(74) Pietro Maximoff

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Lunes.

Estabas muy feliz de la vida, caminabas por la calle directo a tu hogar, era un apartamento en la segunda planta, vivías sola, tu trabajo no era muy demandante así que tenías prácticamente la tarde libre. Hoy tenias visitas, casi todas las noches tenias, cuando estabas cerca de tu casa te acordaste que tenías que depilarte completamente. Giraste tu cabeza en varias direcciones tratando de buscar un supermercado, en la esquina de tu casa había una estación de servcio, caminaste mas apurada y llegaste. Compraste cera y una maquinita de hombre para afeitarte. Saliste de allí, ya estaba oscuro y en dos horas llegaría tu visita.

Ya en tu casa empezaste a depilarte, dolía mucho, la cera era tu enemiga mortal, la odiabas. Cuando finalizaste, tiraste todo y esperaste a tu visita.

Todos los días a las 11 de la noche desde hace 5 meses un chico de pelo platinado venia a tener sexo casual contigo, se conocieron en el parque y los dos estuvieron de acuerdo que ser amigos con beneficios. Eran las 11 ya y el timbre sono.

Fuiste a abrir y antes de poder saludar ya tenias los labios de Pietro irrumpiendo tu boca.

-No sabes como extrañe tu cuerpo en la misión.

Amabas su acento, cuando estaba excitado se le marcaba aun mas que nunca, el sabia lo que causaba en ti y siempre lo utilizaba para derretirte.

Martes.

Ahora eran las 3 de la mañana y habían terminado de tener sexo por tercera vez, Pietro no se cansaba pero para ti era muy difícil seguirle el ritmo, ambos estaban acostados y abrazados, en media hora el se iría, aunque los demás vengadores ya sabían lo que hacia.

-Nos veremos mañana preciosa.

Eso te hizo recordar que mañana vendría un chico, lo habías conocido hace 3 semanas y hoy seria la primera vez que estarían completamente solos.

-Mañana no puedo, tengo visitas Pietro.

Pietro dejo de ponerse la remera para mirarte, confundido por sus sentimientos solo asintió y se fue corriendo. Te tiraste en tu cama y dejaste que el sueño te invadiera.

Miércoles.

-Adios Kate- saludaste a tu compañera y fuiste tras Nathaniel.

Nathaniel era un hombre guapo, no estaba casado, ni tenia hijos. Lo mejor de todo es que era británico y eso sumaba puntos. Fuiste en busca de el para ir a tu hogar, ibas a cocinar algo y mirar una película, algo tranquilo.

-Alli estas.

Nathaniel se dejo ver en su coche, te subiste a el y condujo hasta tu hogar.

En las instalaciones de los vengadores.

Pietro estuvo nervioso todo el dia, en el entrenamiento se dejo patear el trasero con el Capitán, no el importo la humillación. Ahora no tenia nada que hacer en las noches y la idea de que estés con otro hombre en tu apartamento no lo dejaba dormir, cansado del insomnio agarro dinero y fue a un bar. Tony lo vio salir y le informo a su hermana gemela, Pietro no tenia muy buena pinta.

Una vez fuera, corrió un poco y llego a un bar que justamente estaba enfrente de tu casa, tan solo mirar la luz encendía hizo que le encogiera el corazón, tratando de ignorar ese sentimiento entro al bar, allí había mujeres hermosas pero ninguna era como tu, consiguio a una dispuesta a tener sexo con el y no dejo pasar la oportunidad.

Mientras que del otro lado de la calle tu charlaban con Nathaniel, era un buen hombre pero no tu tipo, hablaron sobre viejos amores, gustos y algo de fútbol. Le contaste sobre Pietro, obviando la parte de que es un héroe y demás, el lo definio como amor pero no era así.

Luego de 2 horas de la película el en fue, no sin antes aclarar que solo te quería como amiga, un golpe a tu orgullo.

Pietro y tu estaban en camas separadas, el con una desconocida y tu sola, ninguno podía dormir, a los dos le hacia falta el otro.

Jueves

Estabas con Nathaniel en tu casa compartiendo una copa de vino, Pietro no te envió ningún mensaje, tampoco le enviaste uno, Nathaniel había decidido venir a acompañarte para que no estés sola. Un golpeteo incesante en la puerta los distrajo, fuiste a abrir y viste a Pietro furioso.

Corrió hacia Nathaniel y se lo llevo hasta su casa. Cuando volvió tu seguías sosteniendo la puerta confundida. Una ráfaga de viento te saco de tu hipnosis.

-¡Vete Maximoff! No quiero que vuelvas nunca mas.

-Pero...- Pietro vio las lágrimas recorrer tus pálidas mejillas y se fue.

Viernes

Hace no mucho habías echado a Pietro de tu hogar, estabas confundida y triste, habías admitido que lo amabas y el venia y hacia estas estupideces. No podías dormir, te habías acostumbrado a las caricias de el luego del sexo.

Te levantaste cuando sentiste tu puerta vibrar y luego caerse, una sombre alta se dejo ver, prendiste tu luz y viste a Pietro.

-Preciosa no podía soportar la idea de que estés con ese imbécil. Yo soy mucho mejor que el, el no sabría que si toco detrás de tu oreja y muerdo tu labio lanzarías un gemido hermoso o que prefieres dormir del lado de la pared, que si toco tus piernas y las besos te hace sentir amada y protegida. El nunca te va a conocer como lo hago yo. Conozco cada conjunto de tu ropa interior, se todo sobre ti y por favor no llores que siempre te quejas que cuando lloras desperdicias el maquillaje que te compras en MAC.

Te estabas derritiendo ante las palabras de Pietro, querías decir también todo lo que conocías de el porque lo hacías, conocías sus puntos débiles pero prefieras demostrarlos.

-Estas noches que dormí sin ti se me hicieron eternas Pietro.

Corriste a el y lo abraszte fuerte.

-Prometo nunca dejarte sola en nas noches ni nunca.

∆∆∆∆

All the fucking love to my queens x

One Shots •Marvel•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora