Capítulo 20.

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_____ Seymour.

  Ya no me sorprendió ver a Axl tan cariñoso con mi madre. Su relación estaba fuera de los límites. Era insana, hablaban mal uno del otro... yo no tendría ni de amigo a alguien que se hubiese referido a mí como "una perra", pero ahí estaban ellos dos rompiendo las barreras de la normalidad de eso. Vergüenza, o lastima... no sé qué demonios sentiría sí tuviera una relación así pero, en tanto, mi deber era respetar eso, aparentemente.

  Sosteniendo la mano de John lo miré confundida. El día de hoy no había hablado mucho. Fuimos al mejor restaurante de comida rápida; era el mejor al menos para mí y pedí una pizza por supuesto. Él apenas y tocó su comida. Estaba cortante, pero el día de hoy también me atrevía a decir que estaba completamente pálido y sin color. Siempre era pálido pero hoy te creerías que había sido apuñalado y su sangre se había drenado.

  ¿Tan mal la estaba pasando? Pero él estaba aferrado en decir que se encontraba bien.

—Dímelo de una vez, ¿Está todo bien? —pregunté con una mueca. Siempre lucía tan viajado y tranquilo por la droga... hablábamos solamente de marihuana, le ayudaba a controlar algunas cosas y yo no tenía ni un solo problema con eso porque no le interesaba consumirla todo el día ni mucho menos consumir otro tipo de drogas. Consumirla era nada más y nada menos que su decisión. Es solo que hoy, no era la marihuana la que lo tenía así.

— ¿Hay acaso alguna razón por la que algo debería de estar mal, _____? —preguntó, dejándome ensimismada en mis pensamientos. Había estado tan nerviosa con todo que ya ni sabía si era una pregunta capciosa o una afirmación. —Porque te he dicho que estoy bien; aunque bueno, no tan bien. La resaca no me deja en paz.

— ¿Te embriagaste anoche? —pregunté confundida. No era sorpresa de todos modos si Woods se lo llevó de fiesta. Él se reía sin humor.

— ¿Cuál es la sorpresa?

—No, ninguna... ¿Puedo hacer algo para que te sientas mejor? —pregunte. Él solo negó con la cabeza y ahí terminó, de momento, lo más que logré hacer que John hablase. Apreté los labios, no se sí con tristeza o impotencia, pero tuve que mirar hacía otra parte del restaurante. No quería discutir, pero no la estaba pasando muy bien con un John callado, para eso, mejor me hubiera quedado con mi banda favorita.

—Recuerda que mi humor nunca tendrá que ver contigo, bonita. —dijo, después de tomar mi mano por encima de la mesa. Provocó mi mayor sonrisa y me elevé por encima de la mesa para poder besarlo con fuerza.

  Agitada, alborotada, enamorada, y hasta excitada fue como acabé después de ese beso, que sin duda hizo más sencillo poder soportar su tan extraño ser el día de hoy.

—Quería preguntarte algo. —le dije. Tomando mi malteada, atrapé la cereza que flotaba sobre la espuma rosada y me comí la mitad, antes de ofrecerle mi otra mitad a John, quién gustoso la tomó provocándome sonreír de nuevo. — ¿Crees que es tan malo que a veces tenga pensamientos sucios sobre otras personas?

—Creo que ningún pensamiento es malo, siempre y cuando no afecte a nadie.

— ¿Crees que pensar a veces en Axl daña nuestra relación? —pregunté, más directamente y John sonreía. Esos hermosos dientes blancos y perfectos. Mi pregunta acababa de hacerle reír.

—No lo sé, nena. No soy un terapeuta de pareja pero sí tengo que decir que a mí no me importa eso. A tu madre tampoco debería de interesarle. Ella sabía que así sería.

—Bueno, pero son solo pensamientos. No pienso volver a faltar a nuestra relación a menos qué...

—Sea Tom Cruise quién lo pide. —me reí con ganas y él incluso también. Ahora iba a comer la cuarta rebanada de pizza porque al menos por hoy, me importaría una mierda comer lo que fuera.

A rapist stepfather. |#1| Axl Rose.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora