Capítulo 3

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Justin estaba en su habitación preparando su uniforme con el cual se iba a recibir como teniente, después de largos años de entrenamiento, por fin se graduaría. No había hablado con Sonny desde la noche anterior, la cual le había dicho que le tenía una sorpresa preparada para él junto a las chicas. Sin saber que él le tenía una sorpresa también.

Hacía ya un año que conocía a Allison, habían formado una amistad extraordinaria, tanto que hasta dormía en su casa sin ningún problema, a su círculo de amigos se habían unido su hermana Danna y la hermana de Sonny, Zoey, ambas de diecinueve años.

Veían películas juntos, iban a parques de atracción, todo lo que sus tres chicas le pedían.

Habían veces en las que Sara, madre de Sonny, se les unía. Era una mujer que a sus 40 años, los cuales no aparentaba, tenia un aura de niña único, parecía otra joven del grupo de amigos. Justin la quería mucho, como a una madre.

Sus padres murieron, el papá cuando él solo tenia trece años y Danna apenas once, tras dos años de su muerte su madre se murió de una fuerte depresión, dejándolo a ellos solos, sin nadie, viviendo en un orfanato hasta cumplir la mayoría de edad.

Sacudió su cabeza tratando de disipar esos pensamientos y acarició lentamente el anillo de compromiso que compró hacía unos días. No estaba seguro de su idea pero se quería arriesgar. Él la quería y sabía que ella también lo hacía. Guardó la joya y se dedicó a terminar de vestirse, eran las ocho con seis de la mañana y la ceremonia sería a las diez.

***

-¿Verdad que están de lujo?- preguntó Sonny a su hermana y su amiga.

Estaban observando su atuendo para la ceremonia de Jus.

-¡Oh si!, están exactamente como los pedimos- respondió Zoey.

-Mi hermano va a morir cuando nos vea- agregó Danna

Ellas rieron de las disparatadas que inventaban y esa en definitivo era una de ellas.

-¿Chicas que esperan para alistarse?, son las ocho con cincuenta y dos de la mañana- avisó Sara asomándose por la puerta de la habitación de Zoey.

Todas pegaron un grito y se distribuyeron en los diferentes baños de la casa para alistarse.

****

-¡Joder!, ¿Dónde carajos están?- se preguntó Jus, sus chicas no aparecían y la ceremonia estaba por comenzar.

-Tranquilo hermano- le tranquilizó Liam, uno de sus compañeros -Ya verás que dentro de poco esos tres torbellinos entrarán por la puerta.

Ambos rieron y decidieron sentarse en sus respectivos lugares.

Sintió una mano posarse en su hombro y cuando volteó se encontró el rostro de Sara, rápidamente se paró a abrazarla.

-¿Cómo estás?- le dijo y le besó la mejilla.

-Muy bien, tesoro. ¿Y tú cómo te encuentras?- le contestó la mujer acariciando su rostro.

-Nervioso- los dos rieron -¿Y las chicas?- miró alrededor pero no las encontró.

-Están por llegar, se retrasaron y yo me adelanté. Pero no te preocupes llegaran a tiempo.

Se escuchó al maestro de ceremonias mandando a tomar asiento pues el evento comenzaría, Sara se sentó en su reservado y Justin miró nervioso todo el lugar nuevamente, pero nada.

Cuando todos se levantaron para cantar el himno del país, miró hacia el atrás y vio a sus chicas, por fin, tomando sus lugares. Se extrañó al ver que iban con chaquetas tapando su atuendo, pero no le dio importancia.

Dieron su discurso, cosas sin importancia para él, hasta que llegó el momento de los honores. Llamaron a cada uno por su apellido en orden alfabético.

Todos los de apellido que comenzaban con O, hicieron una hilera esperando su honor. Mientras espera su nombre vio que las chicas locas con las cuales se juntaba se pusieron de pie en sus sillas cada una.

-¡Vamos Justin!- gritaron al unísono, captando las miradas de todos.

