRADOR: Kathy West

Las manos de mamá son fantásticas a la hora me ayudarme a peinar, mientras ella improvisaba un lindo peinado el cual pudiera incluir la corona de hojas dorada, estaba un poco nerviosa, siempre me pasaba cuando era el día de las fiestas o bailes, aunque en esta vez mis nerviosismo era un poco más intenso por el simple hecho que Yesid asistiría.

Por otra parte Dayana me estaba ayudando con el maquillaje, tocaba admitir que tenía un talento innato en esto, aunque siempre estuviera repitiéndome que me quedara quieta y no moviera ni un solo músculo. Dayana esta disfrazada de Caperucita roja, traía un vestido que llegaba un poco más arriba de la rodilla, la parte superior una parte era de color blanco y negro hasta la falda que es totalmente roja; medias veladas blancas, unos zapatos negros brillantes y una capa roja que le llegaba a la misma altura que el vestido. En estos momentos tenía puesta la capota de la capa ocultado su cabello y opacando de cierta manera su maquillaje.

Al terminar mamá con el peinado comenzó a lanzar muchos halagos a su preciado trabajo y de como me veía de linda, después de unos minutos termino Dayana saltando de felicidad al contemplar su trabajo.

Antes que pudiera verme en el espejo me pongo unas sandalias doradas que tenían un tacón de casi siete centímetros. Camine con pasos seguros hasta el espejo, en donde quede más que satisfecha con mi aspecto. Mi disfraz de este año es de diosa griega, al principio no veía el disfraz muy convincente, pero luego de haber recorrido varias tiendas me decidí por este. El disfraz constaba de un vestido blanco que me llegaba hasta un poco más abajo de la rodilla, una tela roja que pasaba por mi hombro derecho pasando hacía delante dejándose caer hasta la misma altura del vestido, un cinturón dorado unía el vestido con la tela en la cintura, unas cuantas pulseras y finalmente una corona dorada que estaba decorada con hojas.

- Me encanta tu disfraz - chilló Dayana una vez más.

Sonreí ante el comentario mientras caminaba hasta mi cama y tomaba mi bolsito en donde estaba mi celular y algunas que otras cosas personales, después de eso Dayana bajamos para encontrarnos con Derek.

- ¿Qué te parece, príncipe? - dije extendiendo mis brazos para que pudiera observar mi disfraz.

El disfraz de Derek es de un príncipe, pantalón rojo con una línea dorada, saco blanco muy formal con unas cuantas insignias en el pecho, hombreras doradas, una espada que colgaba de su cinturón, botas negras y una corona que le aplasta el cabello hacía la frente.

- Esta preciosa, diosa - contesto. 

Derek esta emocionado por esta fiesta, es su primera cita con Angie, se podría decir que fue como un rayito de luz en su depresión que estaba cargando en esta semana.

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El gimnasio estaba totalmente oscuro a pesar de las luces y la bola de disco que había en el techo, la decoración consistía en telarañas, esqueletos en las esquinas, varios carteles de dibujos espeluznantes, un escenario improvisado en donde se encontraba el "DJ" y una mesa en el fondo que estaba custodiada por dos profesores, ahí se encontraban jarras de jugos y varios aperitivos, nunca consumo nada de esa mesa.

En el momento que habíamos llegado nos encontramos con nuestros amigos, al parecer eramos los únicos que faltaban por llegar. Todos lucían disfraces desde improvisados en casa hasta disfraces excéntricos, habían muchas variedades y colores, además que se podían clasificar del más tierno al más terrorífico.

Apenas habíamos pisado el gimnasio Zander (quién estaba disfrazado de Robin Hood) rapto a nuestra bella Caperucita roja arrastrándola hacia la pista de baile, luego el príncipe se fue con Angie ( estaba disfrazada de Sherazada) y así fue como me quede sola en una esquina cerca de la puerta simulando bailar, pero la verdad es que al no encontrar con la mirada a Yesid, imagine que tal vez no haya llegado aún.