Il Mio Professore / Gianluca Ginoble (Il Volo)

Capítulo 60

-¿y que dijo Elizabeth? – cuestiona mi papá al otro lado del teléfono

-Que para ella no había ningún problema en que me quedara a dormir-.

-¿Segura?-.

-Elena le pregunto y eso me dijo ella – me defiendo e intento mantenerme firme.

-Ah... - se limita a pronunciar mi papá

-Estás dudando de mí – reclamo en un injurioso acto de cinismo de mi parte

-¿Por qué? Debería... - sé lo que hace, me está poniendo a prueba, mi papá sabe que no soy buena mentirosa, especialmente con él, suelo ponerme muy nerviosa, torpe o con ataque de risa para al final soltar la verdad. Ha de haber detectado algo en mi comportamiento que no lo deja seguro sobre lo de "quedarme a dormir en casa de Elena". Ella junto con mi genio del mal lo han planeado, confabulando una creíble historia a mi espalda para luego ponerme en aprietos como este: MENTIR A PAPÁ.

Claro, como si no lo hubieses estado haciendo estos últimos meses acerca de Gianluca.

-No – digo y me sorprende escuchar la seguridad con que eso sale de mi boca -Pero si no te parece me regreso a casa-.

Me doy mentalmente una palmadita en el hombro. Realmente estoy moviendo bien mis cartas con mi papá.

-¡Oh!, tranquila Grumpy - dice volviendo a ser el dulce hombre que es mi padre, eso solo quiere decir una cosa: prueba de la verdad superada -. Puedes quedarte con Elena, y si ya su mamá dijo que no había problema entonces está bien, solo cuídate mucho-.

-No te preocupes – Gianluca se acerca, trae consigo las pizzas recién entregadas y mi estómago gruñe-. Tendré los cuidados necesarios-.

Guiño un ojo a Gianluca, y él me sonríe, deja las pizzas en la mesita del centro y se tumba a mi lado en el sofá.

-Eso espero, estaba algo preocupado, surgieron unos asuntos que debo resolver aquí y me las estaba arreglando para volver a tiempo a casa, pero ahora que sé que no estarás sola me tranquiliza-.

-Estaré bien-.

-¿Quieres que te lleve algo a casa de Elena?-.

- No, ya tengo todo lo que necesito – lo que necesito estaba justo a mi lado jugando con un mechón de mi cabello. – Bueno, en realidad pasaré a casa por cosas antes de Elena.

-Entonces pórtate bien y no se desvelen mucho que mañana hay colegio-.

-Sí, lo prometo, te quiero-.

-Yo más, no te despegues de tu móvil, si te envió un mensaje contéstalo, por favor-.

-Sí, descuida, ni que fuese la primera vez que duermo en casa de Elena-.

-Lo sé, pero siempre me preocupare de ti porque eres...-.

-¿La luz de tus ojos? – bromeo siguiendo su juego.

-Mi bebe – me dice con dulzura y me enternece - Nos vemos mañana-.

-Hasta mañana, te quiero-.

-Yo también te quiero, hasta mañana – cuelga mi papá y mi prueba ha sido superada

Volteo la mirada hacia Gianluca que con sus insistentes ojos curiosos me mira buscando un veredicto.

-Me quedo – digo y la sonrisa más bonita del mundo me es regalada junto con la promesa de un día excelente.

-Bien, entonces tú, yo y pizza-.

-Que romántico – digo entre risas y él me acompaña.

                              ***