Niall entró al supermercado cubriéndose la cara con su capucha y cerrando el paraguas que hacía solo unos cuantos minutos lo cubría de la lluvia que caía en Londres.
Le sorprendía ver como la lluvia enfriaba todo el lugar, no era fan de salir a hacer las compras pero no podía darse el lujo de seguir comiendo los cereales viejos que guardaba en su alacena. Era el descanso de su banda y nunca se había sentido tan solo, se quedaba en su casa, jugaba golf e iba a Irlanda. Ahí terminaba su rutina, aunque aún mantenía el contacto con sus compañeros y amigos de One Direction pero era solo de vez y cuando, eso sí se molestaban en responder las llamadas o contestar un mensaje.
Después de la salida del que alguna vez fue su novio las cosas empezaron a ser raras y dolorosas para todos, cada uno comenzaba a tomar su propio camino y Niall ya no podía ver como cada día estaban a estar a un solo paso de caer por un precipicio llamado olvido. La popularidad de la banda disminuyó, las ventas bajaron e inclusive las vistas en sus videos.
El irlandés de ojos azules llenó su carrito de compras de productos de higiene, comida que le durará al menos un mes y varias cervezas. En su soledad tomaba más de lo que solía. ¿A quién le importa, realmente?
Se encontró a sí mismo mirando las revistas en la fila para pagar, en especial la que hablaba de el gran éxito de Zayn Malik en su carrera de solista y presentaban una entrevista sobre su nuevo álbum, que Niall se había encargado de comprar el mismo día que salió a la venta pero no se atrevía a escuchar. Según las opiniones, tenía un tono diferente a lo que una vez hizo con One Direction, seguro que debía ser así. Pero Niall no quería que la esencia de verdadero Zayn Malik se perdiera, porque él lo conocía bien, sabía sus opiniones sobre casi todo. Ojala hubiera sabido de su salida antes, para que hubiera estado preparado.
La última vez que se vieron discutieron y la última vez que supo de algo de él que viniera de él, fue un: A veces lo que crees que te hace feliz no es lo que realmente te hace feliz. Es un asunto de necesidades.
Como sea, a Niall, Zayn ya le daba igual...una mentira que que buscaba con cada día poder creersela.
/*/
Niall volvió a abrir su paraguas para protegerse de la lluvia que había decidido volver, llevaba un café caliente en su mano derecha y con la izquierda sostenía la revista que había comprado sólo para demostrarse a sí mismo el poder saber de Zayn y evitar las lágrimas o los latidos rápidos de su corazón.
Zayn seguía igual de guapo como siempre, tenía ganas de besar la cara impresa de Zayn en el papel de revista pero sin duda, parecería una loca fanática más de él, que al saber que el oji-miel nunca volverá a suyo tiene que conformarse con una fotografía.
Mientras Niall se miraba en los charcos y los brincaba tomaba sorbos de su café, pasaba las hojas de la revista, volviendo a leer el reportaje de Malik. Lo extrañaba.
Se detuvo bruscamente cuando contra alguien, tirando su revista a un charco y su café derramándose sobre su mano, manchando sudadera y quemando levemente su piel. Dio un paso atrás sin querer mirar arriba porque no tenía ganas de ser reconocido. Miró sus botas que literalmente estaban dentro del charco y la cara de Zayn en la revista hundiéndose. ¿Cómo eran posibles ese tipo de charquitos?
La risa que soltó el hombre con el que había chocado lo sacó de cualquier pensamiento que podía tener en ese momento. La colonia totalmente varonil golpeó sus fosas nasales con fuerza, mareándolo.
El hombre se agacho y recuperó la revista, entregándosela a Niall de nuevo. Ambos estaban siendo cubiertos por el paraguas del rubio. Y parecían ser los únicos en la calle.
-No me ha gustado como salgo en esta foto, debieron elegir otra.
Niall sintió no reconocer la voz pero era porque era el quien no quería aceptar quien se encontraba enfrente suyo. Se armó de valor e intentó mirarlo a los ojos, pero no pudo, los nervios le traicionaron, en ese momento quería que el charco fuera más profundo, lo suficiente para cubrir todo su cuerpo.
-Niall-le habló. Lo había reconocido-No tienes que actuar de esta manera.
- ¿De qué manera, Zayn?
Esta vez lo logró, pero nunca le había resultado tan difícil poder mirar los ojos de Malik. Le dolía poder encontrar el brillo en los ojos de este. Era verdaderamente feliz, claro que lo era; tenía todo lo que un hombre querer y el solo se estaba ahogando en su soledad porque no sabía que hacer de su vida.
-¿Me odias? ¿Me odian?
Niall negó, sus manos temblaban y no podía mantener el paraguas firme, quería salir corriendo pero el magnetismo que irradiaba del supuesto amor de su vida lo hacía querer acercarse un poco más, una última vez antes que volver cada uno a su rutina.
Es sorprendente cómo una persona que empezaba a darte igual, aparece para dejarte recaer en el error que cualquier persona enamorada comete; dejar que se vuelvan algo importante para ti.
Como todas las veces que Niall esperaba una llamada de Zayn la que nunca llegaba, entonces se sentía molesto y con ganas estúpidas de llorar. Se dejaba manejar por los sentimientos incorrectos. Quería a Malik, pero al mismo tiempo quería que se alejara, aunque no tenía que hacerlo, Zayn parecía haberse olvidado de él.
Ahora está enfrente de él con una mirada brillante, el cabello corto y negro...era el mismo Zayn Malik al que amaba.
-Te extraño mucho.
Murmuró, entonces el pelinegro rodeando a Niall con sus brazos con fuerza. El irlandés se sorprendió pero aun asi coloco sus brazos en su cuello, pegándose a él con fuerza, no quería alejarse ni que Zayn se alejara. No estaba listo para ser dejado de nuevo.
-No te vayas. No esta vez, Zayn-pidió Niall, dejando caer paraguas para abrazar más fuerte al morocho.
-No esta vez.
Y sonó como promesa.
No me gustó mucho, no se ni donde salió, pero aqui lo tienen. Sean libres de juzgarlo a su parecer. ¿Les gustó?
No se como agradecerles todos los votos y comentarios, no los merezco. Muchas gracias. All the Love para todos.