Amor verdadero. (Taylor Lautner)

Capítulo 87: Margaret.

Bueno, como todo verano sin darnos cuenta siquiera nos encontramos a mediados de Agosto y ahí empezó todo.

Taylor tuvo que irse de viaje tres semanitas por unos asuntos de trabajo. La primera semana estuvo bien; me iba de compras, me iba a pasear con mi hija, nadaba en la piscina o incluso me quedaba por casa. Cualquier cosa me iba bien.

A partir de la segunda mi vida se convirtió en un infierno.

Los días refrescaron y no pude ir a nadar, ya me había recorrido todas las tiendas y tenía el armario lleno, todos los programas que salían en la televisión ya me los sabía de memoria, Arelia y Lena seguían sin dejarme hacer tareas y lo peor de todo, Margaret se había apoderado de mi hija.

Durante los primeros días Margaret fue la mejor niñera que se podría encontrar, pero un día comenzó a tener un extraño comportamiento.

Me despertaba por las mañanas y veía a Amanda en la cocina desayunando con Margaret. Cuando salía de la ducha, mi hija ya estaba vestidita jugando con la niñera. A la hora de comer, no me dejaba darle su comidita, decía que ella se encargaba. Por las tardes la acunaba junto al peluche de un gato, ni siquiera era su favorito de Amanda. Cuando intentaba cambiarlo decía que ahora ese era su favorito. Me daba cuenta de que Amanda estaba despierta cuando la veía hacer cualquier cosa con Margaret. Y cuando intentaba estar con mi hija, Margaret solo respondía “No señora Lautner, disfrute de sus vacaciones mientras yo cuido a Amanda”, luego se marchaba con mi hija a otra habitación.

“Solo otra semana y media, solo una semana y media” me repetía.

Arelia y Lena me preguntaban por qué soportaba esto y la respuesta era sencilla, no podía despedirla, el contrato ponía que solo mi marido podría hacerlo y solo pensaba en que en una semana y media eso ocurriría.

…

“¿Para qué?” me pregunté una semana después de despertar.

¿Para qué despertar por las mañanas?

¿Para qué levantarme de la cama?

¿Para qué quitarme el pijama?

¿Para qué deambular todo el día por la casa?

Me pasé toda la semana tirada en la cama, me despertaba por las mañanas y Lena me traía el desayuno, al acabar me iba al baño, me duchaba y de nuevo a la cama. Como mucho me ponía música en el ordenador, pero todas las canciones eran tristes. Comía, cenaba y a dormir.

Sin ganas de hacer nada, sin ganas de vivir, ¿para qué si no servía para nada?

**Narra Taylor**

Llevaba 3 semanas fuera de casa. Me había olvidado el móvil y cuando llamé a Noemí desde el móvil de un amigo para advertirla me dijo que no pasaba nada, que por tres semanas no comprara otro, así el reencuentro sería más bonito y romántico.

Llegué a LA a las 12:00 pm y  tras coger las maletas fui directo a casa. Estaba deseando ver a mi mujer y a mi hija.

En cuanto llegué dejé las maletas y sin mirar nada más fui directo a la cocina, era hora de comer.

-¡Amanda!-exclamé al entrar y le di un fuerte abrazo.

-¡Aaii!-exclamó ella envolviendo sus bracitos alrededor de mi cuello.

-¿Qué tal mi niña?

-Iiee-contestó ella.

-¿Dónde esta Noemí?-le pregunté s Arelia manteniendo a mi hija en brazos.