Amor verdadero. (Taylor Lautner)

Capítulo 78: Mi nueva casa.

Con mi tesoro en brazos, me dirigí a la puerta principal.

-Noemí, por ahí no. Nosotros entramos por la puerta lateral-me explicó Taylor.

-¿Puerta lateral?-pregunté mientras le seguía.

Ahora lo entendía, unas escaleras que llevaban a una puerta que nos dejaba directamente en la segunda planta.

Subimos las escaleras y después de que Taylor abriera la puerta, entramos.

Dejé las maletas a un lado mientras observaba mi nuevo hogar.

Había dos habitaciones, un vestidor, dos baños, un saloncito con la TV y el ordenador, un pequeño gimnasio y por último un saloncito con los juguetes de Amanda.

-¡Wow!-exclamé-La casa es chulísima.

-¿Te gusta? Todavía quedan algunos muebles, pero…

-Me encanta Taylor-le corté-aunque le falta algo.

-Los muebles.

-No-reí-la cocina.

Taylor también rió.

-¿No se lo has dicho?-intervino Jackson.

-¿Decirme qué?

-La casa es de dos pisos. En el primero viven Arelia, la ama de casa; Margarte, la niñera de Amanda y Lena, la cocinera.

-Espera, espera, espera-dije pensando en lo que acababa de oír-¿Niñera de Amanda?

-Bueno, dejaste la universidad cuando tuviste a Amanda, así que cada día vendrá un profesor a darte clases en la primera planta y Margaret se encargará de vigilar a Amanda en ese momento o te ayudará en algún momento o cuando quieras salir con tu espectacular marido-explicó Taylor y sonrió.

Reí.

-Ahora lo entiendo. Finalmente has contratado servicio.

-La casa es más grande amor y eres la esposa de un actor-me besó el cuello.

Reí.

-No estoy enfadada Taylor, sólo confirmaba.

-Bueno, yo me tengo que ir yendo-dijo Jackson-en cuanto la casa esté acabada nos llamáis y vemos como ha quedado, ¿vale?-sonrió-adiós.

-Adiós Taylor-nos despedimos nosotros.

-Iioo-se despidió Amanda.

Jackson se fue y cerró la puerta tras de sí.

-Vamos a colocar lo de las maletas-fui hacia donde las había dejado.

-Amor, ¿estás enfadada?

-No, sólo debo llamar luego a Louis.

Abrí la primera maleta contenía algunos de mis conjuntos. Los coloqué en el vestidor.

La segunda contenía mi neceser y algunas de las cosas de las que no quise  separarme. Los coloqué en su nuevo lugar.

Taylor colocó el contenido de sus maletas en sus respectivos lugares.

La verdad es que habíamos traído poca cosa.

Entre mi marido y yo colocamos las cosas de Amanda y tras acabar bajamos a saludar al servicio.

Fuimos hasta la entrada principal y tocamos el timbre. Enseguida abrieron.

-¡Señor y señora Lautner, ya han llegado!-exclamó Arelia-y tú debes de ser Amanda-añadió cogiendo la mano de mi bebé.-Arelia, seré vuestra ama de casa.

Sonreí.

-Encantada Arelia.

-Yo soy Lena-dijo una voz tras ella-vuestra cocinera.

-Encantada Lena.

-Y yo Margaret-añadió otra voz tras ellas dos-la niñera.

-Encantada…-me interrumpí a mí misma.

Ese rostro no era reconocido y no tenía nada malo, pero me trajo malas vibraciones. Debía dejar las tontería de mi intuición, parecía buena en su trabajo.

Hice como si tosiera.

-Encantada Margaret.

Hablamos durante un tiempo de como irían las cosas y después fuimos a la cocina.

-Preparé la comida. Pensé que querrían comer algo ligero-nos informó Lena. Sonreí.

-Siéntense, yo pondré la mesa-continuó Arelia.

-No tienes porque-empecé a ir hacia el cajón.

-Sht amor, es su trabajo-me cogió por detrás.

-Claro-sonreí.

-Vamos siéntate-dijo él ofreciéndome una silla.

-Gracias-le agradecí sentándose.

Taylor se sentó delante de mí, Amanda a mi lado, mientras las chicas colocaban las cosas. Comimos y al acabar me percaté de que había dos puertas.

-Taylor, las puertas ¿dónde llevan?

- Por la que se acaban de ir Arelia y Lena es la puerta de la primera planta y la otra lleva a unas esaleras hacia la segunda,

-Y por eso ambas están con llave.

-Todos necesitamos privacidad-rió.

-Claro.

-Ésta tarde podríamos ir a dar una vuelta-propuso Taylor-así buecamos los últimos muebles.

-Me encanta el plan, pero algo seguro-sonreí mirando la pared de nuestro cuarto.

-¿Qué es seguro?

-En esa pared quiero poner un retrato de nosotros tres juntos-los abracé.

-Me parece perfecto.