Anecdotario Público

El Laboratorio

¿Qué haces aquí vestida así? El Laboratorio es conocido por su infalibilidad conteniendo adolescentes hormonales y uno que otro adulto. Así que si quieres entrar, debes enfundarte tu equipo de protección; aquí tienes unos guantes y el traje, no te olvides de la máscara. ¿Que no te gusta el color naranja del traje? Lo siento mucho, pero no tenemos en más colores... esto no es una pasarela; se trata de un complejo de alta seguridad para almacenar locuras de todo tipo.

Sígueme y te mostraré. Los individuos están encerrados en celdas transparentes de un grosor imposible de quebrar. ¿Ves esa chica de ahí? Chocó con un teléfono público y desde entonces está aquí. Y ese muchacho de allá fue atacado por una paloma, de modo que también lo encapsulamos para ver los efectos del evento en su cerebro. No prestes mucha atención a la niña de azul en esa celda; se volvió demente desde que se ofreció a pagar sus compras con un beso y el muchacho de la caja, atractivo por cierto, le dijo que se llevara sus compras sin más, pues diría que había sido un asalto.

¿Esa señora de allá? Ella... era maestra hasta que tuvo unas palabras con una alumna: "Ojalá como abres piernas abrieras libros"

Lo sé, hay muchísimas celdas, todas con alguna anécdota que contar. ¿Qué te parece si recorremos este pasillo hasta llegar al final mientras te cuento qué sucedió en cada caso? No tienes que pensarlo dos veces; sé que te gustará acompañarme. ¿El traje qué tiene que ver con acompañarme? ¡Oh, vamos! No es tan incómodo...

Bien, ya, no insistas. Hagamos un trato: te lo puedes quitar durante el recorrido, a cambio de que no quites tu atención.