¿Amigo?

Y las duchas con él se hacían largas...

Impulsivamente la irritación se hizo presente

- Dime...

- (Me interrumpió) hostia ¿ya acabaste mi amor? (rio de manera exagerada)

- ¿De qué vas? (di un manotazo sobre su pecho enjabonado) ¿te has divertido mucho hijo de puta?

- Lo siento de verdad (se mostró apenado con ciertos rasgos incluso de arrepentimiento, me lo estaba creyendo hasta que su expresión cambió radicalmente) pero... pero sí, ha sido genial

Me mordí el labio procurando contener la posible reacción que podía tener, a causa de la ira que él había detonado en mí, sin embargo, antes de contestar Melendi me pidió

- No me trates con rencor mi amor, porque tampoco ha sido para tanto

- ‎Me las pagarás... ¿eres consciente no?

- No, es que Malú entiende que esa escena ha sido la más antierótica que he visto y escuchado jamás... no has sido capaz de mirarme ni un instante y bueno tu relato con... con improvisaciones fuera de lugar... el tono monótono y aburrido... me dormías cariño... y no me digas que no sabes, porque otras veces me has vuelto loco sólo con hablarme dos palabras... y es que de verdad poner cachondo a un hombre es lo más fácil del mundo y... y perdona pero yo he estado a punto de dar el agua fría ahora para silenciarte a ti porque eras terrible... tus intenciones fueron buenas y las frases subidas eran interesantes sin embargo, el envoltorio era lo peor... no me empalmabas me la encogías y eso es difícil en mi caso...

Al segundo añadió intentando arreglarlo

- Pero oye todo hay que reconocerlo... los gemidos amor mío (silbó) han sido inmejorables

- ‎Es lo que tiene haberlos practicado tanto últimamente... me acostumbré a fingirlos contigo, era necesario

- ‎No, no... eso no te lo crees ni tú (sonrió decidido con aires chulescos) estás mintiendo (procuró autoconvencerse)

- ‎Piensa lo que quieras... ese no es mi problema... (me mostré indiferente)

- No, Malú no... (negó tajante) ¿a qué no es cierto?

- ‎Te repito Melendi, tú opina lo que te parezca oportuno, que yo sé mi verdad y es la única que me importa

- ‎Malú por favor (me agarró de ambos brazos arrimándome a él) sé sincera... (suplicó con cierto matiz emotivo en sus palabras) confiesa que pretendías engañarme...

- ‎Siendo tan experto en sexo como manifiestas... deberías saber discernir ya entre un orgasmo femenino real y uno fingido... bueno quizá es que nunca presenciaste uno real entonces no puedes comparar (afirmé canalla quitándole la esponja que él volvía a sostener entre sus dedos)

- ‎Malú esto es un tema serio, lo de antes fue simplemente una broma estúpida sin embargo... sin embargo lo que insinuas... joder me preocupa no complacerte...

Terminé de enjabonarme el cuerpo en silencio ante unos atentos ojos clavados sobre mi desnudez, por eso intencionadamente intenté impregnar mi anatomía con aquel gel de manera sensual, tocándome más de lo necesario... para provocarle siendo consciente de que le dejaría con el calentón, pero él insistía ávido por corroborar o desmentir mi contestación para salvaguardar su ego masculino, actuando con abatimiento y pronunciándose nuevamente con tono infantil

- Malú hazme caso... respóndeme... ¿estás enfadada conmigo? te quiero

- No... (sonreí para después colocar mis labios en los suyos, besándolo con intensidad unos segundos para demostrárselo)