Novia fugitiva

Quiero vivir contigo

20 de Agosto 2017
New York

Lauren

-¿Te puedo decir algo?
Pregunté una vez entró al auto.

-Si, adelante. Su sonrisa no dejaba de mostrarse y eso me desconcertó un poco.

-Estas realmente hermosa y radiante hoy cariño. Sus mejillas brillaron del color típico. Dios, dudaba que algo podría ser más lindo. Mientras conducía lejos del estacionamiento ella me miró de forma intuitiva, aun sin contestar.

-Pero si tienes la respuesta Lauren. Reí sin poder contenerlo. La verdad es que ambas estábamos de un excelente humor.

-Ok, si tanto insistes...yo quiero ir contigo a donde quieras, tenemos un mes juntas Lolo, eso me hace sentir muy bien. Le guiñé, era tan fácil jugar con ella.
Mis manos no se detuvieron y solté el volante con una para tocar su pierna. Necesitaba su contacto.
En el último mes había pasado de todo, es decir, en el buen sentido. Camila había aceptado ir a terapia, era su quinta sesión mañana y ella parecía mejorar cada día, sonreía y hablaba con todos. Parlante como siempre. Yo solo podía mirarla por horas y ser feliz. También habíamos tenido alguna peleas por tonterías, por ejemplo en una noche ella se negaba a aceptar que había despertado por una pesadilla, yo la presioné hasta que soltó un par de palabras hirientes. Salí del departamento de Dinah y dos horas después regresé. Ella me había llamado llorando y bastante arrepentida de tratarme mal. Yo no pude evitar volver y besarla hasta que se quedó nuevamente dormida. También tuvimos que lidiar con las llamadas insistentes de sus padres por venir a NY, el problema es que sentía que Camz no estaba preparada para decirles que estaba conmigo, una mujer, su ex esposa y la razón por la que quiso romper con aquel tipo.
Dinah no dejaba de quejarse de mi presencia en el departamento y yo seguía pidiendo a Camz vivir conmigo pero también se negaba a vivir con Jade, la entendía así que en este momento estaba a punto de darle una gran sorpresa.

-¿A donde vas? Preguntó después de que me desvíe por la avenida.

-A donde quiera, tu me dijiste que ibas. Me encogí de hombros y ella sonrió de lado. Me estacioné sobre una acera, sobre una calle calmada y llena de casas llamativas y bien cuidadas. Algo clásicas para mi gusto, estaba acostumbrada más a vivir en una torre de departamentos elegantes. Pero conocía a Camila y amaba más este tipo de lugares.

-Venga baja conmigo, debo saludar a alguien.
Una vez las dos afuera, tomé su mano y nos guié a una casa muy linda, dos plantas y un jardín en frente, con un árbol realmente verde.

-Es lindo aquí ¿Quien vive? No contesté y ella gruñó sin entender.
Llegamos a la puerta y esta vez la miré.

-Esta casa ¿Te gusta? Me miró raro y después asintió. -Pues que bueno, por que la acabo de comprar. Sonreí y ella me siguió.

-¿Hablas en serio?

-Si, es mía y si quieres también tuya, ya no viviré con Jade, tu sabes para evitar que tu mueras de celos uno de estos días. Le guiñé. Su sonrisa se hizo más amplia hasta que saltó a mi para abrazarme.

-Lolo, no tienes idea de lo feliz que estoy ahora. Me dió dos picos en los labios y algo ansiosa me pidió abrir. Entramos. Un olor bastante bueno nos recibió en la estancia, muebles de madera y decoración de diferentes colores. Le encantó. Miró el lugar para colgar las llaves y las colocó de prisa. Dió varios pasos. La sala, un comedor y la salida al patio. Las escaleras seguían un costado de la casa. Era bastante amplió.

-¿Tu compraste los muebles? Preguntó entusiasmada.

-A si, pero alguien más los eligió y antes que rompas tu cabeza pensado cosas demás, fue Dinah, apostó a que te encantarían.
Durante unos minutos soltó mi mano para recorrer toda la casa. Yo me quede en la sala para esperar. Ella necesitaba su espacio para analizar cada rincón. Finalmente me encontró, yo contestaba un mensaje a Dinah sobre como se había tomado la sorpresa. Llegó hasta mi lugar y se agachó a donde estaba sentada. Me dió un beso tras otro, se sentó sobre mis piernas.

-Me encanta. Soltó con un suspiro.

-¿Quieres vivir conmigo entonces? Pregunté llena de nervios. Me miró fijamente por un buen rato. Sus manos jugaban con mi cabello y yo mientras sostenía su cintura. Sus manos fueron a mis mejillas.

-Quiero vivir contigo, ahora. Sonreí como nunca y ella me hizo besarla otra vez. -Vamos a inaugurar la cama ¿Quieres?
Alguien estaba muy a ansiosa. Para aclarar si algo se había quedado guardado por este mes eran mis ganas de hacer el amor con Camz y hoy iba a ser el día.

Chan chan 😁😏