Novia fugitiva

Tu Me Sanas

16 de Julio 2017

New York

Lauren

Dinah se sorprendió cuando llegamos juntas. A la vez intentaba descifrar lo que Camila quería contarle, mi presencia no hacía falta ahí.

-Yo me tengo que ir. Dije con un tono apenas audible. Camila había entrado ya sin despedirse y solo Dinah se espero a que yo hablara.

-¿Pero que paso? Ambas parecen como si hubieran robado el banco más grande la ciudad. Me encogí de hombros y decidí irme. Era obvio que mi actitud indiferente no salía a la perfección.

-Ya hablaremos tu y yo, Lauren.
Me alejé con mi corazón en un puño. Sabía que todo lo de una noche podría terminar peor que esto. Lo sabía pero aún así me arriesgue a dejar que todo pasará.

Camila

-Vaya, que suspiró tan lindo cariño. Dinah me hizo sobre saltar en la cama. Había entrado a la habitación sin avisar y mientras yo pensaba en Lauren. -¿Porque no me cuentas que paso con Lauren? ¿Y por que mierda no me avisaste donde estabas?
Comenzó a gritarme. Por dios me había perdido por completo de ella por una noche completa, aun cuando mis padres hablaban cada noche para asegurarse de que seguía viva.

-Nada, quiero dormir.

-No, nada de eso, tu y yo debemos hablar sobre esto que te pasa Camila.

No recordaba gran cosa que es lo que le iba a contar a Dinah. Podría soportar el hecho de acostarme con alguien mas pero que fuera Lauren acababa conmigo,  con mi único sentido de supervivencia. Tenia demasiado miedo de sentir algo más por alguien.  Me creía muerta pero luego volvieron esos ojos verdes.  Rodé los ojos por pensar eso y a Dinah la hice reír.

-Dios mio.  Dinah se cubrió la boca.  Sabia lo que había pasado por que juraba que estaba haciendo la misma cara que las otras veces. -  Por supuesto se acostaron otra vez. 
Era tan predecible.  -Oye esta bien Mila,  piénsalo un poco puedes usar a Lauren como consuelo y acostarte con ella.  Volví a rodar los ojos y me acomode de frente para encararla. 

-Yo no quiero hacer eso Dinah,  tengo demasiadas cosas tristes en mi cabeza como para pensar en tener sexo con alguien. 
Lauren no era mi mejor opción solo acabaría con la poca cordura que me quedaba. 

-Pero es Lauren,  venga niegalo pero ambas sabemos que la amas.  Mi rostro se descompuso talvez y Dinah corrigió.  - O mejor dicho la amaste,  cuando no eras esta ogra sin sentimientos,  te dire Jenni de hoy en adelante.

-¿Porqué Jenni?

-Por la chica rubia de Forrest Gump,  vas a ser una chica fácil sin sentimientos por un tiempo. 
Su comparación no era agradable por que me hacia recordar que ella al menos tenia un hijo a quien...  Basta,  sacudi mi cabeza.

-Dinah,  sabes que no es eso y me desconcierta un poco que tu me digas estas cosas,  es decir,  lo de acostarme con Lauren ayer fue un error se lo digo a ella y te lo digo a ti,  estaba ebria y un poco perdida,  no cuenta y prefiero no hablar mas de esto.  Termine en un susurro y volví a acostarme sin mucho ánimo,  tenia mas cosas por las cuales atormentar mi mente. 

-Amiga mira lo que ha pasado con solo un rapidito con Lauren,  estas hablando conmigo por fin,  diablos hace días ni siquiera hablabas,  solo dormías e ibas al baño,  ahora incluso discutes conmigo. 

-Basta,  dejame sola.  Bufo mal humorada y salio con quejas de la habitación. Ahora tendría más tiempo para perderme.  Cerré los ojos y fue peor.  Sentía el cuerpo pesado y su respiración en mi oído,  luego sus dedos en mi costado.  Lo estaba reviviendo, también recordé su advertencia una vez más, Lauren también se había sorprendido.  Poco a poco recordé cada detalle de la noche,  cosa que era borrosa cuando desperté a su lado y corrí al baño para vomitar.  Ahora podía ver sus ojos traspasar los míos y succionar alguna parte de mi mente.  Estaba ahí aunque luchara por no tenerla. 

Me quedé dormida. Soñaba era tranquilo y no me sentía cansada ni triste. Alguien sostenía mi mano.  Alguien me veía dormir en ese sitio.  Sabia que eran sus ojos,  susurraba cosas tiernas en mi oído y me hacía sonreír en el sueño.  Dios.  Me sentía en paz como si flotara.  Minutos después alguien abrió la puerta de golpe.  Era el. Ni siquiera estaba consciente del sitio en el que Lauren me acariciaba.
Estaba en un hospital,  no otra vez.  Me tense.  El ya la había visto.  Se acercó con un humor pesado y ambos se miraron fijamente cómo si quisieran matarse uno al otro.  Mi respiración se hizo rápida y comencé a sudar.  Dios no.  Había gritos y llanto ahora.  Tenia dolor y parecía que nadie lo veía,  solo yo.  Ni el médico ni la enfermera que lo ayudaba.  Estaban ahí sin saber la clase de golpe para mi. 
-Señora,  necesito que usted se esfuerce un poco y me deje trabajar.  Asenti.  La angustia era peor pero podía fingir no estar tan triste.   Podía sentir que algo sacaban de mi.  Mas bien a alguien.  Mi bebe.  Solloce.  No podía soportarlo.  Por fin alguien tomó mi mano,  cuando estaba a punto de colapsar. 

-Camz,  tranquila corazón,  estoy aquí contigo.  Beso el dorso de mi mano y el dolor no fue igual.  Ella estaba comigo. 
Mi sueño se volvió aun mas oscuro.  El estaba de nuevo a mi lado y arranco mi mano de la de Lauren.  Yo lloré.  Estaba desesperada por sostenerla otra vez pero ella ya no estaba,  solo mire la imagen de el llevándose algo en las manos.  Grite,  llore pero no podía moverme.  Se estaba llevando a mi bebé.  Dios.  No estaba vivo.  Y yo tampoco. Seguí llorando hasta que desperté. 
La cama estaba húmeda y mis manos dolían de sostener la sábana con fuerza.  Estaba soñando lo mismo. 
Me senté en la cama.  Era de noche y ahora Dinah no estaba conmigo.  Siempre la despertaba y ella se obligaba a dormir a mi lado.  Limpié mis mejillas.  No soportaba sentirme así.  Quería abrazar algo para reconfortarme pero no estaba nadie. 
Lentamente retrocedi hasta el respaldo de la cama y me recargue.  No podría dormir otra vez. 
Suspire,  ayer había sido la mejor noche que había pasado en las últimas semanas,  Lauren definitivamente influía en mi y quería que.....

Últimamente he analizado tanto la posible relación existente entre Camila y Lauren y pues nada sigo igual.  Camren is real baby.