Cuando llegue a mi apartamento, le di de comer a Sam después me acuesto encima del sofá a ver una película, pensé en Alice en lo asustada que estaba cuando me presente enfrente de ella en su universidad y mas con la propuesta que le hice y mas amenazándola con matarla aunque era mentira al menos tengo que disfrutar de ese lindo cuerpo, no sabia que Alice Bledel estaría tan buena desde que la vi en el club aquella noche. Se que es difícil, todo un reto para mi pero soy Matt Bomer y me encantan los retos, estoy seguro que Alice terminara sucumbiendo a mi tarde o temprano.
Cierro los ojos me la imagino en este mismo sofá encima de mi moviéndome en su interior de forma lenta, mientras ella grita mi nombre entonces siento que alguien me da un lengüetazo en la cara, abro los ojos se trata de Sam.
—Bonito momento para interrumpirme, Sam— Acaricio la cabeza mi peludo amigo— Estaba soñando en una hermosa nena que algún día me la voy a follar en este mismo sofá— Sam mueve las orejas hacia atrás como si entendiera— Ese día amigo dormirás afuera.
En instante tocan la puerta, me levanto abrir se trata de Justin y Raymond quienes entran como perro por su casa, Justin va a la nevera saca par de cerveza, me lanza una a mi que atrapo en el aire y la abro.
—Enterramos al imbécil del Turco detrás del almacén— Dice Justin— Ahí nadie va a encontrarlo.
—Perfecto, un estorbo menos— Digo tranquilo.
—¿Hiciste lo que tenias que hacer?— Me pregunta Raymond.
—En realidad no, fui hacer otra cosa algo que no estaba en mis planes— Bebo un trago de mi cerveza.
—¿Qué otros planes?— Frunce el ceño Justin al preguntar.
—Me encontré con Alice Bledel.
—¿Alice Bledel? ¿No es la hija de Martin Bledel? ¿El viejo a quien íbamos a robarle los diamantes?— Pregunta Raymond bebiendo su cerveza.
—Esa misma, fui hasta su universidad la chica cuando me veo comenzó a temblar como una hoja— Sonreí al recordarlo.
—O sea que te vio el rostro, seguro le dirá a su padre y en cuestión de horas estas preso, Matt ¿Acaso no pensaste en eso?— Me cuestiona Justin.
—Ella no dirá nada por su bien, la amenace con matarla si decía alguna cosa debían ver su cara de espanto.
—¿Qué le propusiste?
—Ayudarnos a robar los diamantes rosas de su padre.
—¿Qué?— Dijeron los dos en unisonó.
—Matt es una locura, le propusiste a la hija de Martin que robe a su propio padre ¿Y ella acepto?
—Obviamente que no pero voy a conversarla del todo se lo que hago muchachos, ella va a ayudarnos— Bebo otro trago de mi cerveza.
—¿Cómo lograras eso?— Pregunta Raymond.
—Seducción, hermano, seducción ¿Qué mujer me ha dicho que no?— Los dos se ríen y niegan con la cabeza— Exacto, tal vez sea un criminal pero cuando se trata de mujeres soy un Casanova, ninguna se resiste a mi encanto.
—Sera muy interesante ver como logras que Alice Bledel te ayude a robar a su padre. - Dice Raymond.
—¿Hacemos a una apuesta caballeros? A que logro que Alice Bledel se acueste conmigo y me ayude a robar los diamantes rosas en menos de un mes.
—Es una interesante apuesta, yo entro— Dice Justin— Se que no lo logras.
—También entro, Matt— Dice Raymond sonriendo— ¿Qué ganamos nosotros si pierdes?
—Les daré 15 mil dolares a cada uno.
—Aceptamos— Los tres nos damos la mano cerrando el trato.
****
Cae la noche en la ciudad del Texas, mis dos socios y yo decidimos salir esa misma noche a divertirnos un rato, llegamos a un local nocturno llamado “Toxic” esta a reventar aquel lugar enseguida pedimos unos tragos, la estábamos pasando realmente bien cuando vimos a un par de chicas morenas que estaban buenísimas no me perdimos tiempo nos acercamos a ellas, bailamos, bebimos tragos lo cual perdí la cuenta, estaba realmente borracho recuerdo que después de aquella fiesta, me lleve a mi apartamento a una de las morenas donde tuvimos un buen sexo luego me quede dormido pensando en una deliciosa chica llamada Alice Bledel.
****
Estoy demasiado distraída esta noche después de la visita inesperada de Matt Bomer a mi vida aun recuerdo las palabras y sus amenazas ¿Ayudarlo a robar a mi padre? Nunca haría tal cosa aunque quisiera a matarme, no iba a traicionar a mi padre de esa manera. No puedo negar que Matt es realmente atractivo pero tiene una mente diabólica, su forma de mirarme me ponía nerviosa no se por el miedo o por la… ¿En que diablos estoy pensando? Ese tipo me robo, secuestro y ahora intenta que cometa un robo a mi propia familia, no podía haber ninguna atracción con ese hombre nunca por más que su rostro fuera tallado por los mismos ángeles, es un criminal.
—¿Alice? ¿Alice? ¿Has escuchado lo que te dije?
La voz de mi novio Jason me ha sacado de mis pensamientos ahora recuerdo que estoy en su auto me ha traído en casa después de ir a cenar.
—Lo siento, Jason… He estado un poco distraída— Suspiro con frustración.
—Lo entiendo estas semanas no han sido fáciles para ti— Dice acariciándome el hombro— Seguro ¿Qué todo esta bien?
—Si, todo esta bien— Sonrió— Gracias por cena ha estado increíble, siempre sabes como consentirme.
—Es que quiero mucho a mi novia— Se inclina hacia a mi, me besa en los labios— Me encanta como huele tu perfume, Alice… Estas tan hermosa esta noche— Vuelve a besarme esta vez con mas intensidad.
Esta vez siento su mano acariciar mi pierna desnuda subiendo suavemente por mi muslo, la suave caricia de su lengua con la mía estoy tratando de dejarme llevar pero no puedo dejar de pensar en Matt y sus amenazas en la forma como me hizo sentir al estar tan cerca de mi.
La otra mano disponible de Jason esta sobre mi pecho lo aprieta con fuerza haciéndome gemir en su boca, me estoy dando cuenta que las cosas están llegando a otro nivel.
—Te deseo Alice— Murmura en mis labios— Mejor vamos a mi casa— Besa mi cuello, succionando mi piel— Déjame hacerte el amor esta vez, quiero tenerte en mi cama.
— Jason, detente— Digo casi sin voz, él sigue torturándome con sus besos en mi cuello— ¡Detente! ¡Para!
—¿Qué te pasa, Alice?— Se aparta enojado.
—No quiero hacer esto aquí en el auto.
—Por eso te dije que fuéramos a mi casa— Toca mi pierna nuevamente.
—No tampoco quiero a tu casa, Jason… Estoy realmente cansada lo siento ¿Si? Te llamo mañana— Me le acerco y le doy un beso en la mejilla.
Se que esta enojado pero en este momento no tengo cabeza para pensar en “sexo” estoy cansada emocionalmente después tratare con mi enojado novio por haberle hecho semejante desplante, aunque debo admitir que me dio un poco de miedo no soy si estoy preparada para perder mi virginidad todavía.
Por suerte no veo a nadie de mi familia, subo a mi cuarto y me lanzo sobre la cama cerrando los ojos con fuerza mientras acaricio mi cien que parece que me va a explotar la cabeza, no dejo de pensar en ese estúpido, sensualmente atractivo, maleante y criminal llamado Matt Bomer.
ESTÁS LEYENDO
Ciudad Del Pecado.
RomanceEs la historia de Alice Bledel una chica de alta sociedad que esta por terminar su ultimo semestre en la Universidad de Texas decidí irse a celebrar con unos amigos a un bar en una noche loca y de copas conoce a Matt Bomer un chico problemático etiq...