Cuando llegué al cuarto me paré en la puerta y busqué con mi mirada el rostro de Taehyung, pero para mi sorpresa y infortunio estaba vacío, no había nadie allí.
Entré y me eché en la cama de Holland, no tenía ánimos ni fuerzas para subir a la mía. Sobre una mesita había una pequeña radio, la encendí solo para no estar en ese silencio que solo me hacía recordar los sonidos de la pequeña bebé llorando y los gritos y cosas rompiéndose que había escuchado en mi recuerdo, o sueño o lo que fuera.
Una canción conocida sonaba en la radio, More than words de extreme, empecé a tarararearla pero sin dejar de pensar en Taehyung, cerré los ojos pero sin quedarme dormido, solo quería descansar mi mente perdiéndome en aquella melodía.
De pronto pude escuchar algunas voces conocidas, abrí mis ojos discretamente sin hacer notar que estaba despierto y miré. Eran Taehyung y Holland que estaban riendo y peligrosamente cercanos.
— ¿Ya viste quién está ahí? — Dijo Holland señalándome. —
— Si ¿y? me da igual. — Contestó Taehyung. Escucharlo decir que yo le daba igual me rompió el corazón, yo que había sido su "Yoonie" ahora le daba igual, eso me dolía en el alma, pero aún así seguí fingiendo dormir. —
— Si como no, de seguro aún lo amas. — Insistió Holland. —
Taehyung no contestó nada y se tumbó en su cama, seguido de Holland que se acurrucó a su lado y lo abrazó. No pude fingir más y abrí los ojos para después sentarme en la cama.
Los miré fijamente y Tae solo agachó la mirada como ignorándome. Holland me sostuvo la mirada y por un momento sentí que iba a explotar, quería golpearlo en ese mismo instante, pero entonces el recuerdo de mis días en aislamiento regresó a mi mente. Odiaba a ese chico, pero odiaba más ese maldito cuarto, así que me detuve.
— Tae... ¿podemos hablar? — Le dije tratando de sonar lo más tranquilo posible. —
— Seguro YoonGi, dime. — Dijo sin mirarme. —
— ¿En privado? — Aclaré mirando feo a Holland. —
— Ahora no quiero salir, mejor solo dilo aquí y ya.
— No es necesario que salgas... Holland podría ser un poco educado e irse a la mierda.
— Este también es su cuarto, no lo creo. Además él es mi amigo, puedes decirme lo que sea, de igual manera se lo contaré.
— ¿Así que ya son amigos? Vaya desaparezco cinco días y regreso a otro mundo completamente distinto.
— No te atrevas, ni siquiera intentes reclamarme nada YoonGi, y si, él es mi amigo. ¿Quién crees que estuvo conmigo en estos cinco días? Para ti no son muchos, pero para mi que tuve que aguantar con el corazón destrozado fue una eternidad. Solo él estuvo a mi lado, apoyándome y secando mis lágrimas mientras tanto ¿en dónde estabas tú? ¿huh? — Chasqueó la lengua. —
— Yo... — Taehyung tenía razón, no tenía el menor derecho de reclamar nada. — Estaba en aislamiento por ser violento. — Dije avergonzado. —
— Oh es cierto además de todo golpeaste a Hobi.
— Él me golpeó primero, yo solo respondí.
— Y él solo me defendía, él es mi amigo y no le gustó nada lo que hiciste con.... — Los ojos de Tae se pusieron vidriosos y me lanzó una mirada de odio. — JiMin. —
— Mierda, Taehyung de verdad lo siento, solo déjame explicarte por favor, las cosas no fueron como tú piensas....
— Bueno ya da igual, al parecer no estábamos destinados a estar juntos. — Dijo interrumpiéndome. — Pero a mi me queda la satisfacción de que no hice nada mal, yo no fallé YoonGi, tú lo hiciste. —
—Tae... yo te amo. — Dije soltando las lágrimas. —
— Y yo a ti, pero no puedo estar atado a alguien que vive de sus recuerdos, es a JiMin a quién necesitas y con quien realmente quieres estar, no conmigo, no te engañes. ¿Crees que no he visto como lo miras? Como si fuera lo más perfecto que existe en el mundo, lo miras como yo te miro a ti. — Tae también soltó unas lágrimas. —
Al ver esto Holland se levantó y salió de la habitación. Yo rápidamente fui hacia Tae y me senté junto a él.
— Por favor, te juro que él me besó, no quise herirte, eso jamás.
— Eso no importa, entiéndelo no es solo por el puto beso, sé que no lo has olvidado, mi vida no ha sido fácil YoonGi, ahora estoy aquí luchando por vencer mis adicciones, no tengo familia, no tengo nada. No quiero complicar más mi vida con alguien que no me ama solo a mi, yo no soy malo, tal vez no he tomado las mejores decisiones en la vida, pero no me merezco esto. ¿Sabes?... esto también es mi culpa, ya que en el fondo siempre supe que seguías enamorado de JiMin, pero estúpidamente pensé que podría hacer que lo olvidaras, que podría enamorarte y de alguna manera tener ese final de película, ese en el que al final dicen "vivieron felices para siempre" pero no es así.
— Lo siento de verdad, nunca quise lastimarte. — No me quedaba nada más que decir, él había acertado en cada palabra que me decía. —
— No importa, aún eres mi amigo ¿no?
— ¿Que? — Dije incrédulo. Después de lo que le había hecho aún quería mi amistad, eso me demostraba lo buena persona que era Tae, lo cual me hizo sentir todavía peor. — S...si. — Dije apenas en un susurro. —
— Bueno hermano. — Hacía tiempo que él no me llamaba así, eso rompía mi corazón, yo no quería ser su hermano, yo quería ser su Yoonie. Pero al parecer había tomado una decisión y no había nada que yo pudiera hacer al respecto. — Vamos a comer que ya es hora y mi panza tiene hambre. — Me sonrió y alborotó mi cabello. —
Nos levantamos de la cama y bajamos al comedor, en donde solo se encontraba Holland, nos sentamos en silencio, aquello era muy incómodo, al menos para mí.
— ¿Y... donde está Sungjae? — Dije para "romper el hielo". —
— Se fue a casa, él ganó el privilegio de subir de nivel en la terapia ocupacional y después recibió el alta de parte del doctor Namjoon. — Contestó Holland. —
— Vaya. — Solté un suspiro. — Me hubiese gustado despedirme de él. —
— Tampoco es que haya dicho mucho, estaba tan feliz que prácticamente solo nos despidió con las manos y se fue. — Añadió Taehyung. —
Al parecer todo era muy diferente ahora y yo tenía que acostumbrarme a eso, tendría que soportar las consecuencias de mis actos, ya que no había vuelta atrás.
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DEPRESSED
FanfictionMis muñecas sangraban, lentamente iba perdiendo la noción del tiempo y espacio. Sentía que mi alma salía por aquellas cortadas, y poco a poco, mi dolor mental fue desapareciendo. Iba a morir, jamás había estado tan feliz antes, sabía que ya no iba a...