-Creí que pondrías más resistencia para acompañarme de compras-le dije a Gian mientras entrabamos al centro comercial.
-Bueno, fue tu condición para acompañarme a la fiesta en la noche así que negarme no era precisamente una de mis opciones-.
-Eso es cierto-.
-Además, yo también necesitaba algo que usar- agrego Gian- tenía planeado ir así como estoy, pero ahora que iré acompañado, no quisiera "desentonar"-.
-¿Ibas a ir solo?-.
-Si, como te dije, no conozco a mucha gente por acá, mis amigos viven en Roseto degli Abruzzi y no creo que quieran viajar por horas solo para cantar "tanti auguri" y regresar a casa-.
-Entonces si no hay gente, no crees que será una fiesta algo...apagada- Gian río con mi adjetivo.
-No lo creo, estarán mis padres, mi hermano y si llegan mis mejores amigos es más que suficiente para hacer una buena fiesta, a menos que vengan con sus novias, sería dejarme solitario a mí y a Ernesto, bueno ...creo que solo a Ernesto- Me miro como si me estuviera agradeciendo.
-Que bien- me limite a decir dudosa, creía que en la fiesta de Gian habría más gente, por lo que al final acepte acompañarle, pero por lo que recién me contaba, parecía ser más una celebración familiar donde comenzaba a dudar si sería apropiada mi presencia.
-Ocurre algo Alessa?-Pregunto extrañado por mi repentino silencio.
-No, bueno la verdad, sí-.
-Dije algo que te incomodara-dijo culpable.
-No, No, No-le interrumpo-no has hecho nada malo, al contrario, ya hiciste mucho por mi esta mañana, lo que ocurre es que ya no sé si sea buena idea que vaya contigo a tu fiesta de cumpleaños, parece ser algo muy familiar y yo pues. No quisiera ser una...O bueno...-.
-Nada de eso Alessa, tú lo has dicho, es la fiesta de MI cumpleaños, y tú eres MI invitada. No debes temer en desencajar, además eres la única persona que conozco por aquí. Si tú no vas conmigo quizá deba invitar a la Sra. Roxana de Recursos Humanos-reí ante la cara de horror de Gian- NO ME HAGAS ESTO PORFAVOR-Me suplicó dramático.
-De Acuerdo-dije aun riendo- tu ganas, vamos a ver ropa-.
***
-¿Cuál te parece más lindo?- le pregunté mostrando dos vestidos-¿Blanco o Negro? – Gian solo me miró examinando los vestidos que tenía en la mano.
-Qué tal si te pruebas algo Rojo-Contestó.
-Tienes Razón, el negro es más lindo – le entregue el vestido sobrante y entre al probador.
-¿me mostraras como te queda? -Pregunto curioso.
-No-respondí-si me gusta, lo veras en la fiesta.
-Oh Señor Ginoble-escuche decir a una voz chillona.
-Señorita Costa- Exclamó Gian sorprendido, claro, quien más podría tener esa voz tan irritante, Solo Sophie. Supuse que no fue agradable para Gian tener un vestido de encaje blanco en sus manos, al encontrarse con ella.
-Qué lindo vestido lleva en las manos-Dijo Sophie algo burlona, no, quizás ese era su tono de voz natural-Pero creo que esa talla es muy pequeña para usted-intento hacerse la graciosa.
-No se preocupe, yo buscaba algo más...-se aclaró la garganta- varonil
Detestaba A Sophie, no es que ella me hubiese hecho algo malo a mí en particular, solo que lo hacía con todo el mundo que no la adoraba y alababa; siempre he creído que existen dos situaciones con las personas, Un tipo de personas que las detestas sin motivo alguno, y otro tipo de persona que te agrada de sobremanera al momento de conocerla, Sophie era del primer tipo y por supuesto Gian era de la segunda. Imaginar la cara de Gian me hacía querer reír dentro del probador
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Il Mio Professore / Gianluca Ginoble (Il Volo)
Fanfiction"Cuando lo vi entrar por la puerta supe que seria mi perdición, era muy joven como para ser profesor de Historia, excesivamente atractivo para creerlo, sus ojos coquetos , cuerpo bien formado y actitud de casanova. Aquel hombre había cautivado a tod...