Jus se dio cuenta el porqué antes llevaban una chaqueta. Estaban vestidas iguales las tres, vestido ajustado a su cuerpo color fucsia de tirantes, hasta medio muslo y usan una Converse negras. Pero lo que captaba más la atención era la frase del vestido.

Danna estaba del lado izquierdo y tenía la palabra TE en todo su pecho, Sonny igual en el medio con la palabra AMAMOS y por último Zoey a la derecha con la palabra JUSTIN. El espectáculo daba gracia, incluso el general al mando se rió de la bobada de las chicas.

¿A caso creían que estaban en un partido de fútbol?

-¡Joder, hermano!, que suerte tienes- dijo un compañero.

-Sí que la tengo- dijo mirando a sus chicas.

-Comparte, ¿por qué no me das una?- lo mira con el ceño fruncido -No me mires así, ¿por qué no me prestas a la castaña que está en el medio?- agregó refiriéndose a Sonny.

¿Acaso este tipo está loco?, se preguntó, son mis chicas y no se las voy a ceder, ¿Qué clase de loco haría aquello?

Y que le guste Sonny es algo que el no toleraba, ¿Cómo podía si quiera imaginar que Danna era su chica?

¡Joder!, si se parce a mí, pensó.

-No molestes, Brat, déjalas tranquilas- le contestó molesto.

El chico levantó las manos en forma de tranquilidad.

La ceremonia continuó y todos recibieron sus honores. Cuando acabó se acercó a su familia y la primera en tirarse a sus brazos, fue Danna.

-¡Felicidades, hermanito!- le lleno la cara de besos -Estoy orgullosa de ti, pero espero que nunca te llamen para defender al país- todos rieron.

-Eso lo veremos con el paso del tiempo- contestó..

Se soltó de ella y abrazó a Zoey y Sara, que lo felicitaron. Llegó hasta a Sonny y esta se lanzó a sus brazos, se enganchó a él como un koala y el rió. Tuvo que batallar para que no se le viera todo cuando la tenía en sus brazos.

-Felicidades, campeón- le dio un beso sonoro en su mejilla izquierda.

-Gracias, pequeña- la dejó en el piso, no quería que le vieran nada -¿Sabes?, tengo algo que decirte.

Ella esperó que dijera lo que tenía que decir y él se puso nervioso. Estaba bajo la mirada expectante de Sonny, Zoey, Danna y Sara.

-Jus, te quedaste pasmado. Estoy esperando- se cruzó de brazos.

Bien, aquí vamos. Pensó para sí.

-Sonny, cuando te conocí me pareciste una chica diferente y no me equivoqué, en este año que llevamos de amistad te he agarrado un cariño mas que el de un amigo, te quiero, de verdad que sí y aquí delante de nuestra familia. Por que sí, esta es nuestra familia- señala a las demás -Te que...- fue interrumpido.

-¿Que si quiero ser tu novia?, claro que s...- la interrumpida fue ella esa vez.

-¡No!

-¿No?

-No. Lo que te quiero preguntar es- se puso de rodillas y sacó la cajita de su bolsillo -¿Te casarías conmigo?

Le mostró el anillo y la cara de Sonny fue épica, estaba asombrada, en cambio las demás estaban emocionadas.

-¿Sonny?- dijo nervioso al ella quedarse callada.

-Jus... no... si... no...¡Aggh!- se estrujó la cara -¡Joder!, ¡Sí!, sí me quiero casar contigo, Justin.

El corazón de Justin volvió a su lugar, se levantó, le puso el anillo y Sonny se abalanzó sobre él. El beso que se dieron era el mejor que había tenido él en su vida. Se había imaginado tantas veces besándola, pero definitivamente vivirlo era mejor.

Se escucharon aplausos y se separaron para mirar alrededor, varias personas que estaban en el salón de eventos, se habían quedado para mirar la propuesta. Las chicas que lloraban se abalanzaron hacia ellos para felicitarlos.

Ese en definitiva era el mejor día en la vida de ambos.

Amor y Dolor IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora