¿Cuál es tu sueño?

La verdad

- Bueno pequeño D, mañana haremos los deberes de inglés, y pasado estudiaremos para el examen de geografía puesto que no sabes ni ubicar el estado en el que vives en el mapa - fingí que había venido a ver a Dylan para repasar el plan de estudio de la semana, ante la mirada desconcertada del niño.

- Summer - repitió Daniel esta vez en tono afirmativo - sube, tenemos que hablar.

- Estás loco si crees que voy a subir a tu habitación cuando tienes a otra chica en tu cama - intenté que no se me notaran los celos pero no tuve éxito.

Entonces una voz que vino del piso de arriba me sorprendió, y no era de chica.

- Yo ya me iba - dijo mi buen amigo Alex bajando las escaleras y riendo - Y sí, se te ha notado a varios kilómetros de distancia - me confirmó susurrándome al oído cuando pasó por mi lado.

Daniel me miraba intentando esconder la risa que le había provocado mi equivocación. En mi defensa diré que nunca había visto a Alex en casa de los Miller y que, en cambio, había visto varias chicas bajar esas escaleras.

Subí las escaleras bajando la cabeza en cuanto pasé por delante de Daniel. No era suficiente el numerito que hice la noche anterior, tenía que seguir metiendo la pata. Me había puesto celosa de una supuesta chica que resultó ser mi mejor amigo, después de una semana evitando al chico al que dejé plantado en su habitación después de una discusión sobre el futuro que acabó con la relación más real que he tenido. Todo iba genial, nótese la ironía.

- Vale. Déjame a mi primera - empecé a hablar en cuanto entramos a la habitación.

Si os soy sincera, esperaba con todas mis fuerzas que me interrumpiera y no tener que explicar avergonzada, punto por punto, todo lo que había hecho mal. Pero él no lo hizo, se quedó ahí parado, mirándome, con los brazos cruzados esperando a que hablara, así que cogí aire y seguí:

- En primer lugar, Alex nunca ha estado aquí y digamos que no eres de los que duermen solos, así que mi equivocación es totalmente comprensible y justificada.

- ¿Has venido a pedir perdón o a justificarte? Porque estoy totalmente abierto a la primer pero la segunda...

Realmente había ido a pedir perdón pero el hecho de que él tuviera tan claro que yo tenía motivos por los que disculparme hizo cambiar totalmente el rumbo de mi discurso. 

- ¿Pedir perdón? - mi voz sonó más aguda de lo normal - No tengo que pedirte perdón por confundirme cuando no sería la primera vez que te encuentro con una chica después de besarnos.

- Genial Summer - su voz, al contrario de la mía, sonaba grave - Has venido a echarme en cara cosas del pasado. Pues bien, no fui yo el que te dejó de la noche a la mañana por una estúpida discusión sobre un futuro que ni tú ni yo sabemos como va a ser, no fui yo el que te evitó durante una semana entera dando por finalizado lo que sea que fuera lo nuestro, y no fui yo el que después de eso te gritó a la cara que eras una cretina y luego te besó, borracho perdido.

- No fui yo la que se apartó.

Nos quedamos mirando unos instantes, sin darnos cuenta de que nos habíamos acercado enfadados el uno al otro con cada frase que salía de nuestros labios, estábamos muy cerca, aguantándonos la mirada como si fuera un estúpido duelo de a ver quien aguantaba más. Y gané, aunque hubiera preferido no hacerlo, aunque hubiera preferido que Daniel no retirara esos ojos verdes de los míos, aunque no me sentí vencedora. Me dio la espalda y se despeinó con ambas manos, como solía hacer cuando estaba nervioso o cabreado y no sabía como decir todo lo que quería decir.