NUEVAS REGLAS [+18]

Capítulo XX

ESPECIAL 2/2

—¿Y los chicos? —pregunté mientras comía lo que habíamos ordenado y miraba el panorama que se extendía a nuestros pies.

—No tienes que preocuparte por ellos. —dijo sonriendo mientras bebía un sorbo de su bebida.

—¿Cómo harán con la comida? —De verdad estaba preocupada por ellos, no sabían hablar español por lo que no creo que pudieran pedir comida y tampoco sabían la dirección de mi casa.

—Le pedí a nuestro mánager que les llevara comida. —Eso me dejó un poco más tranquila—. Ya no hablemos de ellos, hablemos de nosotros, quiero conocerte. Me gustas Aysel. —Ante su repentina confesión terminé ahogándome con mi bebida.

—No se ¿qué quieres saber? —pregunté algo insegura, no había mucho para contar.

—Pues... —dijo pensativo—. ¿Nunca has tenido novio? —Su pregunta me sorprendió ya que no pensé que empezaría por ahí.

—¿Quién en este mundo a esta edad no ha tenido novio? —dije de manera irónica—. Cuando fui más joven era muy enamoradiza y debido a mi baja autoestima siempre caía cuando un chico me decía palabras bonitas, entonces empezábamos a salir pero al poco tiempo me dejaba por otra chica. —Terminé por confesar mi pasado romántico, algo que quería mantener oculto por vergüenza.

—Tienen que haber sido unos idiotas. —Siwon trató de empatizar conmigo y su gesto fue muy tierno.

—Al principio dolió mucho, nunca me consideré una chica atractiva por lo que estaba agradecida cuando alguien se fijaba en mi. Después con los años empecé a prestar atención a otras cosas y dejó de importarme, es por eso que ahora estoy sola. —Después de todo había resultado todo en una acción positiva—. ¿Y tu? —Sabía la respuesta pero quería escuchar la historia detrás.

—Actualmente estoy solo, la verdad es que el trabajo no me permite demasiado tiempo para conocer a alguien. Cuando no es la filmación de algún drama es un viaje al extranjero para algún show. —comentó mientras seguía comiendo lo que restaba de nuestro pedido.

—Eso es más triste que lamentable. —dije con algo de pena.

—Para todos nosotros es igual, si bien queremos formar una familia no podemos dejar de lado nuestro trabajo que es algo por lo que luchamos mucho. —Terminó de comer y se recostó sobre mi falda de nuevo.

—En eso tienes razón, pero estoy segura que cuando menos lo esperen la chica indicada llegará a sacudir sus mundos. —En el fondo es lo que siempre pensaba cuando me sentía mal por estar sola.

—¿Y si te digo que la tengo frente a mi? ¿Qué dirías? —Su expresión se volvió seria por completa.

—Que tienes que dejar de filmar tantos dramas románticos. —dije sonriendo a lo que él estalló en una carcajada.

—Eres única, tienes una personalidad bastante llamativa, creo que entiendo porqué todos, incluso Shindong están locos por ti. —Eso me sorprendió y realmente no sabía como tomar aquellas palabras.

—¡Bueno! —dije juntando mis manos para cortar un poco el ambiente—. Ya ha pasado bastante tiempo de que terminamos de comer ¿qué sigue ahora? —Era curiosa por saber qué más había preparado pero estaba más apurada por cambiar el rumbo de la conversación.

—Voy a dejarlo pasar por ahora. —Sonrió de una manera que me hizo saber que no se quedaría con la conversación que tuvimos, él buscaría la forma de seguir incomodándome, ya me lo había dicho—. Levantemos esto y nos pongamos en marcha. —dijo recogiendo los restos de basura y buscando algún cesto dónde tirarlos.