Después de terminar de arreglarme decido bajar al primer piso para almorzar con Matt antes de irme al trabajo. Me encuentro con John Miller que esta saliendo de la oficina.
— Hola, Alice— Me saluda con dos besos en cada mejilla.
— Hola John, que gusto verte de nuevo.
— Lo mismo digo, me alegro que estés bien— Seguramente refiriéndose a mi desafortunado secuestro.
— Si lo estoy— Matt coloca su brazo alrededor de mi cintura.
— ¿Te quedas almorzar con nosotros?— Le propone Matt a John.
— No, tengo otra cita importante el cual no puedo llegar tarde, te veo esta noche. Adiós Alice.
Se despide y Diana lo acompaña hasta la puerta para abrirle, Matt y yo caminamos hacia el comedor aún sin entender que se refería John con lo de “Te veo esta noche” Diana nos sirve el almuerzo.
— Estas bellísima con ese vestido el azul resalta mucho más tus ojos— Dice Matt mientras le da un sorbo a su vino.
— Gracias, este es uno de mis favoritos que compre en el centro comercial por cierto no me has dicho que paso con Kevin ¿Por qué su cuerpo no estaba en el estacionamiento?
— No me gusta dejar muertos regados en la calle, obviamente Kevin recibió una cristiana sepultura.
— ¿Y Eric? Porque el detective Davis no lo menciono cuando vino a la casa ¿Qué hiciste con él?
Matt arruga la frente y se toca la barbilla con la mano, no quiere decirme lo que hizo con Eric.
— ¿En serio quieres saberlo?— Asiento despacio a pesar que me da un poco de miedo lo que vaya a confesarme.
— Tengo una trituradora— Murmura sin mirarme se concentra en corta un trozo de su filete de carne.
— ¿Una…Una trituradora dijiste?— Balbuceo sorprendida de pronto siento que se me ha quitado el apetito y tengo muchas ganas de vomitar.
— Si, tú querías saberlo y hay tienes la respuesta.
— Eso es muy horrible— Trago saliva asqueada de solo imaginarme el cuerpo de Eric siendo lanzado en una trituradora ¿Cómo Matt puede hacer estas cosas sin sentir remordimiento? Lo miro no tiene ni una pizca de estar arrepentido de sus actos— Creo no debiste hacer eso.
— ¿No debí?— Dice incrédulo— No me gusta que me cuestionen en mis decisiones, Alice. Ese cabrón de Eric se merecía eso y mucho más, además estaba muerto antes de meterlo en la trituradora no me gusta dejar cadáveres en todos lados, eso no va conmigo.
— No te estoy cuestionando, solo que es muy perturbador que te deshagas de las personas de esa forma.
— ¿Lo estas defendiendo? Recuerda que ese tipo te tenía apuntada con un arma e iba a matarte, no lo iba a pensarlo dos veces para jalar el gatillo. Eric era un asesino a sangre fría y te aseguro era peor que yo, tuviste suerte esa noche.
— Creo que ya no tengo hambre— Digo quitando el plato enfrente de mi.
— Debes comer, estas muy flaca no quiero que te enfermes.
— He estado bajo presión estos últimos días con tu atentado, lo de Eric, mi familia en fin son muchas cosas. He perdido el hambre y el sueño también.
Entonces recuerdo lo de las pastillas anticonceptiva esta misma tarde me haría una prueba para salir de dudas que no tuviera embarazada ¿Será que le decía? Tenia mucho miedo de cual seria su reacción.
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Ciudad Del Pecado.
RomantikEs la historia de Alice Bledel una chica de alta sociedad que esta por terminar su ultimo semestre en la Universidad de Texas decidí irse a celebrar con unos amigos a un bar en una noche loca y de copas conoce a Matt Bomer un chico problemático etiq...