«La distancia no es un problema. El problema somos los humanos, que no sabemos amar sin tocar, sin ver o sin escuchar. Y el amor se siente con el corazón, no con el cuerpo.»
Elizabeth Evans.
Sentada en mi escritorio con los archivos adjuntos del caso de Tony me puse a pensar.
Tenía varias teorías algunas de estas eran:
Tony mentía con su historia. Cosa que creo falsa debido a las emociones en sus ojos al narrar la historia.
La chica quiso practicarse el aborto y salió mal el proceso.
El padre de Connor no aceptó que su hija menor hubiese salido embarazada sin haberse casado y él sólo quería que abortara al bebé, pero todo salió mal.
No lo sé. Quiero investigar más a fondo sobre esto. Necesito encontrar la verdad.
¿Pero sabéis qué es lo que más me tiene comiendome la cabeza?
Que no encuentro por ningún lado el acta de defunción de la chica.
Busqué en los archivos, en las cuentas, y en los registros, pero nada. No existe ninguna acta de defunción con el nombre de Natasha Spinelli.
¿Donde está Natasha?
Han pasado exactamente tres semanas desde que visité a Tony en la cárcel y acepté su caso. Todos los viernes iba a verlo y a hablar con él, me contó más sobre su historia. Al menos se había abierto un poco más con respecto al caso, se dio cuenta de que estoy muy dispuesta a ayudarlo.
Revisé el sobre manila tamaño carta que yacía en mi historial de casos. Ahí estaba el acta de defunción del feto que traía Natasha Spinelli dentro de sí misma.
Suspiré derrotada y cerré la computadora. Ya no podía seguir trabajando por hoy, la hora de salida ya había pasado y yo seguía en la oficina.
No he salido de mi casa en todo este tiempo, sólo trabajar, trabajar y trabajar. Visité a la abuela y a mi madre sólo una vez la semana pasada, y súper rápido porque Harper me esperaba en mi departamento.
Harper sabía absolutamente todo, de Connor. Lo de Toni no, porque todos mis casos son confidenciales.
A Connor lo seguía viendo, el se fue de viaje para ir partido el mismo día, no lo llamé no él me llamó. Sí, descubrí que había sido él quien me había llamado esa noche.
Él paseaba como idiota delante de mí con sus modelos de mierda, no sé porqué las odiaba. Sólo... ¿No les pasa que ven a alguien normal y de repente les cae mal? No sabes ni como ni porqué sólo no las soportas. Así me pasaba.
Connor está en la oficina de seguro con algunas de ellas. Esta semana la tiene libre de juegos por eso está aquí.
Me levanté del escritorio y tomé mis cosas para después salir. Caminé por el solitario bufete y salí hacia el estacionamiento. Todo está muy solitario.
Me subí a la camioneta y puse los papeles en el puesto del copiloto. La encendí y me dirigí hacia Rosemary beach. Tenía planeado pasar una semana ahí, hoy es viernes, ya visité a Toni y no tenía nada que hacer, además de seguir investigando, pero debido a que van a hacer esa cosa de la decoración navideña y eso, blah Blah Blah, nos dieron la semama libre. Gracias a Connor está demás decir.
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Estereotipos
RomanceElizabeth Evans: ella no es más que una mujer como cualquier otra, pero tiene algo que la hace diferente a las demás, ¿su físico? Quizás sí, pero no sólo es eso, son sus sentimientos, su manera de pensar, de actuar, su manera de demostrarle al mundo...