DEPRESSED

VACILACIÓN

Todo iba excelente con JiMin, habían pasado ya 10 meses desde que salíamos, aunque él no parecía quererse comprometer como mi pareja. Pero aún así yo estaba feliz de estar a su lado. Seguíamos teniendo encuentros sexuales solo para él, aunque para mi era hacerle el amor cada vez que lo tocaba. 

Al parecer realmente el problema todo este tiempo había sido yo. La verdad es que no conseguía mi dinero de una manera correcta ni legal, pero eso no importaba. Había cambiado mi forma de vestir a algo un poco más refinado para hacer buena pareja con el menor.

Había dejado malos hábitos, aún seguía fumando pero solo tabaco, ya no me drogaba y no veía más a Taehyung ni Hoseok. A pesar de que a mi me gustaba ser sarcástico y frío tal y como era mi verdadero yo también tuve que dejarlo por JiMin.

Él me cambió en todos los aspectos, o más bien yo cambié por él. Ya no era mas que un remedo de lo que fui algún día, era alguien simplemente irreconocible, pero estaba seguro de que todo cambio estando a su lado sería para bien.

Por fin tenía dinero suficiente ahorrado para poder costear al menos un pequeño apartamento al cual poder mudarme con Jiminnie. Estaba extremadamente feliz de que por fin iba a tenerlo conmigo todo el día, todos los días de mi vida. Así que lo invité a pasear para darle la noticia.

— Hyung... ¿Que pasa? Me dejaste intrigado por teléfono ¿Cual es esa noticia que quieres darme tan ansiosamente? — Me dijo mientras comía su helado de vainilla. —

— Por fin lo tengo Jiminnie. Tengo el dinero para que nos mudemos juntos. — Dije sumamente emocionado. —

— Pero... yo creí que esto tomaría un poco más... no lo sé... esto es muy rápido. — Mi mueca de emoción se apago al ver la reacción del menor. —

— Escucha Jiminnie, sé que no llevamos tanto tiempo, pero sabes lo mucho que te amo... por favor. No sabes el enorme esfuerzo que he tenido que hacer para conseguir este dinero. Lo he hecho solo por nosotros amor, porque quiero que estemos juntos. 

— Es que... no lo sé hyung, no sé si estoy preparado para una relación así de seria.

— Mierda JiMin — Exploté. — ¿Acaso no te he demostrado lo mucho que te amo? ¿Porque dudar más? He hecho todo lo que me has pedido, he dejado todo por ti. ¿Que más necesitas? Dímelo mierda... porque yo ya no sé que más hacer. —

— No me hables así, además tu has dejado todo por tu propia voluntad, no te atrevas a decirme que yo te he obligado. 

— Jiminnie... — Respiré profundo — Por favor amor ya tengo el departamento y algunos muebles. Quería darte la sorpresa. No me puedes hacer esto ahora. —

— Ni siquiera somos novios formales aún y tú vienes y me dices que ya tienes un apartamento. ¿En algún momento me preguntaste si estaba bien que lo rentaras? Ni siquiera tomas en cuenta mi opinión y ahora resulta que el malo soy yo. No lo sé YoonGi, no sé si quiero vivir contigo aún.

— JiMin este es mi sueño, estar por siempre a tu lado. Por favor solo intentémoslo un mes ¿va? si en un mes tú sientes que no funciona eres libre de irte.

— Pero... estando juntos, con el dinero que tendrás que pagar del alquiler tal vez no te alcanze y yo tendré que trabajar. Sabes que aún estoy estudiando y mis padres pagan mi educación. No dejaré la escuela para conseguir un trabajito cualquiera. Yo si quiero ser alguien en la vida, no quiero terminar como tú.

— No Jiminnie, te juro que yo te daré todo lo que necesites, techo, comida, estudios, amor. No te va a faltar nada estando a mi lado. Solo por favor acepta y múdate conmigo.

— Esta bien... — Dijo el menor aún no muy convencido. — Pero si en un mes las cosas no van bien me largo. —

A pesar de que las cosas no habían salido exactamente como las había planeado él había aceptado, así que para mi eso era la mayor victoria posible. Por fin podría amanecer al lado de esa tierna carita que tanto amaba.

Ese día cuando llevé a JiMin a casa le dije que fuera empacando todas sus cosas, le dí un beso y me fui feliz a casa. Llegué y me puse a hacer lo mismo. Empecé a tomar y revisar cosa por cosa lo que tenía en mi habitación, decidiendo lo que era útil e inútil.

— YoonGi cariño ¿Que haces? — preguntó mi madre al ver que ponía unas cosas en cajas de cartón. —

— Me voy mamá, me voy a mudar con JiMin. — Al escuchar eso sus ojos se abrieron como platos. —

—¿Pero que dices?... ¿A donde? y lo más importante ¿Con que dinero?

— Conseguí un buen lugar, con mi propio dinero.

— Min YoonGi ¿En que estás metido? Ambos sabemos que tú no trabajas.... Ay dios, de seguro estas metido en algo ilegal ¿verdad?

— Eso no es asunto tuyo, soy un adulto y puedo hacer lo que yo quiera.

— Por favor cariño piensa bien las cosas, puedes acabar muy mal.

— Deja de llamarme cariño, suenas tan hipócrita, tú jamás te has preocupado por mi así que te pido que ahora te alejes de mis asuntos y me dejes en paz. Si no estuviste en el momento en el que más te necesité ahora no te ocupo para nada.

— Lo siento si es que no supe demostrártelo, pero claro que me importas, eres mi hijo. —Dijo derramando algunas lágrimas

— Si claro mamá lo que tú digas. Ahora si no es mucha molestia ¿Podrías salir de mi cuarto? Estoy bastante ocupado con esto. — Contesté secamente. —

Mi madre salió llorando de la habitación, pero era la verdad como dije antes, ya era muy tarde para que sintiera algún tipo de preocupación por mi. Además ahora por fin estaba en el camino correcto, por fin iba a ser feliz con JiMin, con mi Jiminnie, y eso era todo lo que importaba.