Capítulo 33

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En los siguientes días, Melanie se encontró casi todas las noches con Zachary. Tal como él había prometido, salían a cenar y divertirse juntos, ella incluso había logrado sentirse menos triste, ya él tenía que admitir que todo era un poco más difícil de lo que pensaba que sería. Desde luego él se había dado cuenta que ella no era un tipo fácil, y estaba descubriendo que su personalidad tampoco era. A pesar de estar un poco confusa, Melanie al parecer sabía qué quería. Y no era porque salían que ella le permitía tener ninguna actitud más íntima como si ya fueran mejores amigos o amantes.

Ella se sentó en el sofá, por alguna razón, ese viernes Zachary había insistido en que conociera su apartamento antes de ir a un bar. Ella suspiró y él regresó con una botella de vino y dos copas.

- ¿Qué tal si nos quedamos aquí un poco más? – Preguntó con una sonrisa, sentado cerca y abrió de la botella, ella lo miró mientras él servía la bebida.
- Sabes que no puedo beber.
- No pasará nada si tomas sólo un poco.
- Yo no quiero. - dijo tranquila pero decidido, él tragó saliva y su rostro se hizo más serio. Pronto dejó la botella.
- De acuerdo... - Después de unos segundos Zach se acercó más y puso su mano en la pierna de Elise – No sabes cómo me alegro de estar contigo hoy.

Zachary se inclinó y capturó los labios de Melanie. En un primer momento, ella se sintió incómoda, y luego simplemente cerró los ojos, con un poco de sacrificio. No estaba acostumbrada a besar otra boca que no fuera la de Gianluca, y sin duda hacer la comparación de la forma cómo los dos se besaban no ayudaba, pero el hecho era que su nuevo novio no se podía comparar a su marido.

Gianluca en la primera vez que la besó fue capaz de quitarle el aliento como ningún otro hombre había hecho, y al parecer nadie más la besaría así de nuevo. Él sabía bien lo que le gustaba y cómo le gustaba. Zachary no. Pero estaba tan distraída evaluando todo que casi no se dio cuenta cuando él la agarró por la cintura, y rápidamente la apoyó en el sofá, dejando su torso sobre ella... Fue entonces cuando ella reaccionó.

- ¡Espera Zachary! - él dejó de besarla.
- Pensé que querías – dijo mordisqueando la barbilla de Elise y ella sintió un escalofrío.
- Todavía no... – Con una expresión de descontento se levantó rápidamente - Voy a por mí abrigo. – salió y Melanie tomó una respiración profunda, realmente no había pensado que él iba a intentar ese tipo de cosas ya que había sólo un mes de que salían. Pero ¿por qué se quedó asombrada de todos modos? Él era un hombre, era obvio que no se aguantaría mucho tiempo antes de la primera embestida. No sabía exactamente por qué estaba sorprendida por esta actitud, incluso porque el propio Gianluca había hecho lo mismo, pero, por supuesto, la situación era completamente diferente. En aquel tiempo ella estaba sola y él era muy interesante, entonces tanto su corazón como su cuerpo no tardaron para corresponderlo, pero todo era diferente ahora.

Poco después ambos salieron y se fueron a un bar con música en vivo, como Melanie no quería beber, al menos tenía algo que ver mientras estaban allí.

*****

- ¿Por qué no invitaste a Jade? - Gianluca preguntó a Theo mientras iban en dirección al bar.
- Se fue a casa de su madre. Me abandonará todo el fin de semana.
- Entonces, ¿por qué no bebemos en casa? – Theo se rió.
- Necesitas para distraerte un poco de Gianluca. No es bueno estar deprimido en casa o en el trabajo.
- Voy a seguir deprimido en el bar. – dijo con algo de humor y los dos se rieron.

Theo entró por la puerta e irónicamente, lo primero que vio fue Melanie se riendo mientras hablaba con Zachary. Jade le había dicho algo al respeto, pero entre oír y ver había cierta diferencia, y si a él no le gustó ni un poco verlos tan cerca, era obvio que la reacción Gianluca sería mucho peor... Incluso podría comenzar una pelea, en la mejor de las hipótesis. Era celoso de su esposa, y verla con su primo le haría hervir la sangre...

- ¡Ah no! – exclamó Theo girando y volviendo rápidamente, obligando a Gian a retirarse también.
- ¿Qué pasó? – le preguntó.
- Hmm... Vi una ex-novia, vámonos a otro lugar. – Gian lo miró divertido.
- ¡Para con eso! Jamás has sido alguien hombre de huir de ninguna mujer, Theo... – miró a su amigo y se dirigió hacia la entrada.
- Gian! Vamos... - y Theo solo suspiro. ¡Demasiado tarde! Gianluca solamente se quedó serio y apretó la mandíbula con todas sus fuerzas. - Vámonos.

Theo no supo por qué demonios justo en ese momento Zachary miró en esa dirección y los vio, entonces se abrió una sonrisa, y como buen amigo que era Theo en silencio sacó Gian de ahí, y se dio cuenta de que era casi como estar en el borde de un volcán a punto de tener una erupción... Y tenía razón.

Gianluca inmediatamente dio un par de pasos y repetidamente pateó una cabina telefónica que estaba cerca. Theo se limitó a mirarlo, tal vez fuera mejor dejarlo descargar ira antes de irse, pero el momento fue de corta duración, porque segundos después, Zachary apareció allí y su primo lo encaró con una mirada asesina.

- ¿Cómo estás Gian? – Zach preguntó con una sonrisa irónica. Theo inmediatamente entró en el bar. No quería poner Melanie en un lío, pero ella tenía que salir allí, aunque él mismo tuviera que llevarla a casa.
- Realmente eres un canalla, ¿no? Siempre supe que querías Elise.
- Tanto quiero que ella ya me aceptó.
- Lo dudo. – Zach se acercó quedándose unos pocos centímetros de distancia de Gian.
- ¿Sabes qué voy a hacer esta noche Gianluca? – Le preguntó con libertinaje – Voy a follar con su esposa.

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