Cadenas dulces

.13.

—Descuide, es un idiota la mayoría del tiempo pero es la primera vez que descubre esto, ¿le gustaría comer?, prepare bastante— Le dije con amabilidad mientras tomaba el otro plato y comenzaba a servir en el pero la constante mirada de mi maestro sobre mi es bastante incomoda.

Tras unos minutos en silencio y después de haber llevado los platos al comedor al igual que las bebidas la voz de mi maestro se hizo presente al sentarnos uno frente al otro en la mesa.

—...Esta no es la primera vez que pasas por algo como esto...— Me dijo con tanta seguridad que no pude negarlo rápidamente y aquello mi maestro lo aprovecho para confirmar sus sospechas.

—Te niegas a decir quién te hizo eso y es obvio por tu aspecto que te obliga pero...no entiendo porque defiendes a un monstruo como el— Me dijo mirándome atentamente, el realmente cree que guardo silencio a favor de ese desgraciado.

—Defender a quien tan pronto veo me hace helar la sangre, a quien con solo escucharlo mi cuerpo se tensa y quien al tocarme me produce asco,...a quien le divierte recordarme que no soy nada porque no estoy verdaderamente ligada a alguien...sin embargo él no sabe la verdad, él puede humillarme, violarme y golpearme hasta cansarse pero no hay manera en que permita que lo lastime a el— Le dije con determinación, podría no ser la persona más lista del salón y lose pero hongbin no podrá vencerme.

El maestro taekwoon quedo bastante asombrado por mis palabras que únicamente seguía mirándome sin decir nada mientras que yo probaba mi deliciosa comida.

—Ravi,...estas asiendo todo esto...para protegerlo a el...— Me dijo atento a mi reacción pero yo simplemente me encogí de hombros sin mucho importancia mientras comía.

—Lo siento...no soy quien para entrometerme entre ustedes— Con esa voz suave pronuncio tales palabras que me hizo atragantarme un poco con la comida ya que incluso se puso de pie y a paso firme se dirigió a la puerta.

Ni si quiera lo pensé, solo me puse de pie tan rápido que incluso tire la silla mientras corría detrás de mi maestro y una vez que lo alcance ya se encontraba a punto de tomar la perilla de la puerta pero mi mano fue más rápida ya que lo sujete de la muñeca asiendo que se detuviera y volteara a verme.

—A él le gustas y sé que esta situación es rara pero si la aceptas...el sin duda no te dejara ir, es un idiota, si pero es el mejor idiota de todos así que no te rindas tan rápido...— Le dije sin soltarlo por temor a que se fuera de la casa.

—...Pero no puedo compararme a ustedes dos— Me dijo con tristeza.

—Nos conocimos antes pero eso no quiere decir que no le importas, ustedes dos tienen poco mas de un año desde que se conocen, ¿el te ha hablado de su trabajo?— Le pregunte eso solo para demostrarle que Ravi tiene un genuino interés en el.

Ante mi pregunta mi maestro asentó con la cabeza. —El jamás habla de ello con nadie, le molesta, conmigo jamás toca el tema por el mismo,...sé que no soy quien para pedirle que se acueste con el mismo tipo que se acuesta conmigo y para muchos esto sería jodidamente raro pero si los tres estamos bien con ello...realmente no hay un problema— Le propuse finalmente algo que jamás pensé hacer en mi vida...proponerle a mi maestro que se deje follar con el tipo que me acuesto...joder sí que soy rara.