Venganza

Capítulo 8

- ¿Ese cliente realmente necesita venir en esta hora? - Gianluca preguntó indignado a Theo que tendría que explicar la situación por milésima vez.
- Estará justo hoy aquí en Londres, está resolviendo algunos asuntos, y tan pronto como sea posible vendrá a negociar las obras.
- ¿Tú no puedes hacer eso?
- ¿Cuál es el problema para ti hacerlo? - Gian lo fulminó con los ojos. Si se tratara de cualquier otro día no le importaría, pero hoy Zachary estaba allí y Elise también estaría en su apartamento, él no la dejaría sola con él.
- Si estás preocupado por Melanie entonces llámala y le explique cuál es el problema que tienes con su primo.

Gianluca resopló. El cliente había elegido el "día perfecto" para hacer una visita... Si por lo menos el hombre supiera lo que quería comprar, pero no. Podría pasar minutos, incluso horas para elegir para tal vez llevar sólo una o ninguna, en el peor de los casos.

- Vuelvo luego. - Gian dijo tomando su chaqueta que estaba en la silla y Theo lo miró con una cara confusa.

Dejó la galería y se metió en el coche. Era probable que tomaría un tiempo para llegar a su destino debido al tráfico, pero a pie era ciertamente peor. Después de unos minutos se aparcó el vehículo y después de caminar unos pocos metros, se detuvo frente a la boutique de novias y suspiro, era la primera vez que iba allí.

Entró y se dirigió a la recepción, donde se supuso que la chica fuera Jade por la descripción que su novia le había dado. Ella escribía algo y se tomó unos segundos para mirar a él, y cuando lo hizo se sorprendió, era muy raro ver a un hombre allí.

- ¿En qué te puedo ayudar? - Ella preguntó amigable.
- Me gustaría hablar con Elise.
- No hay nadie aquí en la tienda con ese nombre - aclaró y él entrecerró los ojos... No quería perder la poca paciencia que le quedaba justo con ella, porque desde que el día había empezado su temperamento estaba en el límite.
- ¿Tú no eres Jade?
- Sí... - respondió ella confundida. – Pero no sé quién es Elise.
- Y Melanie, ¿sabes? - Miró serio.
- ¡Oh, sí! Lo olvido porque nadie le llama por su segundo nombre, solamente su novio... - y cuando ella dijo esto él sonrió sin mostrar los dientes y ella se sorprendió. - ¡Oh Dios mío, eres Gian!
- John. - Corrigió.
- ¡Finalmente te estoy conociendo!
- También estoy contento, ¿así que puedo hablar con Elise?
- Ella está atendiendo ahora.
- ¿Va a tardar mucho? - Preguntó un poco impaciente y ella arqueó una ceja, tampoco era tan pacienciosa así...
- Te daré una pista: Está con una mujer que ha pasado toda la ciudad en busca de un vestido.
- Jade, querida... - ella tuvo la sensación de haber escuchado un tono levemente irónico, pero ignoró - Sólo necesito hablar con ella durante un minuto, quiero dar un mensaje.
- Tal vez pueda ayudarte. - Suspiró.
- Está bien, realmente puedes... - ella le dio una pequeña sonrisa - Voy a tener que atender un cliente más tarde hoy, ¿podrías ir cenar con Elise y quedarse con ella hasta que le llame?
- ¿Por qué?
- Debido a que puedo tardar un tiempo, así que si puedes hacer compañía hasta que salgo del trabajo y después paso por ella en el restaurante, estaría muy agradecido.
- ¿Por qué ella no puede ir a su apartamento?
- ¿Ya te dijeron que haces demasiadas preguntas?
- Por supuesto... Y no me has contestado.
- No quiero que esté sola...
- ¿El problema es tu primo? - Ella preguntó riendo un poco - ¿Tienes miedo de dejarla sola con su primo?
- Debería haber sabido que ella te diría al respecto, ¿no es así?
- Ella es mi mejor amiga, lógico que me dice todo. - Él exhaló el aire a través de la nariz.
- Entonces, ¿puedo contar contigo para que me hagas este favor? - Gian ya pidió agitado.
- Puedo intentarlo, ella está cansada, querrá volver pronto a su casa... Pero voy a tratar, si te hace sentir tranquilo.
- Gracias - asintió.
- A pesar de que es muy, muy extraño...
- Gusto en conocerte, Jade.
- ¡Gian! - Gritó Melanie desde el fondo de la tienda y él la miró, ella vino alegre y le dio un abrazo. - ¿Qué haces aquí?
- Surgió un imprevisto en el trabajo, traté de llamarte y cómo no has contestado, vine... Voy a tener que quedarme con Theo en la galería para atender a un cliente, creo que voy a tardar un poco en llegar en casa, por lo que pedí a Jade para ir a cenar contigo en algún restaurante.
- ¿Y tú primo?
- Puede ir a cenar en algún lugar...
- Él podría venir con nosotras... - sugirió Elise.
- ¡No! - Gian dijo con la voz más enérgica - Creo que va a querer descansar.
- Hablamos mucho y creo que él debe estar cansado ​​del viaje - dijo Jade, socorriendo Gian y él suspiró. - Puede ir otro día.
- Sí - Gianluca completó y detrás de Melanie miró a Jade y dijo "gracias" sin hacer ruido. - Bueno, tengo que ir, te veo más tarde. - Dio un ligero beso en los labios de Elise y luego dio un suave abrazo en Jade - ¡Placer conocerte! - Y se fue rápidamente. Ambas se miraron y sonrieron.
- ¿Entonces? - Melanie Le preguntó a su amiga.
- Está aprobado... Hacéis una hermosa pareja.

Las dos rieron y Melanie oyó a la mujer que estaba atendiendo llamando por su nombre.

- Vamos, yo te ayudaré - dijo Jade y se fueron a los probadores...