Alimentadora [#1]

Capitulo 26

NARRADOR: Yesid Evans

Me miro en el espejo ya había desaparecido el golpe de Derek, me acaba de bañar y tenía la toalla enrollada en mi cintura aún. Comencé a juguetear con mi cabello y un leve recuerdo me hizo sonreir por lo que tuve que pasar con Kathy ayer.

- AÚN NO ESTAS LISTO- me grito Dani desde la puerta del baño. Ella ya se habia bañado y arreglado, creo que la versión de mujer soy yo me demoro demasiado en el baño y ella no tanto.

- No me ves estoy listo para un caminar por toda la escuela en toalla- dije.

Ella rodo los ojos y se fue a su habitación, ella no es capaz de irse sola al colegio, nunca había sido capaz, yo sonrio y camino hacia mi habitación. 

Cuando estoy esculcando mi armario decido vertirme casual con unos jeans oscuros una camisa a rayas de manga larga, y saco de mi mesita de noche mi estuche personal en donde cargo mi cepillo y crema de dientes, hilo dental, una peinilla, una afeitadora y muchas cosas más. Entro nuevamente al baño y miro el reloj "aún tengo tiempo" pienso.

- Dani ¿ya estas lista?- dije casi gritando.

- Si.... espera no.- grito desde su habitación.

Rode los ojos y me miro de nuevo al espejo, me peino con el cabello en punta no lo tenía largo así que era perfecto y me quede mirandome unos cuantos segundos más en el espejo y se me ocurrio la loca idea de quitarme los lentes de contacto. Me recetaron gafas a los cinco años y a los dieciseis me decidi por usar lentes, lo cual es extraño para un vampiro ya que se supone que son invencibles y yo soy... yo un desastre de vampiro, y hablando de vampiro ya me dio hambre.

Me quite con cuidado los lentes y me puse las gafas que usaba cuando me cansaba de los lentes. Mis ojos verdes no se notan tanto con las gafas pero quiero que mi nueva amiga vea quién soy en verdad apesar que ya sabe mi secreto.

Me termino de arreglar rapidamente y me pongo unas cuantas manillas de tela. Cuando siento que ya estoy listo bajo velozmente las escaleras y me acerco a la cocina, aún no se diferenciar el hambre de comida humana y comida vampirica, lo sé suena patetico pero que más hago soy un desastre.

- No me digas que él cuatro ojos va a ir asi al colegio.- dijo Dani sentandose al lado mío en el comedor, dejando su mochila encima de la mesa.

- Oye respeta a tu hermano- dijo mamá señalandola con el dedo y yo le saco la lengua cuando me mira.

- Muy maduro de tu parte, Yes- me dijo cogiendo un pan- Y dime ¿Por qué las gafas? ¿A quién quieres espantar?

- Primero no quiero usar lentes hoy me gusta usar gafas. Me siento más comodo. Y segundo no quiero espantar a nadie.- dije muy serio mientras mamá ponía los platos en la mesa.

- Como tu digas hermanito. Pero es evidente que soy la cool y tu eres... eso.- ya no me molestaba que Dani se burlara de mí antes creo que me divertía.

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Cuando llego Dani se separa de mi para irse con sus dos amigas que hizo ayer, ellas la estaban esperando a la entrada del colegio. Al quedarme solo di un respiro profundo y me encamine hacia mi casillero, mientras caminaba creo que nadie se dio cuenta de mis gafas. Al fin eso era lo siempre he querido pasar desapercivido.

Derek y Adrian estan apoyados en los mismos casilleros que estaban ayer a la hora de la salida. Derek no lucía muy bien, lucía cansado pero realmente no me importa. Mientras saco mis libros y los meto en el casillero alguien por detrás mío pone sus manos en mis ojos... bueno gafas.

- Oye ¿Qué traes puesto? ¿Son gafas?- era la voz de Kathy, es una voz singular y fácil de reconocer.

- Luego no se preguntaba ¿Quién soy? en este juego.- dije.

- No, no se puede preguntar lo evidente así que responde ¿Por qué las gafas?- dijo aún tapandome los ojos.

- Uso lentes de contacto pero hoy decidi hacer un cambio y poner gafas- dije sin darle importancia, pero de un momento a otro ella me da la vuelta de un jalón.

- Se supone que eres vampiro ¿Por qué sigues usando gafas o lentes?- susurro.

- Si me los quito no puedo ver nada.- dije desilusionado no era bonito recordar que eres vampiro y que no haces un buen trabajo siendolo.

- Definitivamente eres un caso perdido- dijo Kathy mirandome con ojos brillosos- Te ves muy bien con gafas pero se ocultan tus ojos.- mientras decía se acerco más a mí poniendome algo nervioso.

- Gracias... supongo.- dije rascandome la nuca- Y en cuanto mis ojos no me molesta en lo absoluto que se oculten o que tenga que usar gafas o lentes.

Se sonrojo Kathy un poco, en ese momento pienso que es tierna y cuando voy a decir algo Derek se para al lado de Kathy tomandola del hombro y me mira a los ojos de forma penetrante.

- ¿por qué las gafas?- dijo entrecerrando los ojos y negando con la cabeza. "¿Bueno es que las personas no tienen nada mejor que preguntar?"

- Porque no quise usar hoy los lentes de contacto- dije rodando los ojos y volviendo mi atención a mi casillero.

- ¿No eres vampiro? o al menos un intento.

- Mira no lo sé me alimento de sangre, es lo unico que tengo de vampirico por que no me molesta el sol y como ajo sin ningún fastidio y no tengo super velocidad o cosas por el estilo.- dije algo irritado, es que acaso fue tan mala la idea de quitarme los lentes.

- Yesid primero que todo es un mito todo sobre el sol y el ajo, el agua bendita... es un mito. En cuanto tus poderes eso si esta dificil.- dijo Kathy.

- Ya sé que soy un vampiro desastre pero es que nadie me informo y sinceramente si esta decisión hubiera estado en mis manos no hubiera elegido convertirme. Detesto mi naturaleza.- dije algo exaltado.

- Yesid calmate porque sigo siendo más fuerte que tu y mientras tenga esa ventaja la usare en un contra- dijo Derek mientras Kathy rodaba sus ojos y hacia mala cara.

Di un respiro hondo y cierro mi casillero.

- Kathy te veo luego y Derek... - no complete mi frase.

Salí hacia el baño estoy con me muero del hambre y mi garganta pide a gritos "SANGRE". Entro a un cubiculo, me siento en el suelo y hago lo unico que me enseño el descererado que me convirtio saco la bolsa de sangre y todo de a pequeños sorbos para que el ansia disminuya, me alimente bien y lo más importante de todo que me sobre por si me da hambre durante el día.