-Dear Lord, when I got to heaven, pleeease let me bring my man-cantó Niall Horan con todo el sentimiento que llevaba en su corazón después de haber visto la película del gran Gatsby.
Si por algo era conocido el rubio era por estar cantando y citando a sus series favoritas a cada momento. Si estabas con él tenías que tener cuidado de mencionar ciertas palabras o nombres. Ese día volvía a casa cantando a Lana del rey, alegre de que por fin podría pasar tiempo con su mejor amigo, el conocido Zayn Malik yno por las mejores razones.
Iban al mismo colegio y tenían clases juntos pero el moreno casi siempre estaba siendo rodeado por un montón de muchachas y muchachos que buscaban su atención o querían demostrar su odio hacía él. Justo como esa mañana.
- ¡Eres un idiota! ¡Ugh, te odio!-le había gritado la pelirroja, dándole una bofetada con fuerza pero Zayn apenas se inmutó.
-Pobre chica-comentó Niall, situándose justo a un lado de su amigo.
--No me puede culpar, ella quiso acostarse conmigo. No debió esperar lo que no le ofrecí.
-Suenas como un cabrón sin sentimientos.
Zayn rió: - A quién le importa. Además sólo tengo ojos para ti.
Tomó a Niall se los hombros, dejó un beso casto en su frente y caminó hacia su siguiente clase con su típica sonrisa arrogante. Si no fuera porque Niall lo conocía desde hace mucho y lo hacía bien, pensaría que no tenía otra faceta.
-Seguro que sí-murmuró dolido consigo mismo por querer creer esas palabras.
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Niall suspiró con la tonada de la canción en su mente mientras abría la puerta de su casa con una sonrisa cansada pero feliz. Había tenido un buen día e inclusive se podría decir que productivo y está feliz por ello y como era el último viernes del mes, haría lo que siempre hacía con Zayn desde que cumplieron trece; pedían una pizza, compraban su refresco favorito, un montón de dulces y pasaban la noche en la casa de árbol que juntos y con ayuda de sus madres habían construido cuando tenían ocho. O que bien, se podría decir que habían contratado a un carpintero pero aún así era muy importante para ellos.
Era su casita del árbol a donde iban si se sentían tristes, si estaban aburridos o felices, habían pasado un montón de tiempo ahí. Estaba en medio de los patios de ambos jóvenes y habían creado una escalera para la casa con palos del árbol a quien llamaban Julie y, además se habían fabricado otras dos escaleras para cuando ambos quisieran salir por sus ventanas por la noche cuando necesitaban ir hacia el árbol.
Lo más importante para Niall y Zayn, eran sus iniciales talladas en el tronco: Z + N. Con lo que buscaban mostrar que les pertenecía a ellos y que era su guarida.
Niall dejó sus cosas en la sala de su casa y sacó de su mochila el paquete de cervezas que había comprado para acompañar la pizza de ese viernes, tomo la pequeña hielera de Bob Esponja, vació varios hielos de la nevera, puso la cerveza y fue hacia la casita. Hizo malabares con su teléfono mientras llamaba a Zayn, para preguntarle si ya estaba en casa, pero después de timbrar varias veces, cayó a buzón.
Bufó molesto y subió la escalera con una mano mientras con la otra sostenía la hielera, antes de que el pudiera siquiera mirar la casa dejo la hielera, subió un poco más y asomo la cabeza encontrándose con la imagen más desagradable. Zayn teniendo sexo con un tipo que reconocía de algún lado pero no sabía de dónde.
La mirada estupefacta de los jóvenes desnudos era toda la expresión que mostraban pero Zayn en el fondo sabía que significaba problemas con el rubio.