Si hubiera

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Comenzábamos el entrenamiento, las clases del saber,  yo caminaba con el uniforme,  me vio como un hombre ve a una mujer,  yo me lo quede viendo.

  - Esas miradas las conozco y no me interesan plumifero-

El sonrió y me explico que el me encontraba bella, pero no solo en el aspecto de mi cuerpo, que el se sentía muy atraído a mi pero que no sabia que era la sensación,  pero que estaría dispuesto a averiguarlo, aunque lo anterior que le había dicho era una mentira, no tenerlo me volvía loca.

-Vaya,  gracias, y yo estoy dispuesta a llevar a nuestros corazones a la locura-  

Me acerque a el y lo bese; poco me importaban los novatos de la guardia,  pero el me respondió que ya no tenia corazón y que el ya se encontraba demente,  esas palabras esa locura tan igual a la mía,  ahora entendía por que lo amaba;   le dije que si tenia uno, y que estaba muerto pero que lo haría vivir de nuevo y que me lo entregaría a mi.

-Estoy seguro que no tengo, hace tiempo lo use para resucitar a alguien, lo entregue con gusto para devolverle la vida a alguien a quien asesine sin querer, se lo di de alimento; estuve a punto de entregar mi alma pero la alquimia no funcionó y terminó en una gran catástrofe;  ahora soy alguien sin corazón pero eso no importa, sigo respirando -  

Me tomo de las manos y no sabia que sentir estaba tan confundida con sus palabra, aun así mi miraba y se alejaba de mi como si lo que sintiera le causara dolor.

 - Me gusta escucharte, tienes más bondad de la que crees- 

Fue lo único que me dijo, como si me leyera las emisiones en la cara; yo le respondí que era un yoma,  que había hecho muchas cosas y no todas eran buenas, y muchas también me causaban pena y remordimiento, que no me sentía orgullosa de ella,  que tenia mucho dolor, el me acaricio la mejilla y lo mire con los ojos a punto de llorar, no quería por que los otros vieran mis lagrimas, me las trague; siempre me había visto fuerte sin miedo. 

 -La forma desesperada en la que buscas que tu corazón sane explica que tu no eres mala,  los demás te hicimos así-  

Corrí,  la comandante no podía dejar ver a los demás los pedazos de mi corazón roto,  baje la mirada  no quería que nadie me viera hecha pedazos,  el corrió detrás de mi,  me atrapo, me tomo del rostro, me envolvió en sus brazos. 

 - No bajes la mirada, tus ojos son lindos, y tus labios hechizantes,  besame-

   Lo hice lo bese,  lo bese y sentía dolor en el pecho,  sentía miedo, sentía amor,  locura,  y ambos nos perdimos en el hubiéramos vivido bien juntos alguna vez, si el no se hubiera marchado a esa misión que dios le encomendó,  si solo hubiéramos sido nosotros dos Scarlet, y Fatima,  pero de algo también estoy segura nada haría cambiar el amor que tengo por mis demás hijos; pero el hubiera no existe y debía segur aguantadme las ganas de llorar.

Dama de RojoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora