Amor verdadero. (Taylor Lautner)

Capítulo 76: Adiós.

A los pocos minutos Taylor volvió serio.

-¿Quién era amor? ¿Qué pasa?-pregunté al verle la cara.

-¿Recuerdas que te dije que ya había encontrado una película en la que trabajar?

-Sí, empiezas el 5 de septiembre. Por eso iremos a LA el día 3.

-Cambio de planes-susurró.

-¿Cambio de planes?-pregunté estupefacta.

-La película empieza el 2 de septiembre.

-Pero entonces, ¿tendremos que irnos el 1?

-No, no cancelaremos el cumpleaños de nuestra hija.

-¿Y cuándo debemos irnos entonces?

-Para que todo vaya bien tenemos que irnos …mañana.

-¿¡Mañana!?-grité.

Toda la gente que había a nuestro alrededor se giraron hacia nosotros.

-Sht, amor nos van a pillar-me susurró mientras nos alejábamos de ese lugar.

-No podemos irnos mañana, es muy precipitado. Amanda tiene que despedirse sus abuelos y amigos, igual que nosotros.

-Debemos irnos mañana. Son las 17:30 quedemos con todos en una hora para despedirnos.

-No sé si podrán venir todos Taylor, deben de tener sus planes ya hechos-comenté desanimada.

-Pruébalo, por intentarlo no pierdes nada-me animó.

-Está bien-cogí el móvil.

-Dejemos esto y vamos a casa, ya compraremos las cosas en LA.

-Vale-dije marcando el primer número.

Ya estábamos en el coche, estábamos llegando a nuestro destino.

-Te dije que nadie podría venir, Taylor-le comente desanimada-nos vamos mañana y no podemos despedirnos de nadie-una lágrima calló solitaria por mi mejilla.

-No digas eso-me reprochó serio-Liam y Sophia sí podían quedar.

-Un amigo y una chica que conocí hace dos días-reí sin ganas-¡qué planazo! Ni mis padres pudieron venir.

-No estés así, mira el lado positivo.

-¿¡Qué lado positivo!? Mañana nos vamos a LA y no me puedo despedir de mis familiares y amigos de Mallorca, a saber cuándo los vuelvo a ver-agaché la cabeza.

-Al menos te despedirás de uno-intentó sonreír, pero no le salió muy creíble.

-Sí, al menos uno-dije mirando hacia la ventana.

Estaba tan absorta en mis pensamientos que no me percaté de donde íbamos hasta que Taylor aparcó.

-¿Dónde estamos?

-Liam me pidió que viniéramos nosotros, le iba mal venir sin coche.

-¿Cómo sin coche?

-Ayer lo llevó a arreglar, no sé qué le debe pasar.

-Bueno-me encogí de hombros-vamos-salí por la puerta.

Cogí a Amanda mientras Taylor cogí el cochecito y tras sentar a nuestra hija en él, nos dirigimos a la puerta.

¡Ding, dong!

Nadie contestó.

¡Ding, dong!

Nadie.

¡Ding, dong!

Nada.

-¡Perfecto, ahora Liam y Sophia tampoco están!-grité desesperada.

-Tal vez estén en el jardín trasero y no nos han oído-se esperanzó mi marido.

-Por probar-me encogí de hombros de nuevo.

Fuimos hasta la parte trasera.

-¡Sorpresa!-gritaron TODOS.

-¡Madre mía!-exclamé si poder creérmelo.

Los abracé a todos.

-¡Creíais que os íbamos a dejar marchar sin despedirnos!-exclamó mi  madre.

-¡Y además así aprovechamos para celebrar el primer cumpleaños adelantado de Amanda!-añadió Harry.

 Taylor y yo reímos, no nos podíamos creer lo que en tan poco tiempo habían hecho por nosotros. Amanda nos miraba animada.

-¡Qué empiece la fiesta!-reí.

-¡Vamos!-exclamó Taylor mientras Louis ponía la música.

Como en todas nuestras fiestas bailamos y picoteamos. Amanda estuvo jugando con los diferentes invitados de la fiesta en una zona que Liam preparó especialmente para ella.

…

-¿Te lo pasas bien mi vida?-le pregunté tras una hora de fiesta.

-¡Iiii!-exclamó-Aayy ee iieeiioo-explicó.

Reí.

-No sabes cuánto me alegro.

-¿Qué ha dicho?-intervino Patri.

-Harry es divertido-expliqué riendo.

Harry rió.

-Vaya, a este paso seré un gran padre.

-¿¡Pero qué dices!?-se asustó Patri.

-En el futuro, cariño-la besó.

-Vamos a bailar-intervino una voz a mis espaldas mientras me abrazaba y me besaba la mejilla.

-Que os lo paséis bien-les dije mientras me iba con Taylor a bailar.

…

Bailar, picotear, bromear, hablar, vigilar a Amanda…A las 23:30 pm decidimos irnos tras haber pasado un día fantástico. Teníamos que preparar las maletas y dormir un poco, el avión salía a las 6:00 am.

-Llegó la de marchar-comuniqué apenada.

-Vamos Amanda-dijo Taylor cogiéndola en brazos.

-¡Os echaremos mucho de menos chicos!-corearon todos.

-¡Y nosotros a vosotros!-exclamamos Taylor y yo.

Tras un duradero abrazo en grupo nos fuimos. Manda se quedó dormida en el coche. Llegamos a casa a la media hora.

Tres horas después todo estaba listo.

-Estas cajas se las daremos a mis padres, que se la lleven a Algaida-dije poniendo las  maletas y cajas en la entrada.

-Le di unas llaves de casa a tus padres en la fiesta y como la casa está a su nombre en cuanto nos vayamos la podrán poner en alquiler-me explicó Taylor.

-Eso les ayudará un poco económicamente-sonreí-¿Qué hora es?

-Las 3:30.

-¿Tenemos los pasaportes?

-En tu bolso amor.

-Está bien, tenemos una horita para dormir. Amor no sé tú, yo me voy a la cama-dije dirigiéndome hacia la habitación.

-Pondré la alarma-rió él y se sentó en la cama mientras así lo hacía.

Se tumbó en la cama junto a mí y abrazados nos quedamos dormidos.