Capítulo 18.

1.6K 91 12
                                    

_____ Seymour.

  Entré a la casa y caminé hasta las habitaciones que Axl mencionaba, solo para hacer tiempo y decidir sí realmente quería pasar la noche aquí en la misma casa del hombre que me estaba poniendo a alucinar. Yo me enteraba que John se quedó a dormir en casa de una mujer que lo hacía sudar, y sería la primera en querer largarse a llorar, ¿Por qué entonces yo sí podía? Bonnie estaba harta hoy de todos, estaba aquí porque quería emborracharse y luego volver a casa pero no quería ser su problema suponiendo que ya tenía bastantes en casa. Digo suponiendo, porque tampoco sabía lo que pasaba, y ella no me lo diría. Bonnie solía ser así de reservada en esa parte de su vida; nunca enfrentarías un problema sola,  teniéndola a ella como amiga, pero nunca enfrentarías un problema de ella porque decía que tenía que vencerlo sola. Con suerte después te pondría al tanto de todo lo que pasó, aunque no entendía como siendo la mujer más segura que conocía, era la mujer más terriblemente insegura que conocía también.

  Me recibiría en su casa y todo, pero suficiente habiendo logrado que pasara todo el día conmigo. A lo mejor, dejarla descansar de mí y de todos en general sería lo mejor que pudiera hacer por ella. Volver a casa con Stephanie tampoco era una opción, y con John... estábamos enojados. Y tampoco me había quedado nunca en su casa. Lo único que tenía en este momento si no era a Bonnie, era a Axl.

  Salí de la recamara cerrándola de nuevo y caminé de vuelta hasta donde Axl estaba. Todavía me estaba esperando afuera.

  No estaba segura de merecer una habitación tan enorme y preciosa, pero sí podía elegir, siempre elegiría esa. Mil hoteles había visitado y sentía como que esa habitación vencía la mayoría.

  El sonido de mis tacones lo hizo girar a verme casi de inmediato. Me sonrió y fue una sonrisa tierna, fue como si hubiese estado esperando que regresara.

— ¿Encontraste una habitación? —preguntó, apoyando su brazo en su rodilla y su barbilla en su puño cerrado.

— ¿Estás seguro de que quieres que me quede? —ni siquiera sabía por qué estaba obedeciéndole. Debería de irme con Bonnie, por muy irritable que estuviera. Quedarme con Axl no tendría que ser una opción y de pronto era mi opción más segura de todas.

—Claro que lo estoy.

— ¿Y seguro que quieres que me quede con una habitación tan bonita como esa?

—Puedes tomarla si te gusta. ¿Te gusta, verdad?

—Es la habitación más linda que he visto. Si yo fuera tú, la reclamaría como mía.

—Eso lo dices porque claramente no has estado en mi habitación guapa. —guiñó un ojo y tocó a un lado de la mesa, para que me sentara con él. Aun sin entender por qué le obedecía, mecánicamente eso hice y me senté a su lado. Ahí estaba presente otra vez ese magnífico olor de su colonia.

— ¿Dónde está tu habitación? —pregunté con curiosidad, aunque creía saber cuál era.

—Arriba, en la tercera planta. —lo sabía. Por un momento, me había costado trabajo creer que todo un piso fuese una habitación pero por otro lado, me costaba imaginar una habitación menos sofisticada en una casa como está para el mismo inigualable Axl Rose.

—Recuerdo haberte visto entrar a una recamara del segundo piso la primera vez que vine aquí con mi madre, no hasta allá arriba.

—No invito a nadie a pasar a mí recamara, ni siquiera a tu madre. Ese es mi espacio, _____. No quiero que el aire este contaminado con recuerdos de otras personss y tampoco quiero sexo sin sentido en mi recamara.

— ¿Mi madre para ti es sexo sin sentido? —pregunté con mi ceño ligeramente fruncido, él se rió y negó rápidamente con la cabeza. Aun no entendía que veía de malo en mi madre, ella era más que hermosa. Violenta, pero hermosa. Si a él no parecía interesarle la mujer que la mitad de los hombres querrían, ¿Entonces por qué seguía con ella? ¿No sería más fácil cancelar todo evento y dejar que alguien se enamore de verdad de ella? Y si mi mamá era consciente de todo esto, ¿Por qué no se alejaba?

A rapist stepfather. |#1| Axl Rose.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora