Capítulo 67: Se siente.

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Me desperté y miré el reloj, eran las 18:00 am, me había dormido durante dos horas.

Sentí que alguien estaba a mi lado, me giré y al hacerlo vi a mi espectacular esposa con ese vestido que tanto me había gustado ligeramente levantado. Su cara reflejaba paz y tranquilidad, así estaba preciosa.

Jugué con su pelo mientras la veía dormir. A los pocos minutos vi que empezaba a abrir los ojos y en ese momento empecé a besarle el cuello.

Ella rió.

-¿Qué haces amor?

-Agradecerte la sorpresa-sonreí.

-¿También se lo agradecerás a tu hija?

-Claro, pero a ella de otra manera y en otro momento. Primero tú-la besé con toda esa pasión que delante de nuestra hija había guardado para esta ocasión.

Estaba a punto de bajar la cremallera del vestido cuando oímos los llantos de nuestra hija.

-Amanda, nos llama-dijo Noemí con voz entrecortada.

-Lo dejamos para luego, no lo olvides-sonreí.

Ambos nos levantamos de la cama. Noemí me miró y empezó a reírse.

-¿Qué pasa?-me miré.

-No pretenderás ir a ver a tu hija con eso así-rió señalando el problema-deja que vaya yo, tú la próxima-sonrió-te excitas demasiado rápido mi amor-rió mientras se marchaba.

Vi como salía del cuarto para dirigirse a la de Amanda mientras me dejaba sola ante el “problema”.

**Narra Noemí**

Dejando a mi marido con sus asuntos, fui a la habitación de mi hija para apaciguar sus llantos.

-¿Has despertado cariño?-le pregunté cogiéndola en brazos.

La acuné y sus llantos se fueron dispersando.

-¿Vamos al comedor a jugar?

-Iii-sonrió.

Una vez en el comedor me senté en la alfombra junto a ella para jugar.

-¡Solucionado!-exclamó entrando por la puerta.

-¿Cómo lo has hecho?-pregunté riendo.

-No quieras saberlo-rió él también y se sentó en la alfombra con nosotras.

Esta vez jugamos con la pelotita durante una horita hasta las 19:45 pm, que fui a preparar la cena.

A las 20:05 pm, la comida ya estaba lista.

-¡A cenar!-grité.

Llegaron a los segundos de haberlos llamado.

Al acabar de cenar fuimos al comedor a ver la televisión mientras jugábamos con nuestro bebé.

Amanda bostezó.

-Llego la hora de irse a dormir para ti tesoro-sonrió Taylor.

-Te espero en la habitación amor-le guiñé un ojo-buenas noches princesa-me acerqué a ella y le besé la frente.

-Amanda, vamos-dijo Taylor levantándose rápidamente con Amanda en brazos.

Llegué al cuarto y me quité el vestido, en su lugar me coloqué el corpiño de encaje rojo que Ashley me regaló meses atrás.

Oí a mi marido entrar en la habitación.

-¡Noemí, mi vida!-me llamó.

-Aquí-contesté cerrando las puertas de armario y colocándome de una manera un poco… ¿Cómo decirlo?... ¿Sensual?

-¡Waw!-exclamó quitándose la camisa.

Sonreí.

-¿Te gusta?

-Acércate y te enseñaré como me gusta-contestó quitándose los pantalones.

Me acerqué a él a paso ligero y sin darle tiempo a nada busqué sus labios y los besé con pasión.

-Te amo-susurré mientras entre beso y beso nos dirigíamos a la cama.

-Yo más-susurró él y ambos caímos en la cama.

Amor verdadero. (Taylor Lautner)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora