CONFESIÓN

172 18 0
                                    

Pasó una semana desde aquella importante decisión que se supone debía tomar, irme del centro o quedarme. Me quedaba una semana más, una semana en la que podría cambiar mi manera de pensar o reafirmar mi elección de largarme de aquel lugar.

Para mí estaba claro, no había nada que pensar pues ya había tomado una decisión, hasta que el doctor Namjoon me llamó de nuevo a su oficina/consultorio para hablar.

Esta vez estaba mucho más tranquilo que la última, así que fui hacia aquel lugar y toqué la puerta de madera un par de veces. Su grave voz me indicó entrar y así lo hice, me senté en aquel diván y lo miré de frente.

— Hola YoonGi.

— Hola doc. ¿Cómo está?

— Vaya, usualmente yo soy el que hace esas preguntas, pero estoy bien, gracias por preguntar.

— Si bueno, creo que me siento un poco más animado al saber que ya casi me iré.

— Sobre eso justamente quiero hablarte. 

— Adelante, aunque realmente no hay nada que pueda decirme que haga que cambie mi manera de pensar.

— Escucha YoonGi, si te vas tienes un 90% de probabilidades de tener una recaída, por el estado mental en el que te encuentras ahora. Una recaída se define como un regreso a los patrones de comportamiento y pensamiento típicos de la adicción activa, que ya se habían superado y que conllevan a volver al uso de la sustancia, volviendo al estado anterior a la recuperación. El abandonar una adicción implica cambiar comportamientos profundamente arraigados por lo que muchas veces, resulta fácil volver a ellos. Habitualmente, el proceso de recaída está formado por decisiones riesgosas que el individuo toma, y que, conectadas unas con otras, construyen la vía de recaída. Estas decisiones llamadas "de riesgo relativo", parecen poco importantes pero su efecto es acumulativo y van llevando a la persona a un punto imposible de resistir, donde el uso de las drogas será ineludible, ya que los márgenes de susceptibilidad se han sobrepasado. Cabe destacar que existe una línea imaginaria o frecuentemente conocido como "línea de no retorno" luego de la cual no es posible detener la conducta de búsqueda de sustancias y, por tanto, su uso es inminente.

— Bueno pero no me quedaré aquí a trabajar para darle todo mi dinero a usted ni a este lugar, prefiero irme y trabajar pero para mi y para JiMin.

— ¿Y si te ayudamos?... ¿Cambiarías tu manera de pensar?

— ¿Ayudarme?... ¿Cómo?

— Hablé con el director del hospital, Ji Cheol, Jong Suk, Si Won, Seok Jin y yo también formé parte de esta decisión. Hemos decidido apoyarte económicamente, solo tendrías que poner la voluntad, tu tratamiento será costeado enteramente por nosotros. Sabemos que has pasado por mucho y queremos apoyarte para que continúes tu tratamiento.

— ¿Q... que?... ¿Está hablando en serio? — Me quedé atónito y algo ofendido por su lástima hacia mi. — Lo siento doctor, pero la respuesta sigue siendo un rotundo no. No tengo intenciones de quedarme.

— Y... ¿si yo te lo pidiera como un favor personal?

— ¿De qué habla?

— Voy a sincerarme contigo YoonGi. — Soltó un suspiro. — Yo... me siento atraído hacia ti, física y sentimentalmente. Así que como de verdad te quiero no deseo verte mal, quiero lo mejor para ti.

Mis ojos se abrieron como platos al escuchar semejante confesión. No podía creer que de verdad eso estuviera sucediendo. Ni en mis sueños más extraños y bizarros me hubiera imaginado que el doctor Namjoon me iba a "confesar su amor".

— Carajo... no sé que decir.

— No te estoy pidiendo que digas nada, no es necesario. Tengo muy claros mis límites hacia ti como mi paciente. Solo por favor piénsalo y quédate, no quiero que tengas un final desastroso que se puede evitar.

— Esta bien. — Solo eso pude decir, aún seguía shockeado por sus palabras. — Lo pensaré.

Salí de allí con una sensación muy extraña, no sabía bien que era, pero definitivamente esa era una de las noticias más impactantes que había recibido. No podía creer que un hombre como el doctor Namjoon, pudiera sentirse atraído hacia mi. Es decir era como si no lo mereciera, después de todo el era estudiado y yo un vago cualquiera.

Tampoco podía dejar de pensar en que él tal vez era el único que me conocía de verdad a estas alturas de mi vida, es decir, era mi terapeuta, sabía absolutamente todo sobre mí. Me conocía desde que yo era un adolescente, sabía de mis problemas de drogas, de depresión, conocía mis trastornos metales, mis parejas sexuales, mis tragedias personales, en fin todo.

Y eso era lo que me intrigaba, me preguntaba ¿como podía ser posible que alguien que me conocía tan bien como para saber que estaba completamente jodido estuviera interesado en mí?

De tanto pensar y pensar en el doctor de pronto sentí algo extraño... en mi pantalón. Miré hacia abajo para descubrir que una erección comenzaba a formarse. Rápidamente la cubrí con mi camisa y caminé más rápido hacia mi habitación.

Me senté en la cama y sacudí un poco mi cabeza para sacar esos pensamientos de mi mente. ¿Quizás debería quedarme? ¡No! Que mierda estaba pensando. Tenía que irme de allí, tenía que volver con JiMin. Aunque... el doctor Namjoon no estaba nada mal, y era un doctor... ¡Un doctor! Yo jamás hubiera aspirado a estar con un hombre como él, quizás debía aprovechar la oportunidad.

Empecé a pensar en aquella ocasión en la que le contaba sobre como Taehyung me había follado. Recordé como se había formado una tremenda erección en sus pantalones. Por alguna razón yo estaba un poco descontrolado, es decir ni siquiera es como que estuviera necesitado de sexo ya que había tenido mi liberación con JiMin recientemente, pero me sentía muy urgido, estaba caliente, muy caliente.

No sé porque desde ese día con el menor en el patio había tomado el sexo como una forma de consuelo, necesitaba más, más sexo y más consuelo. Así que al pensar en el doctor y su pene no pude evitar que la erección a medias que tenía antes se convirtiera en una erección completa y dura.



DEPRESSEDDonde viven las historias. Descúbrelo ahora